En cuanto Zayn me escucho se quedo quieto y poco a poco levanto el rostro. Segundos despues tenia sus brazos rodeando mi cintura y podia sentir sus leves sollozos en mi pecho.
-Zayn, quiza despues de esto el portero este furioso- susurre acariciando su cabello azabache.
Él solo levanto la cabeza y me miro a los ojos, los suyos estaban tan rojos que me senti demasiado culpable como para poder decir algo más.
-¿Por qué viniste?- pregunto a la vez que me soltba y volvia a sentarse en su cama.
Me dieron ganas de gritarle todo lo que habia tenido que hacer para venir aqui y todo para no dejarlo solo, pero en lugar de eso respondi con un susurro:
-Crei que quizas eso esperabas.
Zayn cubrio su rostro con las manos unos segundos y despues me indico que me sentara a su lado. Me quite el saco y olvide que traia un osito, en cuanto lo vi de nuevo, lo tome y lo abraze contra mi pecho.
-No es que esto me moleste, al contrario, es lo que necesitaba, pero bebé, nunca he permitido que alguien me vea, ya sabes, debil y es un poco incomodo.
-Comprendo- murmure dandole al pequeño osito-. Bueno, Louis me esta esperando, no quiero dejarlo colgado- dije mientras cogia el saco y daba un fuerte suspiro.
-Ni, espera- escuche a Zayn pedir en cuanto gire el pomo de la puerta de su pieza.
Me detuve y voltee a verlo, seguia teniendo los ojos rojos y en serio que eso me dolia, pero me dolia más el hecho de que me considerara un extraño.
-Lo... lo siento, hable sin pensar y crei que tu como todos los demas, me harias daño- murmuro con la cabeza gacha- ni siquiera puedo mirarte a los ojos, te juro que lo siento.
-Zayn, sabes que jamas te haria daño, no importa si tu me haces daño, yo siempre te perdonaria como un idiota, pero tambien sabes que puedes confiar en mi, para lo que sea, yo se cuan fragil puedes llegar a ser, por que todos lo somos, y es por eso que estoy aqui, en cuanto me llamaste supe que no era normal, no lo pense demasiado y sali de la estupida fiesta de mis padres junto con un chico que habia conocido hace diez minutos, solo por que sabia que no eras el Zayn de siempre, sabia que estabas solo y probablemente asustado, y aunque no sabia el por que de ninguna de ambas opciones crei que seria bueno venir y ver que pasaba, ya que crei que confiabas en mi.
Habia dicho todo eso con un nudo en la garganta al ver a Zayn tan indefenso, justo como un cachorro.
-Yo... yo no puedo dejar de pensar en cuanto te amo, pero entonces recuerdo todo, y me repito que no puedo confiar en nadie, y ahi recuerdo tu sonrisa, tus ojos, lo bien que me haces sentir, el dolor que senti cuando tus padres llegaron, y... es entonces cuando se que eres diferente, y una parte de mi me dice que soy un idiota por creer eso, que solo... solo puedes hacerme más daño entre más te quiera, pero otra parte tambien me dice que soy un idiota, pero por no aprovechar cada momento contigo, por no ser el causante de cada una de tus sonrisas, por seguir teniendo miedo de ti, de lo que causa en mi, de ser debil cuando tu no estas conmigo.
No se en que maldito momento comence a llorar pero justo ahora no podia parar. Me senti la más completa mierda de este planeta, Zayn solo estaba asustado y yo lo presionaba tanto.
Senti el saco deslizarse entre mis manos y comence a caminar hacia donde estaba Zayn, me sente a su lado y lo unico que pude hacer fue abrazarlo, abrazarlo hasta que ya no sintiera más miedo.
-Ni...
-¿Si?- pregunte tratando de tragarme el nudo que tenia en la garganta.
-Tu, tu no me vas a dejar ¿verdad?- esas ocho palabras me habian dolido más que aquella vez que me rompi el brazo derecho.
-Nunca- susurre pero se me hizo tan poco que volvi a hablar-. Lo prometo.
-¿En serio me lo prometes?- pregunto todavia con aquella voz fragil.
-En serio te lo prometo, Zaynie.