One shots (Teen Wolf)

Scott Mccall

Este One Shot es la segunda parte del One Shot anterior. ¡Espero que os guste!

PD: Leed la nota del final, hay dos anuncios importantes.

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Llevabas yendo a citas con Scott durante un mes entero, y ninguno de los dos se había atrevido a dar un paso más.

Tú pensabas que iba a ser él quien lo hiciera, pero no veías ninguna señal que te indicara que era así. ¿Y si se había cansado de ti? ¿Y si no eras lo que él esperaba un principio? ¿Y si habías sido demasiado dura aquel día en el campo de lacrosse?

Te encontrabas guardando unos libros en un taquilla cuando sentiste la presencia de alguien detrás de ti, haciéndote girar para ver quién era.

–Hola –dijo un sonriente Isaac.

–Hey –respondiste sonriendo de igual manera–. ¿Qué pasa?

–Emm yo... Quería darte las gracias por haberme ayudado a estudiar para el examen de la semana pasada. De no ser por ti, habría suspendido –habló mientras metía su mano en su bolsillo.

–No es nada, sabía que te costaba y no podía hacer otra cosa que no fuera ayudarte.

–Espera, tengo algo para ti –dijo sacando algo del bolsillo donde había metido su mano anteriormente, para después extenderla hacia ti, mostrándote una cajita.

La abriste cuidadosamente, dejando al descubierto una cadenita con un colgante de un lobo. Abriste los ojos, perpleja ante aquel regalo tan bonito.

–Dios gracias, es hermoso. Pero no puedo aceptarlo, fijo que te ha costado bastante y yo solo te he ayudado a estudiar para un examen –replicaste, extendiendo tu mano para devolvérselo.

–No es solo eso, T/N. No es el primer examen que apruebo gracias a ti, y además, me estás ayudando con todo el tema de Allison. De verdad, quedátelo, te lo mereces por ser una de las mejores amigas del mundo –dijo, empujando tu mano hacia ti.

–¿Seguro? –preguntaste, haciendo que él asintiera–. Pues gracias, de verdad –agradeciste de nuevo, y te acercaste para darle un abrazo.

Pero cuanto estábais a unos centímetros, unos brazos te separaron de Isaac y te situaron detrás de una espalda ancha.

–¡Scott! ¡¿Qué haces?! –exclamaste cuando fuiste consciente de quién había sido.

–¡¿Es que no lo ves?! Le gustas y está intentado lugar contigo, ¡abre los ojos! –contestó un alterado Scott.

–¿Y a ti qué? Si de verdad estuviera intentando lugar conmigo, ¿supondría un problema para ti? No somos nada, no tendría por qué importarte –dijiste antes de darte la vuelta y dirigirte en dirección contraria por el pasillo.

(...)

Ya era la hora de salida del instituto. Las dos horas anteriores habías estado dándole vueltas al tema de Scott y habías decidido que lo que lo mejor era que hablaras con él.

Cuando te dirigías a tu taquilla para recoger tus cosas e irte, divisaste a Scott al final del pasillo, cerca de la puerta del instituto, por lo que decidiste que era el momento de hablar.

–¡Scott, espera! –gritaste, mientras comenzabas a caminar rápidamente en su dirección.

Él se detuvo, pero no se giró para mirarte.

–Oye, creo que necesitamos hablar –comenzaste, pero seguía sin darse la vuelta–. Scott, te estoy hablando.

Ese fue el momento en el que se giró y pudiste observar sus ojos mirándote de una forma fría e intimidante.

–¿De qué tendríamos que hablar? No somos nada, no se por qué tenemos que seguir siquiera dirigiéndonos las palabra –dijo, haciendo referencia a lo que tú habías dicho antes.

Querías decir algo más, pero las palabras no salían de tu boca. La forma en la que Scott se había dirigido a ti, te había dejado congelada. Ni siquiera fuiste capaz de reaccionar cuando Scott se volvió a dar la vuelta y salió del instituto.

(...)

Te encontrabas en tu casa, sola, terminando de hacer tus deberes. La mirada de Scott no salía de tu mente, nunca te había mirado ni hablado así y la verdad era que no entendías lo que le pasaba.

El sonido del timbre de tu casa te sacó de tus pensamientos. Soltaste el bolígrafo, y te levantaste para abrir la puerta.

–Scott –susurraste cuando viste quien se encontraba en la entrada de tu casa.

–Hola yo... Venía a disculparme, no... –comenzó, pero tu lo interrumpiste.

–¿Y qué pasa si ahora soy yo la que no quiere hablar contigo? –dijiste, utilizando el mismo tono duro que el había usado contigo en el instituto.

–Estarías en todo tu derecho, pero de verdad, solo necesito que me escuches, luego puedes mandarme a la mierda si quieres, pero por favor, escúchame –dijo, y tu hiciste un gesto con tu cabeza, indicándole que continuara–. Lo siento, de verdad. Sé que actué mal al separarte así de Isaac, y que actué aún peor tratándote de aquella forma después. Pero estaba celoso, quiero decir, me gustas mucho, podría decir incluso que estoy enamorado de ti, y no se, no podía soportar que tuvieras a otro chico así de cerca. Y sé que no somos nada, pero quiero cambiar eso. T/N, ¿quieres ser mi novia?

Por segunda vez en el día, Scott te había dejado sin palabras. Solo que esta vez, de una forma buena.

–Ya veo que no... Yo... Mejor me voy –continuó Scott al ver como te quedabas callada, pero impediste su paso tomando su mano.

–Scott, claro que quiero ser tu novia –dijiste, haciendo que él se girará hacia ti, y uniera vuestros rostro formando el mejor beso de tu vida.

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N/A: este OS es de creación propia y está inspirado en el OS anterior, como ya dije al principio.

¿Os ha gustado? Si es así, no olvidéis votar y comentar.

¿Os gustaría que empezara a poner nombre a las protagonistas en vez de poner T/N? En ese caso, agradecería que me dejarais aquí algunas ideas de nombres.

Y ahora los dos anuncios:

1. He publicado en mi perfil un horario de actualizaciones, pasaros a echar un vistazo para saber cuando actualizaré cada una de mis novelas.

2. Ya está en mi perfil mi segunda novela de creación propia: "Cliché". De momento solo he publicado el prólogo, pero podéis echarle un vistazo para ver si os gusta.

Dark Blue💙