Por Un Gato

2. Su héroe

Cuando llegaron, todos los presentes se encontraban en medio de un debate sobre algo que ellos aún no sabían. Pero al dar el primer paso todos dirigieron sus miradas a los brazos de Jackson, quien traía un pequeño bulto dormido. Durante el camino el kanima le quitó a la gata y se negaba a regresar la gata a Stiles, a fin de cuentas parece ser que si tenía sentimientos.

Ninguno hablaba solo veían a la bola blanca, pasaron unos minutos en los que se hicieron largos y cada que pasaba el tiempo Stiles iba perdiendo la paciencia, no es como si tuviera mucha pero algo era algo, hasta que realmente se cansó y dijo:

- ¿Qué es lo que ven? ¿Acaso nunca han visto aun gato? - Preguntó rodando los ojos y soltando un pequeño bufido, al parecer pasar tiempo con Derek le ha afectado un poco.

Todos dieron pequeño brinco al oír las palabras de Stiles, no se habían dado cuenta que se habían quedado callados sin creer lo que estaban viendo.

El primero en hablar fue Scott.

- Stiles, ¿En serio compraste un gato? - Dijo con cara de sorpresa pues no creía que fuera cierto

- No, fíjate que cuando iba de camino a comprar el gato pensé que sería mejor tener una rata gigante - Soltó con sarcasmo ganado que lo fulminaran con la mirada - Obvio compre un gato ¿A caso no los conoces?

-Claro que sí, pero no creí que fuera cierto...

-Pues lo es, mira - dijo sacando al gato de los brazos de Jackson poniéndola en el piso - Pero primero a lo que venimos...

-Derek tiene pistas de la cosa que está en Beacon Hills - Dijo Isaac sin despegar la mirada del gato

Después de eso, Derek comenzó a hablar acerca de lo que habían descubierto. Aunque el lobo se notaba distraído, pues había algo en su cabeza que no lo dejaba ser, y era ese horroroso gato que tenía al castaño tan atraído, y por consecuencia ignorando a Derek.

¿Qué le veía al gato? Era obvio que Derek era más hermoso que esa cosa, y él si podía hablar.

Al terminar las cosas importantes la sala volvió a caer en un silencio que cada vez se hacía más incómodo.

- Entonces... ¿Tu papá te dejó quedártelo? - Dijo Lydia rompiendo el silencio

- No...

- Y ¿Qué vas a hacer? ¿Lo vas a regresar? - Ahora fue el turno de hablar de Scott - Digo, no te creo capaz de cuidar de alguien más que no seas tú, apenas vives y quieres cuidar de un gato

- No, no lo voy a regresar- hizo una pequeña pausa - Jackson me ofreció dejarlo en su casa, y soy totalmente capaz de cuidar a alguien más que no soy yo

- Si claro - Soltó Scott con irritación

-Cree lo que quieras - dijo Stiles fulminándolo con la mirada

Y con eso fue suficiente para que aquellos dos amigos comenzaran un duelo de miradas y para que todo el entorno se sintiera muy tenso.

Todos estaban de cierta manera extrañados, pues nunca habían visto a aquellos dos pelear o verse de la manera que lo estaban haciendo.

- Dejen de actuar de manera inmadura y compórtense...

- Yo me largo de aquí

Con esas palabras salió Stiles tomando a su gata y Jackson yendo detrás de él, dejando un aroma como amargo que todos identificaban como enojo, al parecer Scott lo irritó de más.

Cuando todos vieron como salía aquel humano, dirigieron su mirada hacia Scott con ojos de reproche

-¿Qué? - Pregunto confundido

-Fuera todos de aquí, yo les llamaré si es necesario. - Ordenó Derek

Todos se fueron y dejaron a ese lobo gruñón pensando en por qué Stiles no le pidió a el dejarlo en su casa, tal vez no le agraden los gatos pero por él lo cuidaría bien más bien por el ¿que no haría?

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Stiles y Jackson estaban en casa de este último viendo como la gata se entretenía con un juguete casero que le habían creado

-No creo que debas molestarte tanto con Scott... - Opinó Jackson.

-¿Cómo no me voy a molestar? Me cree lo suficiente estúpido como para cuidar de un gato o de mí mismo, como si él fuera capaz de mantenerse con vida solo, al primer problema que tiene me habla para que se lo resuelva - terminó soltando un suspiro

Jackson se quedó en silencio, sin saber que decir al respecto.

-Creo que ya me voy Jackson mañana vengo de nuevo y traigo algunas cosas - añadió Stiles levantandose.

-Como quieras Stiles, nos vemos mañana...

Sin más, se marchó comenzó el camino hacia su casa deseando que su padre aun no llegara. Pero como la vida nunca está de su lado, cuando iba llegando vio el carro de su papá estacionado al frente de la casa, entró y lo primero que llegó a sus fosas nasales fue el olor que con los años se le hizo tan conocido, alcohol.

Su padre estaba senado en el comedor con una botella de alcohol casi ya vacía, quién sabrá desde a qué hora estaría tomando.

- ¿Dónde estabas? - pronunció el sheriff torpemente y arrastrando las palabras

- Con Jackson - hizo una pausa y continuó - ¿Cuánto haz bebido de eso?

- Lo suficiente como para darme cuenta que tú debiste morir y no tu madre - pronuncio esas palabras de una manera tan cruda y fría

- No me ames tanto por favor, no se te vaya a acabar tu amor- dio con sarcasmo - Buenas noches papá, antes de que digas algo que no quieras decir...

-Créeme que lo que diga va a ser con intensión, otra cosa es que no me anime a decírtelas estando sobrio. - Esa declaracion hizo que Stiles tragara saliva - No me gusta tenerte en mi casa, no te quiero aquí, eres un estorbo que no sabe hacer otra cosa que ponerse en peligro.

-No te preocupes papá - Stiles sonrió amargamente - Ya no me tendrás aquí.

Cuando terminó de decir aquello, Stiles subió las escaleras hacia su habitación. Y en una maleta puso su ropa y algunas cosas que sabía que le harían falta.

Tomó las llaves de su jeep y cuando ya iba a salir se regresó por su bate que podría serle útil.

Salió de la casa subió a su Jeep y prendió camino a un parque que estaba por ahí, estaba sentado pensando en donde podía quedarse cuando escuchó una voz que se le hizo muy conocida.

-¿Stiles? ¿Qué haces aquí?

Era su héroe, era Derek.