𝗕𝗼𝘁𝘁𝗹𝗲𝗱 𝗨𝗽 - 𝗛𝘂𝗻𝗛𝗮𝗻

🍷 6 🍷

La tarde pasó rápidamente y Luhan estaba comenzando a preocuparse. Había regresado de la tienda de antigüedades hacía unas dos horas y Ren aún no había vuelto. Los clientes lo mantuvieron muy ocupado y había perdido la noción del tiempo, pero ahora que no había más clientes, tuvo la oportunidad de revisar la hora.

—¿Podrías dejar de caminar de un lado a otro? Desgastarás el suelo. —La voz de Ángela estaba llena de sarcasmo, pero podía ver que ella también intentaba ocultar su propia ansiedad.

—No puedo evitarlo. —El pensar que Ren pudiera estar en peligro lo hizo temblar.

Ángela se recostó sobre el mostrador.

—Lo sé... a mí también me agrada. —Luhan estaba a punto de ir a buscar al adolescente cuando éste cruzó la puerta rápidamente con su carpeta en mano, seguido de Sehun en su uniforme.

—Kris me mostró todo tipo de cosas. —El rostro de Ren brillaba mientras hablaba—. Me dijo que puedo convertirme algún día en artista si quiero. Gracias Luhan. —Con una sonrisa, Ren desapareció en la parte trasera de la tienda, sólo para regresar rápidamente—. Kris dijo que dará una exhibición este sábado y me preguntó si podía ir.

Luhan no podía evitar reír al ver la energía de Ren.

—Seguro, podemos ir. Llamaré a Kris y le pediré los detalles. —Esta vez, Ren lo abrazó con gratitud antes de desaparecer nuevamente en la oficina—. Desearía tener su energía. —Luhan regresó su atención al alto oficial de policía con espalda ancha—. Gracias por traerlo.

—No hay problema. Me lo encontré en la tienda de Lay y éste me pidió que lo acompañara de vuelta. —Sehun volvió a mirar a Luhan—. Espero que no te moleste.

Luhan miró a Ángela, quien estaba intentando hacerse invisible detrás del mostrador, pero que obviamente estaba prestándoles atención a ambos.

—¿Estás de servicio?

—Por las próximas horas y realmente necesito irme. —Esa voz lo envolvió como lo había hecho la noche anterior, principalmente cuando su tono de voz se volvía suave—. ¿Puedo verte luego?

Luhan miró hacia la oficina.

—Luhan, llevaré a Ren a casa. —Luhan miró a Ángela y asintió suavemente, aceptando su generosa oferta antes de regresar su atención al atractivo hombre parado frente a él.

—Me encantaría verte después. —Tuvo que restringirse para no abrazar a Sehun y besarlo. Sehun estaba de servicio y sabía que no sería apropiado, pero quería hacerlo. Lo deseaba con todas sus ganas y eso le sorprendió. No había deseado nada desde... tembló incómodamente al sentir nuevamente el temor.

—¿Estás bien?

Luhan se obligó a sonreír.

—Sí... estoy bien.

—Vendré a recogerte aquí cuando salga de mi turno. —Sehun tocó su mano y se dio la vuelta con la intención de retirarse.

—Sehun. —El hombre se giró y Luhan se le acercó besándolo gentilmente en la mejilla—. Te veré después. —Sehun sonrió y tocó su mejilla antes de partir de la tienda velozmente.

Después de sonreírle a Ángela, Luhan se dirigió a la oficina. Ren se encontraba sentado en la mesa, trabajando diligentemente en su dibujo, mientras Seo Hyun trabajaba en la computadora ingresando cifras.

—Ren. —La cabellera oscura miró en su dirección, esos ojos enfocándose en él—. Ángela te llevará a casa si no te molesta.

—¿Saldrás con Sehun? —Luhan asintió, tratando de ocultar su temor—. Genial, realmente le gustas. —Ren regresó a su dibujo y Luhan pudo observar como el lápiz de este se movía sobre la hoja, mientras su mente se perdía en sus propios pensamientos.