Dije que te Amaba... Pero mentí II

Más allá del Epílogo

Más allá del Epílogo

Ariana:

     Sentada en mi habitación, una sonrisa se dibuja en mi rostro, y es increíble no poder narrar todo lo que se han convertido mi vida. Después de todo el sin sabor que pasamos por errores cometidos en el pasado. De nuevo estamos juntos, como debió suceder. Pero como se dice: "El sol brilla después de la tormenta". Ambos debíamos pasar por tantas tormentas para encontrar nuestra felicidad.

— ¿Ya te has despertado?—me preguntó Harold al acercarse a mí, después de salir del baño—. Deseaba poder tener más tiempo contemplándoles...

—¿Qué hora es?— expresé viéndolo con picardía, mientras nuestro pequeño hijo de dos años se encuentra en nuestra cama.

—No te preocupes por el desayuno, ya lo preparé. Sólo subí un rato para tomar un baño y para luego contemplarlos de nuevo y preguntarme una vez más si estoy soñando...

—Harold...

—Eres el más hermoso sueño al despertar...—rozó mi mejilla con dulzura, antes de rozar mis labios con los suyos—. Eres el más hermoso regalo que la vida me ha dado... Y me has dado un hermoso regalo...—expresó rozando la mejilla de nuestro hijo—. Señora Spencer... Cada día se roba aún más mi corazón y sólo puedo decir que cada día soy más suyo...

—¡Harold no exageres que debo lucir horrible!

—Pues... No es lo que pienso.

    Harold me miró con tanto amor. Sintiéndome una vez más bendecida al poder ver ese Harold en mi vida. Al que creí ver cuando era una adolescente enamorada. Pero este era real y no un producto de mi imaginación.

Harold:

      Salí del baño, después de tomar una ducha, encontrándome que Ariana había despertado antes de subirle el desayuno, imaginando que despertaría agotada. Robert había corrido a nuestra habitación en plena madrugada al escuchar un trueno. La había visto despertar y acurrucarlo, tratando de calmarlo, al cantarle una tierna canción .pidiéndome dejarlo dormir esa noche junto a nosotros, para que no volviese a despertar si sonaba un trueno y se encontraba solo. Lucía tan hermoso, como siempre lo había imaginado. ¡Era un hombre afortunado al ver cumplir mi sueño de verla despertar a mi lado y siendo la madre de mi hijo!

—Dejaremos que este campeón duerma esta noche aquí... Pero que no se acostumbre, pues me encanta dormir abrazado a ti.—le había expresado con picardía.

    En sus brazos seguía nuestro pequeño Robert, acurrucado en sus brazos. Una emoción entró en mi corazón, haciéndome ver que junto a ellos había encontrado el significado de tener un hogar.

—Debiste despertarme... Te había prometido que te dejaría descansar. Acabas de terminar una agotadora temporada.

—¿Y perderme un día viéndolos de esta manera? ¡Jamás!

—¿En qué piensas ahora?— expresé al ver cómo seguía viéndola después de cuatro años juntos.

—En si sueño... Cada mañana a tu lado descubro que todo lo que siempre quise está junto ti. Eres el amor que una vez perdí y recuperé con duro esfuerzo... Gracias por amarme, Harold.

— Gracias por amarme tanto, Harold...—sonrió, intentando que su voz no se quiebre. Cada vez que la miró como la miró ahora, sin quererlo, le hago derramar una lágrima.

    Robert se ha despertado, y con emoción al vernos juntos sonríe traviesamente, porque sabe que ha entrado a nuestra habitación sin permiso.

—Hermanita...—dice al colocar sus manos en el vientre abultado de Ariana, cuando ella se pone de pie.

—Sí...—besó el vientre de Ahinoa al arrodillarme— Allí está tu hermanita.—le guiñó el ojo a Ariana al verla sonrojarse—.¿Verdad que tu madre está cada vez más hermosa?

—Sí...—dije y aplaude con sus manitas cuando lo tomó en mis brazos y lo cargo para llevarlo al baño.

— Los niños pequeños como él no mienten. Luces hermosa, Ariana...—la besó de nuevo, para dejarle arreglarse, diciéndole que nos encontraremos en la cocina.

     Sí... Ahora he descubierto que es sentirse en un hogar. Yo encontré mi hogar...

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Hola, aquí de nuevo yo... Quiero agradecerles a todos mis queridos lectores que a pesar de mi tardanza esperaron el final de esta segunda parte. Como algunas me pidieron un poco más, decidí  no hacer un nuevo epílogo, sino dejarle más allá del Epílogo. Espero que les guste. Por cierto, haré una nueva versión de esta novela. Empezaré a publicarla hoy. Se llamará: Por Siempre en tus Ojos. La trama tendrá cosas similares y a la vez distintas. Me gustaría conocer su opinión... Saludos desde Venezuela.

Por cierto, ¿de qué países son?