One shots (Teen Wolf)

Pack Imagine

Título: Hybrid
Argumento: La manada te ayuda a recuperar el control mientras cambias de mujer lobo a vampiro.

Empezó sin peligro. Estabas cambiando. Eras una híbrida y no te gustaba del. El pensamiento de no tener el control de tu cuerpo o tu mente te estaba volviendo loca.

Eras capaz de controlar tu lado de mujer lobo. Desde que te uniste a la manada de Scott, había sido más fácil. Pero tu lado vampiro se quedó tan incontrolable como siempre.

Y ahora mismo, mientras estabas sentada en clase de matemáticas, tu cuerpo empezó a cambiar sin que tú lo quisieras. Lo supiste cuando tu mandíbula empezó a doler. Malia, quien estaba sentada a tu lado, inmediatamente notó lo incómoda que estabas.

-¿T/N? ¿Qué está pasando? ¿Estás bien? - susurró Malia.

Negaste con la cabeza.

- Estoy cambiando - susurraste de vuelta.

Los ojos de Malia se ensancharon

-¿Qué? Como, ¿ahora mismo? - preguntó retóricamente mientas tú asentías con la cabeza.

-Sólo diez minutos más, T/N. Luego avisaremos a Scott, puedes hacerlo -te aseguró, pero tu no estabas tan segura.

Cerraste los ojos con dolor, queriendo reprimir el cambio.

Los diez minutos habían pasado tan lentos como dos horas, pero estuviste contenta tan pronto como pudiste correr fuera de clase, con Malia siguiéndote, para llegar a Scott.

Literalmente corriste hacia donde Malia había podido olerlo, que era la biblioteca. La mirada de Scott se levantó en cuanto te oyó entrar en la biblioteca. Estaba sentado en una mesa con Stiles, Lydia y Kira.

Cuando se dieron cuenta, todos te lanzaron una mirada preocupada, debido a lo agotada que probablemente parecías estar.

-Scott... Estoy cambiando -soltaste.

Sus ojos se ensanchar on, al igual que los de Malia diez minutos antes.

-¿Qué? -preguntó.

-Por favor sólo ayúdame -suplicaste y unas cuantas lágrimas escaparon de tus ojos.

Scott asintió apresuradamente mientras se levantaba de donde estaba sentado. Te cogió del brazo y te arrastró con él, los demás os siguieron.

Scott te guió hasta los vestuarios. Reviso que no hubiera nadie allí mientras tu te sentaba en el suelo, las lágrimas caían por tu cara. Me dijo a Stiles que cerrará la puerta antes de arrodillarse frente a ti.

-¿T/N? -preguntó Scott amablemente, pero tú negaste con la cabeza.

Querías estar sola para no herir a ninguno de tus amigos. Porque por ahora, tu sed de sangre era más fuerte que nunca.

-No puedo controlarlo, Scott. Por favor iros, no quiero haceros daño.

-T/N, vamos a quedarnos, vamos a pasar por esto juntos -explicó Lydia, cogiendo tu mano mientras también se arrodillaba a tu lado.

Negaste con la cabeza, ¿por qué no iban a creerte si decías que no podías controlarte?

-No puedo controlarme, ¡voy a hacer daño a alguien! -dijiste desesperadamente queriendo que tus amigos se fueran.

-T/N -exigió Scott.

Pero tú no abriste tus ojos. El ansia de probar la sangre se estaba haciendo cada vez más fuerte.

-T/N -pidió Scott de nuevo.

Finalmente abriste tus ojos, pero sabías que no podrías prometer nada desde ese momento.

Sentiste tus colmillos y no tenías el control de nada. Justo cuando querías saltar y atacar a alguien, Scott gritó tu nombre otra vez. Pero sus ojos se habían vuelto rojos así que paraste tu trayectoria.

Casi te caíste hacia atrás mientras recuperaba el control por fin. Scott te había traído de vuelta. Y pudo hacerlo, porque él era tu alfa, fueras una mujer lobo o un vampiro.

Lydia te sujetó para que pudieras recobrar el equilibrio. Agarras te la mano de Scott, apretándola suavemente. Nunca habías estado tan feliz de finalmente pertenecer a una manada. Te ayudaron a recuperar el control de tu cuerpo. Estabas más que agradecida.

-Gracias -dijiste aliviada-. Gracias a todos. Gracias por ayudarme, estoy muy agradecida de teneros conmigo -dijiste sonriendo.

Y por primera vez en lo que parecía siempre, no te sentías sola.