Cuando llegué a casa después de una muy larga mañana en Abelthom High School vi mamá me había dejado un vaso de jugo y un plato con galletas sobre la mesada de la cocina. Sonreí contenta por el dulce gesto y comí agradecida, había almorzado poco en el colegio y en verdad tenía mucha hambre.
Luego de haber lavado el vaso y el plato de mi merienda corrí a mi habitación a cambiarme. Apenas había alcanzado a quitarme el uniforme escolar cuando mamá me llamó.
-Ren, hija, ¿podrías por favor ordenar tu habitación hoy? Tendremos invitados a cenar.
-¿Quien vendrá? -pregunté mientras me ponía mi vestido floreado favorito.
-Tu tía y tus primas, así que espero que sepas comportarte.
Mierda. ¿Por qué justo hoy el destino tenía que ser maldito conmigo? ¿Por que mamá invitó a esas brujas a casa? ¡Sabe que nos odiamos! y espera que sepa comportarme. Eso es imposible, esas tres víboras venenosas no hacen más que provocarme, les fascina ver que mamá me reprenda y me castigue.
La ultima vez que nos vimos fue para el cumpleaños de los gemelos, mi tía se pasó todo el rato repitiendo lo mucho más bonitas que sus hijas eran y otras dos arpías decidieron entretener a los invitados de la fiesta empujándome sobre los dos pasteles de cumpleaños. ¡Fue vergonzoso! Mi vestido, mi cara y mi cabello estaban llenos de crema de chocolate y una fresa se me había metido en la nariz.
Espero que esta noche nada parecido suceda, porque como mi vestido favorito termine manchado con algo hoy, juro por todos los números que me vengaré de esas brujas y no me importa que tan fatídico sea el castigo que luego reciba.
La limpieza de mi habitación la comencé por mi cama, cambié las sábanas y acomodé todos los cojines, luego organicé mi pequeña biblioteca y desempolvé sus estantes, guardé mi ropa limpia y puse a lavar la sucia, barrí el piso y tire cientos de envoltorios de galletas y golosinas y, por último, ordené mi escritorio.
Por lo general, si le preguntas a cualquier adolescente, te dirá que el mueble preferido de su habitación es su cama, pero el mío es mi escritorio. No tiene nada impresionante, es de madera tallada y lustrada, tiene cuatro cajones y un compartimento secreto, en el cual guardo un cuaderno con todas las canciones que he compuesto desde que tengo catorce años. Mi escritorio siempre esta desordenado, lleno de papeles con dibujos, vasos sucios vacíos, paquetes de galletas, tapitas de botellas, lápices, más papeles, frascos de perfumes y muchas cosas más. Amo mi escritorio porque siempre tiene lugar para más cosas. Lamentablemente, hoy me tocó ordenarlo.
Empecé por separar las cosas en tres: las cosas importantes y que debo guardar, las cosas que debo tirar y las cosas que no tengo idea que son así que debo analizarlas antes de guardarlas o tirarlas.
Uno se sorprende de las cosas que encuentra en su posesión. ¡Que facilidad de juntar basura tengo! Trabajos escolares de años anteriores, cupones de descuentos vencidos, un billete de un dólar falso que tiene escrito mi nombre, collares de fideos que me regaló la hija pequeña de mi vecina, basura, basura, y más basura. Lo único que pude guardar de todo lo que había en mi escritorio fueron los perfumes, las partituras para el teclado y tres púas de mi guitarra, el resto era basura.
Suspiré agotada luego de tres horas intensas de limpieza profunda, era encantador y casi relajante el olor a limpio que me rodeaba. Limpiar es aburrido y feo, pero a regañadientes debo admitir que todo se ve mejor cuando está limpio.
Me senté de piernas cruzadas sobre mi cama, mi ordenador encendido frente a mi e iniciando sesión en Tumblr, Twitter y Wattpad (oh, sí, soy adicta a los fan-ficción de One Direction y Teen Wolf) (Harry y Stiles son mi muerte) (Amo más a Harry pero si conozco antes a Dylan O'Brien me caso con él sin dudarlo).
"@RenRen_: @NannnniBrue te amo con toda mi vidaaaaaa, gracias por ser la mejor hermana que mi mamá nunca me dio <3 <3"
"@RenRen_: esta noche cenaré con víboras venenosas, espero que no me piquen"
Pasé una hora (que se me pasaron como cortos malditos minutos) leyendo las nuevas actualizaciones de mis fanfics preferidas y luego me puse al corriente sobre la vida de mi persona favorita (Harry Styles, amor de mi vida, futuro padre de mis hijos, te amo, te amo, te amo). Cuando mamá me llamó para poner la mesa apagué mi ordenador y lo dejé sobre mi escritorio.
Estaba por apagar la luz de mi habitación y cerrar la puerta cuando noté que me había quedado un papel rosa tirado en el piso junto a la cama. Me volví a recogerlo y lo guardé en el pequeño bolsillo que mi vestido tiene sobre mi pecho izquierdo. Lo tiraré más tarde, pensé y fui a ayudar a mamá con la preparación de la cena (¿se dará cuenta mamá si enveneno los platos de las tres brujas?).
**ABURRIDO Y MUY CORTO, LO SÉ, PUBLICARÉ MÁS EN UNOS DÍAS**
**¡¡PRONTO HARRY ENTRARÁ A LA HISTORIA!!**
**POR FAVOR, VOTA Y COMENTA SI TE GUSTA**
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Mi nombre es Ren {h.s.}
FanfictionRen, una chica como cualquier otra, o casi como cualquier otra. Ella era el clásico ejemplo de la chica solitaria y sin amigos y, además, era una fanática. Si, Ren era una fan más de la mundialmente famosa banda One Direction. Lo único que la hacía...