Backstage - Nikki Sixx/Izzy Stradlin by N.P.

El Encuentro

Observaron a Nikki hasta que desapareció en la entrada del Whiskey. Emma se giró para encarar por fin a Izzy que miraba al suelo fumando un nuevo cigarrillo. Espero que éste hablara y la mandara a la mierda, pero hizo nada. Le jodía no se capaz de leer su rostro pues mantenía un semblante bastante inexpresivo.

Notó de reojo, en el cristal de la camioneta, que su cabello estaba hecho un desastre y su ropa seguía desaliñada y sutilmente se arregló un poco. Al notar que Izzy seguía sin ninguna reacción soltó aire y se dispuso a caminar para buscar un taxi y marcharse a casa. No iba a esperar más en el frío para que Izzy la mandara al demonio. Podía irse ella sola. Seguía andando cuando sintió una fría mano sujetandola firme pero sin lastimarla.

—Escucha, pensé en muchas maneras de disculparme pero ninguna parecía suficiente, yo... Perdóname Emma, tu amigonel imbécil tiene razón. Debí estar contigo y no hubieses pasado un mal rato. Si algo te hubiese pasado yo... — Izzy soltó su agarre y le dió una última calada a su cigarrillo antes de tirar la colilla a la acera— Por favor perdóname, no te vayas, por favor. — Emma lo miró sorprendida.
—En realidad creí que no querrías saber nada de mí— susurró mirando a otro lado avergonzada intentando evitar la profunda mirada del pelinegro.
—¿Porqué querría eso?
—Yo... Supuse que podrías mal interpretar la situación con Nikki, no sé—Su vista seguía fija en cualquier lado menos en Izzy, quien tomó su barbilla obligandola a mirarlo.
—Cualquiera que tenga dos dedos enfrente puede ver que no eres esa clase de chica—Emma casi se desmaya al ver la dulce mirada que Izzy le daba. Si bien su rostro era inexpresivo sus ojos eran un torrente de emociones, veía ternura, tristeza y mucho arrepentimiento.—Emma me gustas y mucho, no quiero arruinar nada. Sé que estamos empezando y solo quiero que esto siga llevando su propio ritmo.— Ella le sonrió.
—A mi también me gustas— Izzy sonrío ampliamente— Y no tienes porque disculparte, estoy bien. No pasó nada y eso es lo más importante—Izzy hizo una mueca no muy convencido, iba a reprochar pero ella fue más rápida y puso un dedo sobre sus labios— Será mejor que entremos al sound check o Vicky nos va a matar.

El pelinegro sonrió y asintió, llevando consigo su guitarra. Entraron al bar y Emma se disculpó para ir al baño a arreglarse mientras Izzy estaba en el escenario en la prueba de sonido.

—¿Dónde estabas? Estamos casi terminando esta mierda. Joder, Izzy ¡esta es nuestra gran oportunidad!— El pelirrojo estaba rojo de ira. Izzy sabía que era porque estaba nervioso y le permitió que le hablara así, pero decidió ignorarlo— Idiota —Axl se fue refunfuñando. Steven se acercó a él mientras conectaba su guitarra.

—¿Los ves? ¡Mötley Crüe está aquí!, tenemos que hablarles después del show—el chico estaba tan emocionado que a Izzy casi le dieron ganas de sonreir. Mötley no era su estilo, pero siempre ers bueno tener contactos. —Caray, creo que ese tipo te quiere matar— Levantó la mirada en dirección a donde Steven miraba emocionado y cualquier rastro de alegría que tuviese se esfumó. Ahí estaba el idiota aquel, mirándolo con desdén y el muy cínico levantó su copa en su dirección mientras le sonreía falsamente. La ira empezó a recorrerle la espalda y lo miró deseando que se ahogara con su whiskey. Sólo quería provocarlo, así que siguió en lo suyo.

Aunque no pudo evitar preguntarse como era que Emma conocía a Nikki Sixx pues no lo había mencionado. Luego recordó que le había dicho que trabajaba para alguien que representaba a una banda y debían ser ellos. Vaya, si que estaba muy bien conectada. Porque a pesar de que su música no fuera de su estilo era una buena banda y tenían su reputación ya establecida. Pensó en lo discreta que era Emma, cualquiera en su posición estaría alardeando. Cada vez le gustaba más.

La vió entrar de nuevo al área a paso tranquilo y elegante para aproximarse a Vicky, notó como algunos sujetos se atrevían a decirle barbaridades y ella sin más los ignoraba. ¿Cómo podía ser alguien tan preciosa y no darse cuenta? Al llegar a Vicky las vió dirigirse a él y no pudo evitar formar una sonrisa.