Don't judge me

Capítulo 5.

Ahora estaba sentada en una silla de la enfermeria escolar.

Maldito olor a medicina, inyecciones y enfermos moribundos.

La enfermera bastarda sentada frente a mi, paso un trapo, o bueno, una toallita humeda por mi frente.

Auch!

Cuando la separo de mi cara para doblarla y poder usar la otra parte, la vi, llena de sangre.

¿De dónde salió tanta sangre? No aterrize con mi cabeza, o eso creo.

Mi cabeza daba vueltas, no entiendo porque tanto dramatismo. Acaso soy de papel o qué.

En fin, sali por mi propio paso de la enfermeria con un esguinse en la mano izquierda. Mal momento para ser zurda.

-¿Qué tal? ¿cómo salio todo? ¿te sientes mejor?- ese era Michael.

Oh. Por. Dios.!!! ¿Estuvo aquí todo este rato?, ¿en verdad cuido de mi?, ¿Falto a clases para esperarme?. O sólo iba pasando por aqui y no quiso ser descortes.

-Mucho mejor, gracias- conteste -al menos mi cabeza ya no da vueltas.

Sonrió ligeramente -¿te acompaño a tú salón?-.

-En realidad- mire mi reloj- es hora de receso, pero muchas gracias, en verdad, por todo!- le sonreí amablemente.

-No hay nada que agredecer, pero si quieres hacerlo dejame acompañarte este receso.

¡¿En serio?!  ¿No se le ocurrio algo diferente? 

Aunque bueno, es bastante lindo (y emocionante) que quiera estar conmigo.

No te emociones demaciado Allison, sólo intenta ser amable. No esta enamorado de ti, ni nada por el estilo.

Estuvimos sentados todo el receso juntos mientras desayunabamos, no se emocionen, no paso la gran cosa exepto que me besó.

Nah mentira, ojala.

Conversamos un rato sobre la caida, el esguinse, y un poco de la escuela. Cuando el timbre sono, me acompaño a mi aula y antes de despedirse con un beso en la mejilla me pidio mi número de telefono y se fue.

¤Es un capítulo corto, lo se y lo siento¤