𝗕𝗼𝘁𝘁𝗹𝗲𝗱 𝗨𝗽 - 𝗛𝘂𝗻𝗛𝗮𝗻

🍷 17 🍷

—Sehun... —Luhan sacudió el hombro del hombre dormido, mirando al reloj con incredulidad—. ¡Sehun!

—¿Qué ocurre bebé? —El hombre grande abrazó a su amante y comenzó a dormirse otra vez.

—Sehun, son las diez treinta. La tienda abre a las once y tengo que prepararla antes de abrir. —Estaba un poco más que estresado al pensarlo.

El largo cuerpo se estiró en la cama, esos ojos se abrieron ligeramente.

—Ve a asearte, estaré justo detrás de ti. —Sehun se quitó las sábanas de encima y Luhan se dirigió al baño, regresando tan solo unos minutos después. Las sábanas habían sido arregladas y la ropa estaba colocada sobre la cama, esperándolo. Sehun se estaba poniendo un par de agradables pantalones y después de cerrarlos, se dirigió al baño. Para cuando regresó, Luhan estaba vestido y listo. Sehun tomó una camisa formal y terminó de vestirse—. Toma tu abrigo, estaré justo detrás de ti.

Luhan bajó las escaleras y agarró sus abrigos, Sehun bajó corriendo de las escaleras un minuto después. Incluso apresurado, el hombre lucía bien. Luhan le entregó su abrigo y salieron juntos por la puerta, se apresuraron a llegar al auto y un par de minutos después ya estaban de camino.

—Lo lamento bebé, debí haber programado la alarma.

Luhan sonrió y colocó su mano sobre la de Sehun.

—Solo lamento que no pudimos tener una mañana tranquila. —Olfateó—. No tuvimos tiempo de ducharnos, —volvió olfatear—, y olemos a sexo.

Sehun manejó velozmente por el tráfico.

—Me gusta pensar que hueles a sexo... que tengas mi esencia en ti todo el día. —Sehun se estacionó en el espacio reservado para Luhan, apagó el motor—. Buenos días, —Sehun se acercó y le dio a Luhan un beso de buenos días—. Alguien necesitaba eso.

Luhan sonrió, el estrés se estaba disipando.

—Así es. —Luego le devolvió el beso antes de abrir la puerta y caminar al frente de la tienda, insertó su llave en la hendidura.

—Comienza a abrir, correré a la esquina y compraré algo para desayunar y café.

Luhan sonrió y asintió, quitó el seguro a la puerta y la abrió. La alarma timbró y éste ingresó el código, silenciándola. Luego volvió a cerrar la puerta y se dirigió a la parte trasera, encendiendo las luces en el camino. Tenía menos de diez minutos para alistar todo.

Luhan contó el dinero de la caja en tiempo récord, verificó que el sistema terminara con sus procesos nocturnos y dejó la oficina. Se acercó a la caja registradora, introdujo el dinero e inició el proceso de apertura. Alguien tocando a su puerta rompió su concentración y al mirar hacia arriba, esperaba ver a Sehun esperando, en su lugar fue la cara de Kai que lo recibió, lo miraba a través del vidrio.

Luhan no sabía qué hacer y esperaba que Sehun regresara pronto. Lo último que deseaba era quedarse a solas con Kai. Unos meses atrás, eso no le hubiese preocupado, pero después de enfrentarse a una mala ruptura y a las posibles conexiones criminales de su familia, sin mencionar la amenaza de la noche anterior, hacía que Luhan se tornara muy nervioso. Le hizo una seña, para hacerle saber que estaría ahí en un minuto y continuó abriendo la caja registradora, tratando de ganar un poco de tiempo.

Luhan saltó cuando el teléfono timbró y contestó.

—Vinos Sommelier, buenos días.

—Luhan ya voy de regreso. ¿Es Kai el que se encuentra afuera de la tienda?

—Sí y tengo miedo de dejarlo entrar. —Sonrió, tratando de que Kai no se percatara que pasaba algo malo.

—Está solo, así que déjalo entrar, sólo escucha lo que tiene que decir, iré allá en un minuto.