Tu Propio Reflejo

43.Decisión

Wey te hice pasar las verdes para subir este capitulo (me olvide la libreta en su casa e hizo maromas para enviarme lo que había escrito ahí) Te amo amiga, sin ti aún estuviera con la historia en pausa.

—¿y que hemos aprendido hoy?

—No-debo-amenazar-a-los-amigos-de-mi-novia —repito al borde de un berrinche—. Pero-ese-puto-no-quiere-ser-solo-su-amigo. —añado en el mismo tono.

—Daniel fue muy atento con todos Tyler. —continua Jen.

—Imbécil lame botas. —mascullo entre dientes.

—¿Qué?

—Que es un chupa... —repienso mi respuesta tras una mirada suya—. Medias, lo siento ¿vale? Todo esto me tiene de los nervios, no me gusta saber que ese sujeto está ahí dentro, cuando ella ni siquiera quiere hablar conmigo.

Recibí un <<Estoy aquí>> de Crystal y me levante antes de que Jen continuara con su cháchara sobre no cortar a Hart en pequeños pedazos.

Justo ahora se me hace complicado pensar en otra cosa que no sea Alison, como en toda la última semana, que digo, más bien como en los últimos meses. Pero hoy, su manera de evitarme y como me echó de la habitación, pensar que el único momento en que me sentí en paz fue cuando la tuve entre mis brazos después de todo lo que paso, que era real, que estaba ahí y que no la perdería.

Es injusto pensar en nuestra relación cuando ella pasa por todo esto, solo quiero que ella sepa que estoy aquí y que no la dejaré incluso si ella no quiere verme.

—¡Ty! ¿Dónde está? ¿Está bien? ¿Puedo verla? ¿Puede leer? Le traje libros ¿está enojada? ¿Hablaste con ella?

—Eh...

—¡Responde Tyler!

—Vale, vale ¿Me puedes repetir la primera pregunta?

Bufó y blanqueó los ojos.

—No te soporto.

Se alejó por el pasillo interceptando a Ale en medio de este, la atiborró de preguntas y la chica algo desconcertada le indico el camino a la habitación de Alison, poco le falto a mi hermana para dejarse los dientes en el piso.

Cuando mire a Ale esta se encogió de hombros y tuve que ir tras mi hermana, me crucé con Sammy saliendo de la habitación y golpeó mi hombro al pasar.

—Ve por ella tigre. —dijo con sarcasmo.

Estaba bastante tenso y nervioso para responder.

Abrí la puerta dudoso y me sorprendió encontrar a las chicas riendo.

—Te lo dije. —murmuró Crystal.

Alison había recuperado algo de color y se veía increíblemente hermosa sonriendo, creo que era la primera vez que la veía hacerlo desde lo que parecía una eternidad. Las flores y el globo del imbécil estaban a un lado de la habitación y sentí alivio al ver que no les prestaba ningún tipo de atención especial.

—Bueno...

—Ty, deja de ser un cobarde llorica —mi hermana se echó al hombro su mochila y antes de salir se detuvo frente a mi—. Llámame cuando termines.

Y me quede congelado frente a la chica cuya sonrisa escondía tanto dolor que destrozaba.

—Hola.

Sonreí tomando su mano.

—Hola.

Alison

Ya más relajada los chicos me dejan para que descanse, tanto que procesar me ha echado encima unos mil años. Apenas consigo cerrar los ojos cuando la puerta vuelve abrirse de forma brusca Si no me mato yo, me matan estos de un infarto.