One shots (Teen Wolf)

Kira Yukimura

Imagina: animar a Kira después de su ruptura con Scott.

–¡Anímate, Kira! ¡Vamos de compras! –gritaste mientras entrabas en su habitación, observándolo mientras se sentaba acurrucada en su cama, con los brazos alrededor de sus rodillas.

Kira era tu mejor amiga, pero estabas enamorada de ella en secreto.

Volvió su cabeza hacia ti y viste que todavía tenía el mismo ceño fruncido desde el día que Scott y ella terminaron.

–Oh, Kira... –comenzaste y te acercaste a ella, sentándote a su lado en la cama y apoyando tu mano en uns de sus rodillas.

–No tengo ganas de ir de compras –murmuró ella y tú inclinas te la cabeza.

–¡Pero vamos a comprar bikinis nuevos! –gritaste y ella te miró con confusión.

–¿Por qué haríamos eso? –comenzó ella, pero la interrumpiste con tu exuberante alegría.

–Porque acabo de recibir una invitación de Lydia, ¡está organizando una fiesta en la piscina! –dijiste, pero Kira seguía sin entender–. Vamos a comprar bikinis calientes, así que Scott te verá y hará que se arrepienta –le explicaste con una sonrisa satisfecha.

Kira se movió en su asiento.

–No sé... –una vez más, la interrumpiste, arrastrándola por la muñeca.

–No, Kira. Es mi deber como tu mejor amiga animarte, y TIENES que venir conmigo, o de lo contrario, te haré cosquillas hasta que mueras –te burlas te con una sonrisa y la miraste con los ojos entrecerrados.

Ella se levantó de inmediato y te miró fijamente.

–¡Bien! –resopló ella mientras levantabas una ceja.

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–Este es bonito –exclamó Kira mientras sostenía un bikini con cintas a los lados.

Arrugaste la nariz cuando lo viste.

–Sí, seguro. Si tuvieras 8 años –respiraste y buscaste algo más en la pila de ropa en la que Kira estaba mirando.

Chillaste una vez encontraste el top de bikini perfecto para ella.

–¡Esto es! –dijiste y le diste la parte superior.

Ella levantó las cejas y comenzó a sonrojarse.

–¿No son demasiadas tiras? –susurró ella y tú negaste con la cabeza.

–No, no si usas una simple parte de abajo negra –le aseguraste y ella te dio una mirada insegura–. ¿Puedes probártelo al menos? –suplicaste y no fue tan difícil de convencer, porque terminasteis comprando el conjunto después de muchas preguntas y sonreiste una vez salisteis de la tienda.

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–¡Por fin! –resopló Lydia cuando abrió la puerta revelando a Kira y a ti al otro lado–. ¿Cómo es que siempre sois las últimas en llegar? –molestó ella mientras os arrastraba a ambas.

Enganchaste tu brazo al de Kira cuando entrasteis.

Lydia os guió a su habitación para que pudierais quitaros la ropa y quedaros en vuestros nuevos bikinis. Kira se envolvió con un fino kimono para tapar su cuerpo.

–¡No escondas ese caliente cuerpo tuyo! –exclamaste mientras ella comenzaba a sonrojarse–. Se supone que Scott debe verte y sentir el arrepentimiento hasta la punta de los pies –esto hizo que Kira mientras saliais con los demás.

Disteis una vuelta por el patio trasero de Lydia, aún agarradas del brazo mientras saludabais a todos lo que estaban allí. Los fuertes latidos del corazón que venían de la cocina te hicieron inclinarte para susurrar en el oído de Kira.

–Creo que está afectado por tu presencia –dijiste haciendo que Kira se diera la vuelta–. Puedo escuchar el latido de su corazón –continuaste con una risita.

Por fin Kira parecía más feliz y relajada mientras compartíais una hamburguesa a la parrilla en el porche, riéndoos de las bromas de los demás y empujando juguetonamente a Liam a la piscina. Una vez se las arregló para llevaros a Kira y a ti con él. Cuando ambas nadasteis hasta la superficie, no pudisteis evitar desatar una risa común.

–¿No te pusiste rimel waterproof? –le preguntaste a Kira y ella asintió.

–No, en realidad no quería saltar –explicó y tú le quitaste el pelo mojado de la cara.

–Pero, sin embargo, aquí estamos –dijiste y Liam te interrumpió salpicando agua sobre ambas.

Nadasteis alrededor de la piscina por un rato antes de decidir salir y limpiar la máscara de pestañas de Kira. Te sentaste en la cama de Lydia mientras esperabas a que Kira saliera del baño, tratando de desenredar tu cabello con tus nerviosos dedos.

Te tumbaste un rato para estirar los brazos y las piernas, estaban cansados después de nadar. El colchón en la cama se hundió cuando alguien se subió a él. Levantaste el cuello para mirar hacia arriba y ver a Kira sobre tí, la miraste con el ceño fruncido y ella te sonrió.

Su rostro estaba justo sobre el tuyo y sentiste como tu propio corazón latía más rápido en tu pecho, no sabías si ella podía oírlo. Te miró a los ojos y sonrió otra vez antes de bajar su cara hacia la tuya.

Cerraste los ojos y esperaste lo mejor, ahí fue cuando sus suaves labios encontraron los tuyos. Su mano se enredó rápidamente en tu cabello húmedo, empujando tu cuello más cerca para presionarte contra ella.

El beso enviaba mariposas por todo tu cuerpo y sentiste que tus ojos se convertían en oro debajo de tus párpados. Ambas pareciais estar en un nivel de vida diferente, ni siquiera escuchasteis el paso rápido y torpe de Scott acercándose a la habitación.

–Kira, solo quería... –Scott irrumpió en la habitación, se detuvo y miró fijamente a Kira sobre tí con todo su peso–. Oh, ¡OH! –exclamó Scott cuando tanto Kira como tú os separabais para mirarlo con su mano aún enredada en tu pelo.

Su cara se puso roja mientras murmuraba algo y cerraba rápidamente la puerta tras el. Kira y tú seguíais mirando la puerta con la boca abierta. Escuchaste los latidos del corazón de Kira contra su pecho mientras se levantaba de encima tuyo.

–Lo siento mucho, Kira –suplicaste.

Ella dejó caer sus hombros y negó con la cabeza. Cuando te miró de nuevo, viste un brillo diferente en sus ojos y una sonrisa se había extendido en su rostro.

–Yo no –dijo ella, frunciste el ceño y apretaste tus labios en una fina línea–. Finalmente sé por qué estoy triste, y no es por Scott –explicó, y tú te acercaste a ella y tomaste su mano.

–¿Por qué es? –preguntaste con cuidado mientras te acercabas más a su rostro.

Ella se volvió hacia ti y todavía tenía esa sonrisa que tanto amabas.

–Todo lo que siempre quise fue a ti, y estuviste aquí todo el tiempo –dijo tímidamente antes de inclinarse más para presionar sus labios sobre los tuyos de nuevo.

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Autor: joeynihil

Dark Blue💙