beautiful mistake. » h.s

9.

Narra Kim.

-¿Qué ha pasado?- Bonnie y Candy bajaron correteando por las escaleras.-Oh dios mio, llamamos a la policía.- Se acercaron a mí moviéndose agitadas.

-¿Que hicisteis qué? ¿Llamasteis a la policía?- Las miré enfadada y preocupada a la vez.-¡No deberíais de haberlo hecho!- Aumenté el tono de voz apretando mis puños, pero ahora que lo pensaba.. Ellas solo querían ayudarme y yo estaba ahí, echando la bronca, ellas me miraban asustadas, aflojé mis humos y mis puños volvieron a ser palmas de nuevo.-L-Lo siento..-Suspiré mirando hacia abajo, ambas se acercaron y me abrazaron. Justo lo que necesitaba.

-¿Qué te dijo ese cabrón?- Me preguntó Candy separándose un poco de mí.

-El problema de esta mierda en la que estoy metida es que ni yo sé el motivo.- Las miré seria.-Sabe absolutamente todo de mí, y en esto está metido mi tío. -En ese momento, como si lo hubiera invocado, mi tío apareció por la puerta, tirada en el suelo.

-¿Qué mierdas pasó aquí?- Mis amigas alucinaban, por lo que decidieron irse de allí, salieron y se escabulleron.

-Harry, Harry Styles estuvo aquí.- Dije seria sin mirarlo mientras me sentaba en el sofá.

-¿Ese cabrón te tocó?- Aumentó su tono de voz acercándose a mi y pasando por al lado del cuerpo sin vida como si le importara bien poco.

-No me tocó tío, vino a dejarme lo suficientemente claro que me conoce más de lo que yo pensaba, y que la guerra a empezado.- Noté como los músculos de mi tío se tensaron al igual que su mirada y su mandíbula, reí irónicamente. -Lo más gracioso de todo esto es que ni yo se que tengo que ver en esto, NO LO SÉ.- Repetí mirándolo. -Y quiero una puta respuesta.-

-Styles quiere guerra ¿Verdad?... Pues guerra tendrá.- Apretó sus puños evadiendo mi pregunta.

Narra Harry.

Michael y Justin volvieron con lo que pedí.

-Justin, tú y yo en la oficina, ya.- Me levanté del sofá y entré en mi oficina dando un portazo. Tenía que corroborar que mi plan estaba marchando sobre ruedas. Al minuto, Justin apareció por la puerta cerrándola tras de él.

-Va todo sobre ruedas Harry.- Corroboró.

-¿Se lo está tragando?- Dí golpecitos con mis dedos en la mesa de escritorio y el asintió.-Por tu bien, y sólo por tu bien, no acabes enamorándote, las reglas son así, nadie de aquí se enamora, y tu no eres más que nadie, mucho menos más que yo.- Lo miré serio y el asintió. -Cuando la tengas prácticamente en el bote, avísame y pondremos en marcha el siguiente plan, ¿Estamos?- Llené una copa de Voodka que había sobre la mesita y le ordené que moviera su trasero fuera de la oficina.

Una vez más, iba a triunfar, las armas eran perfectas, junto con una banda perfecta y añadiendo un plan perfecto.

Narra Kim.

Me encontraba sentada en el sillón frente a la chimenea, ya que el día se presentaba realmente frío, un domingo helado. Acababa de hablar con Candy lo que significaba una media hora contándome lo perfecto que era ese tal Justin, yo asentía vocalmente mientras leía, en resumen me enteré de poco.

Como de costumbre, Simon no se encontraba en casa, de nuevo sola... La puerta ya estaba arreglada, mi tío me mandó un mensaje que decía así;

"Kim, haz algo de comer para ti sola, no apareceré por allí, tengo asuntos pendientes. S"

Perfecto, sola. Mi tío era el típico hombre de 45 años que se mantenía realmente bien, fumaba mucho la verdad, y seguro también bebía fuera de casa. Era la persona más misteriosa que pisaba este planeta tierra, a veces llegaba a pensar que su corazón estaba echo de hierro o cualquier otro material, se podría decir que el no sentía por nada ni por nadie, nunca lo he visto derramar ni una sola lágrima, incluso creo que ni en el.. El velatorio de mis padres. Él guardaba grandes secretos que algún día estaba decidida a descubrir.

Recibí un mensaje proveniente de un número privado que decía lo siguiente;

"Preciosa, espero verte mañana. H."

Mañana tendría visita en el trabajo, y no sería muy agradable.

Narra Harry.

Dormí todo lo plácidamente que se puede siendo un tipo como yo, no sábes cuando te atacan pero si cuando atacar. Como dije, ese día iría a hacerle una visita a Kim simplemente porque sí.

Me di una ducha rápida y me coloqué unos pantalones ajustados negros acompañados por una camiseta del mismo color y una bandana marrón en el pelo colocando mis rizos de forma que pocos se escaparan.

Salí del almacén subiendo a mi Audi negro y reluciente, pisé el acelerador y cuando quise percatarme ya me encontraba manejando por la fría mañana londinense.

Llegué a la tienda y entré haciendo sonar el timbre, al momento una señora de mediana edad salió al mostrador con una sonrisa simpática, era su trabajo.

-Buenos días, ¿Puedo ayudarle?- Se acomodó sobre la encimera sin perder su compostura sonriendo amablemente.

-No, sólo voy a mirar, gracias.- Sonreí forzadamente, seré un cabrón, pero un cabrón educado, no en todas las ocasiones pero... 

Me dirigí hacia el pasillo de boxeo, guantes de todas las maneras y sacos...El paraíso. Cogí unos guantes negros y me los coloqué para después dar algunos golpes al saco desatando la furia que inexplicablemente se apoderaba de mí esa mañana.

Narra Kim.

Llevaba ya un rato trabajando, el reloj de pared marcaba las 11:00 a.m, todo estaba muy tranquilo, la gente entraba, ojeaba y salía con algo en las manos, cosa que nos beneficiaba. Me encontraba probando algunos balones de baloncesto antes de colocarlos en el estante cuando escuché unos golpes sordos, fruncí mi ceño y me dirigí obviamente al pasillo de boxeo. Giré la esquina. Sus rizos sobre su frente, sus ojos verdes esmeralda tornados oscuros, dando golpes sordos al saco de boxeo. Harry.

-Q-que haces aquí.- Pregunté sin más, creo que era la pregunta más tonta que había echo en mi vida, el rió despojándose de los guantes de boxeo.

-¿Que crees que hago tontita?- Me miró con la mirada igual de oscura y acomodó sus rizos.-Pruebo el saco y los guantes.- Dió otro golpe al saco pero esta vez sin guante.

-¿Eres boxeador?- Pregunté, me daba miedo su esbelta figura,pero las preguntas salían sin más inevitablemente.

Se encogió de hombros. -Quién sabe, tal vez sea solo un hobbie.- Sonrió lobunamente. -O tal vez me esté preparando para algo, nadie lo sabe.- Su mirada se plantó en mi mientras yo intentaba que nuestros ojos no conectaran.-Mírame.- Cogió mi rostro bruscamente e hizo que lo mirara conectando nuestros ojos.-Vigila al enemigo, porque el enemigo te vigila a ti.-

___________________________________

Amores! Si,si, se que hoy es lunes y el capítulo debí subirlo ayer..Pero tuve algunos contratiempos con Wattpad, no se me guardaba y tuve que hacer la mitad del capítulo de nuevo.. Pero bueno,aquí lo tienen(: No fue gran cosa, narré un poco de los dos para que vean como son sus vidas más o menos. Tengo muchas ideas pensadas y les sorprenderé mas adelante,eso espero xdxd

No saben lo feliz que me hacen vuestros votos y comentarios, realmente son un gran apoyo y ánimo a seguir adelante con la fic, gracias por vuestra fidelidad a esta novela♥

PD: Este Harold me pone demasiado, pero es un poco cruel no creen?:S

PD2; El miércoles tendrán su capítulo(:

PD3: Os quiero:3