Crisantemo

Capítulo 17

A comparación del castaño el sultán se veía bastante despreocupado -Hey Makoto, también estas aquí

-Mi señor… ¡¿Pero qué haces?!

-¡Callate!- inmediatamente le tapó la boca -no sabes nada sobre la discreción, nadie sabe que vine

-Pero, pero, pero…- era peligroso si alguien lo descubría -Rin, no debes escapar.

-También quería ver el festival pero mis consejeros me lo negaron así que escape y que bueno que me tope con ustedes. Me estoy muriendo de sed y no traigo dinero

-Ah sí, toma- ya que era el sultán no debía negarle nada -Toma Haru.

-Pero…

-No te preocupes, estoy bien- sonrió volviendo la vista hacia el pelirrojo quien se bebía por completo su bebida

-¡Ah! Delicioso ¿Saben dónde están los puestos de juegos de azar? Me siento con suerte- mostró sus dientes en una perfecta curva

Makoto suspiro cansado -Por aquí- ahora era su responsabilidad el cuidarlo -Vamos Haru.

Haru notó la frustración del otro, parecía que no quería estar con ese tipo aunque a él le daba lo mismo y al pasar la mayor parte del día juntos se dio cuenta de que tal vez Makoto estaba exagerando pues Rin era bastante energético y competitivo pero aun así no era un tirano de lo que tanto temía el castaño porque Haru sabía de tiranos y el pelirrojo no lo era, a decir verdad se sintió bien el convivir con alguien así

-Hasta aquí te dejamos porque si vamos más lejos pensaran que fuimos nosotros quienes te secuestramos.

-Está bien, está bien. Me divertí mucho deberíamos repetirlo- Makoto inmediatamente negó -Lo sé. Es peligroso y complicado- algo decaído respondió -Demasiadas responsabilidades. En fin…- suspiro profundo -Nos vemos

Makoto y Haru solo observaron como se perdía en la obscuridad que conducía el camino hacia el palacio -Estoy muy cansado,volvamos a casa

Y al fin solos se animó a preguntar mientras recorrían el sendero a casa -Oye Makoto ¿De verdad es tan peligroso como me dijiste?

-Lo es

-Pero…

-Es demasiado impulsivo y se deja llevar por sus emociones, eso lo hace tan peligroso además cuando se sienta en su trono es una persona totalmente diferente y de cuidado- aún no podía creerlo

-¿De verdad no te agrada tu sultán?

-El no es mi sultán- sus palabras lo confundieron sin embargo prefería no ser entrometido por lo que guardó silencio el resto del viaje.

-¡Haru! ¡Mira, mira!- Momo corrió hacia él en el momento en que los vio entrar sosteniendo algo que parecía ser un pescado -¡Compramos saba!

-¡Y piña!- Kao y Ai surgieron detrás mostrando la fruta

-¿Saba y piña?- el más alto no entendido

-Haru dijo que su abuela siempre le preparaba de desayuno saba con piña además de que la saba es su comida favorita.

-¿De verdad?- preguntó Makoto sorprendió -No lo sabía

-¡Lo es!- afirmó el menor de los Mikoshiba en lugar de Haru -¡Y mañana desayunaremos eso! ¡Yahuuu!- gritó una vez más levantando el pescado en lo alto

-Gracias

Haru se veía avergonzado ante tal resolución y hasta ese momento se dio cuenta de que realmente había olvidado preguntar las cosas mas esenciales como ¿Cuál era su comida favorita? O ¿Cuál era su color favorito? Estaba dando por hecho que el moreno se abriría y le relataría todo acerca de el pero no era así, Haru era tímido y le gustaba pasar desapercibido -Haru ¿Cual es tu color favorito?

-Me gusta el azul

-Oh…- eran tan fácil preguntar y obtener una respuesta

-Haru debes decirnos como se prepara para el desayuno de mañana

-Si

De repente se notó excluido en la conversación prefiriendo irse de ahí porque además de sentirse fuera de lugar se sentía irritado por alguna razón que no llegaba a comprender totalmente -Adiós

Haru lo miró por última vez y se despidió de el para irse a dormir

-Makoto-san, por aquí- llamó Chigusa para que tomara asiento junto a ella

-Buenos días- sonrió mirando el platillo frente a el -¿Enserio prepararon esto para el desayuno…

-Si, no esta mal pero no lo comería diario y como desayuno- Makoto probó un bocado y no le resultó tan mal -Es muy bueno que Haruka se empiece a llevar bien con Kao y Momo- el castaño desvío la vista hacia donde estaban los mencionados observando como preparaban y servían el platillo -Creí que se sentiría solo después de que Ai se fue a la tienda principal pero que bien, me equivoque además se esta entendiendo bastante con Kao

-¿De verdad?

-Si, supongo que es debido a que tienen casi la misma edad

-Oh…

-También necesito decirle, Kao quiere llevar a Haruka a un restaurante donde venden comida del mar

-Sería genial ir todos juntos

-Sí, sería increíble pero Kao quiere ir a una cita sola con él- la palabra cita retumbó en su cabeza dejándolo en blanco, ni siquiera noto como se cayó el bocado que sostenía con el cubierto -Pienso que les haría bien salir juntos después de todo ¿No cree que se ven lindos juntos?- No había respuesta, no procesaba el significado de la palabra cita. Simplemente no se imaginaba a Kao y Haru saliendo en una cita romántica -¿Makoto-san?- cita, cita, cita era lo único que se repetía en su cabeza -¿Cree que sea adecuado?

¿Adecuado? ¿Para quién exactamente? Porque para él en definitiva no lo era pero intentó calmarse y actuar normal -Ya… ¿Y necesita dinero?

-Si

-¿Por qué no me pide ella?

-Le da vergüenza porque dice que pedirle dinero para una cita le pareció algo egoísta

-Egoísta…- repitió sin apartar la vista de la rubia quien le sonreía a Haru -Yo…- no sabía cómo reaccionar pero tal vez como decía Chigusa era bueno que Haru estuviera con un linda chica como Kao -Dile que pase más tarde a verme al taller

-Claro, yo le digo- la chica junto a él comenzó a reír, lucía emocionada por su amiga a diferencia de su persona pues él sentía un nudo, un malestar en su estómago que le quitó el hambre

-Debo ir a mi taller- se levantó sin terminar

-¿Makoto-san?

Y desde su lugar Haru observó como el castaño se fue dejando la saba con piña que preparó para él