Capítulo 17.

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Jonny pov.

Después de terminar la clase de música, este compañero de clases llamado Damián me invito a tomar un café para que le ayudara con la práctica de los instrumentos, así que ahora estamos sentados en un café cerca de la universidad, estoy mirando también la competencia (XD).

-qué bueno eres con la guitarra y cantando. –menciona Damián mientras tomo un sorbo de café.

-gracias, es la práctica. –le respondo sonriendo, pero no puedo dejar de pensar en ese idiota narcisista coqueteando con esa chica creída... pensándolo bien son tal para cual. –mientras más practiquemos mejor nos volvemos.

-si voy a seguir practicando.... Oye, ¿te puedo hacer una pregunta personal? –menciona tomándome de la mano y su cara algo sonrojada.

-ehhhh. –lo miro algo nervioso. –es que no quiero salir con alguien en estos momentos. –le digo, sin escuchar lo que me iba a decir. Solo que antes que me respondiera alguien nos interrumpe abruptamente

-¿Qué hacen?- pregunta el Papá de David, que nos mira de manera extraña. –esto es un lugar público.

-buenos días, Don Ignacio. –le digo, al soltar rápidamente la mano de Damián y me levanto para saludarlo de la mano. Solo que el ignora mi saludo. -¿Cómo ha estado?

-Jonny, ¿Dónde está mi hijo? –me vuelve a ignorar y me pregunta de mala gana. Este señor tan simpático como siempre, mi padre al lado de este señor es muy comprensible y amable.

-ehh, no lo sé. Salimos de clase hace un rato.

-Entiendo, ¿tú sabes dónde está viviendo?

-si, en mi casa.

-¿Qué? –pregunta algo sobresaltado. Parece que la noticia no le gusto, lo noto más extraño de lo normal. – ¿dónde lo encuentro?

-lo puede llamar a su celular. –le dice Damián en forma de broma, pero don Ignacio lo pudo haber matado con la mirada. Este señor no soporta ni una broma.

-no es contigo niño, y no crees que ya lo he hecho. Solo que no me responde ni mis llamadas, ni mis mensajes. –nos dice, aunque normal si no lo quiere ayudar con la carrera y lo hecho de la casa. Aunque supongo que sí lo está buscando es porque estará arrepentido.

-bueno, en la tarde está trabajando en el café. –le respondo, puede ser la oportunidad que se arreglen.

-¿en un café?

-si en mi café... bueno y también de Javier, somos socios... se llama café bar el destino. –solo me queda mirando por un momento y se marcha sin decir más, dejándonos a Damián y a mí algo confundidos. –este señor es un amor. –menciono en tono sarcástico.

-sí, se nota. –me responde Damián y nos volvemos a sentar. –ehh Jonny, lo de hace rato creo que use mal las palabras.

-¿a qué te refieres? –le pregunto confundido.

-es que tú piensas que te estaba coqueteando, cuando tome tu mano y te dije lo de la pregunta personal... -me quedo esperando que continúe porque no estoy entendiendo, si no quería ligar conmigo que hacía. –lo que pasa tome tu mano para suplicarte por un favor y lo de personal porque quiero preguntarte de alguien cercano a ti. –ahhh este tipo vino para que lo ayudar de celestino y yo pensando bobadas, pero al menos me ayudo con algo.

-ahhh, lo siento... pero es que con lo que hiciste me diste a entender eso.

-si lo sé, veras me gusta uno de tus amigos.

-¿si, quien?

-tu amigo Cristian. –me quedo sorprendido.

-¿si y de donde lo conoces?

Almas GemelasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora