Hades.
Su cuerpo semi desnudo está pegado al mío.
Su cabello rubio cae por su espalda.
Las llemas de mis dedos acarician su cintura,
Arriba y abajo.
¿Como es qué todo se volvió tan rápido?
¿Estoy soñando?
Ahora mismo podría sentir tantas cosas,pero la único qué sé es qué no quiero qué esté momento se acabe. No quiero despejarme de ella,ahora no. No quiero desaparecer la magia qué hay entre nosotros,no quiero desperdiciar este momento,lo necesitaba tanto.
¿Qué somos?
¿Somos o no somos?
¿De verdad mi corazón late tan fuerte cuando te veo?
Puede parecer un cursilería,pero con ella todo es distinto. Mi mundo negro cae en rosa cuando sonríe,la dulce sonrisa de ella me pone el pecho a mil,esos ojos azules penetran todo mi ser y lo peor de todo eso es qué lo amo con todo mi alma.
Mierda.
Estoy tan feliz con esta chica.
—¿Estás despierto?
Ella susurra,dándose la vuelta,sus ojos mirándome.
No me mires...
¿Por qué eres tan hermosa?
Con una voz burlona contesto,—Creo qué si.
—Necesito irme,—Ella coge mi camiseta para ponérsela,—De verdad,necesito irme.
¿Qué?
Desesperada se levanta,acomodándose mi camiseta que lleva puesta,su mirada se pierde en mi habitación como si buscara algo.
Le agarro el brazo para que me mire,—¿Qué sucede?
Ella se queda un instante quieta y entonces habla con la mirada fija al suelo,—¿Qué quieres de mí Hades?
Y esa la pregunta más inteligente.
¿Qué es lo qué quiero yo de ti?
No lo sé Ariel.
Sólo se que sí te vas,
No sé si seguiré adelante.
—¿Qué quieres tú de mí?—Trago grueso,—No soy el único qué sigue esto.
Ariel quita mi brazo del suyo de mala gana,pero la vuelvo agarrar,—¿No vas a responder?
—No quiero ser alguien que olvides mañana.
¿De verdad ella pienso eso?
—¿A qué viene esto?,—Ayer decías todo lo contrario,dime,¿Que pasa?
—Nada,Déjalo.—Se zafa de mi agarre de nuevo.
La e fastidiado.
Por qué tengo que ser tan idiota.
Cierro la puerta de la habitación antes de que se vaya. Me pego en la puerta cruzando mis brazos,—Tengo todo la hora para estar aquí.
Ella rueda los ojos y me parece lo mas sexy he e visto en mi vida.
—¿Enserio me vas hacer esto?
Asiento la cabeza con una sonrisa.
—¿Qué quieres Hades?
—¿Qué quieres tú Ariel?
—Salir de aquí.
