24.- Y así terminamos

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–¡Tenemos qué hacer algo!

–¿Y qué esperas Shank miertero? -dijo Newt-, ¿qué saltemos?

Noah y _______ intercambiaron miradas cómplices.

–¡Eres un genio! -felicitó Blake-, ayúdenme a romper las ventanas.

Los cinco tomaron una silla y comenzaron a golpear el ventanal, las puertas se abrieron de par en par cuando el cristal estalló en miles de pedazos, dejando ver a la Rata con cara de molestia y que puso a _______ y a Thomas de buen humor.

–Ahora -susurró Noah, lanzándose del séptimo piso, Minho y Newt lo siguieron-.

–¡¿Qué demonios están haciendo?! -exclamó la Rata-

–Antes muertos que volver a servirles -dijo ella y aventó a Thomas-, nos vemos en el infierno -juntó todo su valor, le enseñó el dedo corazón y se lanzó-.

Había una fuente enorme frente al edificio, y Noah y _______ esperaban con certeza caer en ella, los disparos comenzaron a volar, y le rogaron al cosmos que ninguno les diera.

El agua estaba helada, nadó a la superficie y se encontró con Newt gritando su nombre.

–¡_______!, ¡________!, ¿dónde estás?

–Tranquilo –lo abrazó por detrás, recordando a los días en el área, siempre lo tumbaba por detrás-, estoy bien, tranquilo.

–¡Por aquí chicos!

Nadaron hasta salir de la fuente, dejó sus tacones flotando en el agua, y sin soltar su Lanzador salió.
Siguieron a Noah sin reproche alguno, corrieron fuera de el edificio hasta llegar a la avenida principal.

La Ciudad era un desastre, gritos, personas corriendo, y uno que otro establecimiento en llamas.
Minho tomó a una chica que corría sin rumbo fijo.

–¡¿Qué está pasando?! -interrogó mientras la sacudía por los hombros para hacerla entrar en razón-

–¡El Palacio de los Cranks tomó el control y logró entrar aquí! -respondió asustada-

–¡¿Aquí?!

–¡Sí! -se soltó de su agarre-, ¡entraron a La Última Ciudad!

Y salió corriendo, los cinco chicos se miraron entre ellos asustados.

–¡Cuidado, detrás de ti! -señaló Minho-

Se giró y disparó a un sujeto que corría hacía ella con apariencia de Crank.

–Necesito soluciones ahora mismo -la Larcha dura y mandona que conocían, había regresado-. Rápido Tom, ¿dónde están los demás?

–Brenda está en el estacionamiento de Cruel, con Gally, rescatando a los reclutas más jóvenes y cuántos guardias se nos quieran unir. Después de eso, los veríamos en su edificio, se supone que Teresa tenía algo ahí para ayudarnos con Newt.

–¡Maldita sea! ¿Y Teresa?

–La perdimos cuándo nos descubrieron.

–No la podemos dejar -dijo Noah-.

–Esto haremos -se quitó el Lanzador de encima y se lo entregó a Noah-. Regresa con Tom por Teresa, si en cuarenta minutos no están de regreso, iremos por ustedes. Newt, dame tu lanzador.

El Rubio hizo caso.

–¿Te llevarás a Minho y a Newt?, ¿en serio?

–Tranquilo Noah, estaremos bien. Tenemos un Lanzador, y necesito ir a casa por más armas.

–De acuerdo, vámonos Thomas. Entraremos por detrás -se acercó a la chica y le plantó un beso en la frente-. Te veré más tarde, por favor..., cuídate.

Noah y Thomas marcharon en dirección opuesta de dónde ellos lo hicieron.
Con cautela, recorrieron un par de calles, cuidando de no estrellarse con algún Crank ó con alguien de Cruel que quisiera llevárselos.

Cuándo llegaron al edificio, estaba totalmente vacío, que causaba escalofríos. Lo mejor era ir por las escaleras, llegaron al piso del departamento exhaustos. Con Newt enfermo, Minho recién salido del Laboratorio y ________ descalza, no había sido fácil.

–Entren -ordenó cuándo abrió la puerta de su hogar, los dos chicos entraron y ella los siguió-. Newt, revisa el baño y la habitación principal. Yo iré a revisar lo demás.

–¿Cómo sabe Newt dónde está el baño? -preguntó Minho-

Ambos chicos se sonrojaron e ignoraron el comentario de su amigo.

–Todo está en orden -dijo finalmente Newt-.

–Ten Minho -dijo la chica regresando de la cocina con un plato de sopa y una fruta en mano-. Si no te alimento, vas a terminar por desmayarte, sólo apresúrate. Newt, si gustas tomar algo, hazlo. Ya sabes dónde está todo.

La chica se encaminó a su cuarto y se encerró en este. Comenzó a quitarse la ropa y reemplazarla con algo más cómodo. Tenis, pantalón a medio chamorro, blusa de algodón y una sudadera naranja más grande que ella.

–Newt -dijo abriendo la puerta. Lo observó, estaba sentado junto a Minho, comiendo unas nueces-. Ven, te necesito.

–Te sigo hasta el fin del mundo -seguía siendo ése garlopo enamoradizo-. ¿En qué puedo ayudarte? -cerró la puerta-

–Siéntate -de algún cajón de su armario sacó una mochila-. ¿Has ingerido Felicidad? -él negó con la cabeza- De acuerdo, no quiero hablar de esto con Minho encima, porque sé que tanto le va a doler, pero la necesitas Newt, aquella noche te dí toda la Felicidad que tenía aquí, aunque no queramos, tendremos que volver al edificio principal.

–Está bien... ¿Por qué tenías esa mierda aquí?

–Tenía la esperanza de que algún día llegaras para quedarte, eso nos cubriría hasta que encontrara la cura -sacó un botiquín de debajo de su cama y lo metió a la mochila-.

–¿Lo qué dijiste hace un rato?, ¿qué tan real es?

–¿Qué cosa? -metió un par de libros a la mochila y luego buscó la fotografía de Chuck-

–Que me amas -dejó de hacer lo que estaba haciendo, y se quedó sentada en el piso, viendo a la nada, pensando en todo-. ¿Ó sólo lo dijiste para calmarme?

–No... No lo dije de dientes para afuera, lo dije porque lo siento.

–¿Y por qué no lo repites ahora?

–¿Ahora? -Newt afirmó con un movimiento de cabeza-

–Sabía que no era real -dijo después de un minuto de silencio-.

–No esperes que lo vuelva a decir como si nada Newt, ¿recuerdas qué pasó la noche qué estuviste aquí?

Metió la fotografía de Chuck a la mochila, y todas esas que venían en su carpeta, incluso la de Newt, cuándo él se fuera, querría recordarlo, la cerró y la aventó a un rincón de la habitación.

–Claro que lo recuerdo -se puso de pie y se acercó a ella-, lo recuerdo bien -la tomó por la cintura e intentó besarla-.

–Me llevaste a la cama para que les ayudara a sacar a Minho de aquí -dijo apartándose de él-. No esperes que todo vuelva a ser como antes. Oh, incluso dijiste que debiste quedarte con Rebeca.

–¿Por qué haces todo esto ________?

–¿Hacer qué?

–Primero me recibes con los brazos abiertos, me dices que me amas, luego me traes de vuelta aquí, haces creer que te preocupas por mí y luego me apartas.

–Perdón Newt, pero ahora esto -señaló a ambos- es distinto. Debiste quedarte con Rebeca, tú mismo lo dijiste. Y el hecho que sienta algo tan grande por ti, no significa que volvamos a estar juntos.

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Siento que le estoy metiendo un chorro de relleno.

Enemiga Mortal AOM#3 Newt Y _______ ||THOMAS SANGSTER||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora