𝗕𝗼𝘁𝘁𝗹𝗲𝗱 𝗨𝗽 - 𝗛𝘂𝗻𝗛𝗮𝗻

🍷 16 🍷

—¿Quieres que me ponga esto? —Luhan estaba sosteniendo una tanga de cuero, pensando en la incomodidad. Esto no era lo que tenía en mente, tal vez un par de pantalones de cuero, algo por el estilo—. Me congelaré el trasero si uso esto toda la noche.

—Pero es un excelente trasero. —La mano de Sehun se deslizó sobre el trasero en cuestión.

—Puede ser. —Sehun dijo que tenía un excelente trasero a pesar de que era pequeño y eso lo había hecho sentir bien—. Pero tú eres el único que puede verlo.

Sehun sonrió, al parecer le había gustado el cumplido.

—De acuerdo. —Tomó la tanga y le entregó a Luhan un par de pantaloncillos cortos—. Quizás estos te quepan. —No tenía muchas cosas de la talla de Luhan.

—¿De dónde sacaste esto? —Luhan tomó los pantaloncillos cortos. Era una mejora... al menos su trasero estaría cubierto.

—Hace algunos años tuve un novio que le gustaba este tipo de cosas. No estuvimos juntos por mucho tiempo, pero insistía que saliéramos todos los fines de semana. Le compré éstos como una sorpresa, pero rompimos antes de poder dárselos. Puede que te queden un tanto ajustados. —Luhan se quitó la bata y se colocó los pantalones. Eran tan ajustados que apenas si podía cerrar la cremallera—. ¡Santo Cielo! —Sehun frotó la entrepierna de su amante con gentileza—. Se ven realmente sexys en ti.

—¿Sí? —Se dio la vuelta mirándose el trasero en el espejo.

—Ajá. —Sehun se fue al baño y Luhan pudo escuchar la regadera. Regresando al cuarto, Sehun dijo—: Quítatelos y ven al baño. Necesitamos terminar de arreglarte. —Luhan abrió los pantaloncillos y los deslizó por sus piernas, luego se dirigió al baño. El cuarto de baño estaba lleno de vapor y Sehun apagó la ducha—. Quiero depilarte las piernas para que se vean suaves. —Luhan se encogió de hombros y se paró sobre la toalla que Sehun había colocado sobre el suelo—. Quédate aquí y separa tus piernas. —El sonido de la rasuradora eléctrica lo asustó al inicio, luego sintió como la pasaba por sus pantorrillas y muslos. Las piernas de Luhan temblaban después de que Sehun terminara con la primera pierna y sin querer se había endurecido como una roca. Para cuando terminó la segunda pierna su cuerpo estaba vibrando por la excitación—. Solo una cosa más. —Encendió la rasuradora nuevamente y la deslizó sobre la piel de su pene. Luego el baño volvió a silenciarse hasta que Sehun encendió la ducha.

—Entra y aséate. —Luhan se paró debajo del agua con Sehun justo detrás de él. El agua estaba bien, pero los labios de Sehun estaban mejor y esa mano masajeando su trasero aún más.

—Estás fenomenal. —Luhan le permitió a sus manos explorar, luego se arrodilló pero Sehun lo detuvo, obligándolo a ponerse de pie—. Todavía no, dejemos que la pasión se acumule. —En vez de tomar turno para lavarse el uno al otro, las manos cubiertas de jabón recorrieron libremente sus cuerpos. Luego Sehun apagó la regadera y tomó una de las toallas. Se secaron y se comenzaron a vestir. Luhan se colocó los pantaloncillos y una camiseta negra, junto con unos botines negras.

Sehun estaba guapísimo con pantalones de cuero, una camiseta negra ajustada y unas bandas sobre sus bíceps.

—¡Cielos Sehun, eres tan sexy! —Luhan aún estaba excitado por la ducha, pero el ver a Sehun vestido de esa forma era demasiado.

—Gracias. —Luhan fue capturado por poderosos brazos—. También te ves muy sensual. —Sus manos acariciaron su trasero cubierto por el cuero—. Deberías ponerte un par de pantalones encima hasta que lleguemos al lugar, de lo contrario te dará frío. —Luhan asintió y recibió otro beso antes de ponerse unos pantalones holgados.

El viaje a la casa de Chen y Xiumin fue placentero, el auto estaba cálido a pesar del frío del exterior. A mediados de marzo el clima podía ser bastante placentero, pero usualmente las noches eran muy frías. Al estacionarse, se encontraron con el resto del grupo y siguieron a Xiumin. Se estacionaron frente a un Centro Comunitario LGBT, la parte delantera del edificio estaba decorado en blanco y negro con banderas azules ondeándose con el aire nocturno. Sehun estacionó el auto mientras Luhan se quitaba los pantalones y se colocaba nuevamente los botines. Sehun lo hizo entrar rápidamente al club, cuestión por la cual se sentía agradecido Luhan.