My everything// Gilbert Blythe

Chapter 13: Promise I'll never leave

Los días han pasado y no hemos vuelto a ver a la chica soñadora de cabellos rojos.

Las clases pasaban, y realmente sentía que mi animo estaba mucho mejor, me abría más con mis dos mejores amigos, tanto Luke como Cass están felices conmigo y el hecho de que nuestra confianza es mucho mayor que nunca antes.

Mamá me había estado dejando cuidar a ambos Blythe, me importaban ambos, demasiado. Ella se estaba quedando en el hogar de los abuelos últimamente, era demasiado el trabajo en la tienda.

Me daba un tiempo en el día a ir o a la mansión o a casa de Will y Jo. Pocas veces John obligaba a Gilbert a ir conmigo.

Después me quedaba en el hogar Blythe, lugar donde había terminado por traer a Cora conmigo.

Y repetía el proceso al volver a la escuela.

Todo se estaba volviendo algo consecutivo, pero lo amaba por el hecho de tener a gente tan maravillosa a mi lado.

Esta tarde, haría algo diferente. Tomaría una dirección diferente esta vez, iría por el gran bosque encantado, simplemente para un pequeño cambio, luego de haber hecho mis tareas en casa y haber ayudado en la del hombre Blythe y Gilbert, me dirigí a mi misión.

El camino se estaba volviendo algo aburrido, hasta que escuché una voz femenina.

Me dirigí a ella, atenta a cualquier cosa, encontrándome con una pequeña cabaña, decorada al natural y realmente acogedora.

Hasta que reconocí aquella voz.

-¿Anne?- pregunté en alto, inmediatamente la chica sale sonriente, su sonrisa parecía no caber en su cara.

-¡Ela!- exclama emocionada corriendo hacia mí, me abraza con fuerza entre sus delicados brazos- oh, es maravilloso volver a verte, lady Katherine, pensé nunca lo volvería a hacer- murmura melancólicamente.

Reí un poco- creí lo mismo, Cordelia- lucía feliz de ver un rostro conocido. -¿Por qué no has vuelto a clases, Anne? ¡Me tenías realmente preocupada!- exclamo con algo de molestia en mi tono.

-Lo lamento tanto, simplemente tuve miedo, no encajo ahí, nadie me quiere ahí y sencillamente no quiero estar, me quedare aquí por siempre- farfulla escondiéndose en la cabaña, invitándome a entrar.

-No creo que sea buena idea, Anne, tarde o temprano se darán cuenta- suspira ante mis palabras- tan solo no hagas caso, tú vas a tus cosas, que la amargura permanente del profesor Philipps no tenga repercusión en ti, pero... ¡qué buen golpe le metiste a Gilbert!- río un poco y esta rueda los ojos.

-Ese entrometido- murmura molesta- lo único que intenta es hacerme la vida imposible.

-No creo que sea así, Cordelia, pero en todo caso no dejes que lo logre- comento y ella asiente, dándome la razón.

-No sé si sea el momento indicado para volver, Elaine, creo que me quedaré un tanto más, ya veré cuando sea adecuado- hago una mueca ante lo dicho.

-Está bien- me rindo finalmente- pero espero sea pronto- le sonrío contenta y corresponde.

Y seguimos hablando, toda la tarde, haciendo que creamos que fueron solo minutos.

Anne Shirley Cuthbert realmente era una chica particular.

(...)

You'll be safe on this arms of mine, just call my name and I'll run to you