capítulo 19

146 25 2
                                    

Unos días después Kao había ido por el dinero, habían decidido la fecha de su cita y el castaño solo pudo observar como se iban sin poder decir nada

-Espero que les vaya muy bien- Chigusa murmuró junto a él con una enorme sonrisa

-Yo también...- ¿Qué más le quedaba? No tenía derecho a opinar, solo debía resignarse y desear felicidad para ambos a pesar de que no estaba a gusto

-¡Makoto-san!- Momo venía corriendo de quien sabe donde -¡Tiene un mensaje!

Sin muchos ánimos miró el papel, probablemente si hubiera llegado en otro momento estaría frustrado pero ese día era perfecto para distraerse -Momo prepara a Nish, tengo un llamado del sultán.




Kao guió a Haru hasta el restaurante. Era agradable, no tan concurrido pero lo suficiente como para llenar la mitad de las mesas disponibles.

Cuando recibió el menú se sorprendió de la variedad y aunque se esforzó por aprender a leer aun se le dificultaban algunos nombres de los platillos -De este lado están los guisos con especialidades de saba- Kao se acercó un poco mostrando la sección

-Son muchos.

-Si pero Makoto-san nos dio bastante dinero como para dos o tres especiales para cada quien. Le dije que era demasiado pero él insistió porque mencionó que le gustaría que probaras más de tu comida favorita con diferentes variantes.

Negando con la cabeza una ligera sonrisa se le escapó ante las tonterías que Makoto hacía por el ocultándose detrás del menú para que su acompañante no lo notara -Pediré este.

Mostró a la rubia su decisión quien llamó al mesero para que tomara su orden y unos minutos después regresó con el pedido comenzando a comer -Está delicioso- también el probó y era cierto lo que afirmaba, estaba demasiado bueno -Prueba- acercó su cubierto con una porción de su comida a los labios de Haru. Hasta ahora solo a su abuela y madre les había aceptado el que lo alimentarán en la boca puesto que en los lugares en los que había estado antes lo obligaban a comer a la fuerza atiborradole la boca pero ya que la chica reía feliz no le haría el desliz y aceptó tomando el bocado

-Esta bueno- murmuró degustando la elección de la rubia

-¡¿Verdad?!

-Si, ¿Quieres probar del mio?- imitó su ofrecimiento pero él solo acercó su plato para que ella lo tomara por si misma

-¡Está delicioso!- gritó saboreando -Fue una excelente idea el venir aquí.

Así como lo afirmó era cierto, el ambiente y la comida eran perfectos y tras terminar su primera comida decidieron pedir un segundo plato -Oye Haru ¿Cuándo termines tu traje te irás?

Su repentina pregunta no se la esperaba -Yo...- lo había pensando pero no se lo había contado a nadie -Cuando llegué aquí y Makoto me dijo sobre aprender el oficio, el traje, la venta de este en la tienda principal y el dinero mi objetivo era irme pero ahora que he tenido el tiempo de meditarlo probablemente no me vaya. Creo que hasta el momento estar con Makoto será la mejor elección que haré en mi vida.

Kao sonrió ante sus palabras -No se porque pero Makoto-san tiene algo que te hace confiar y saber que pase lo que pase al estar con él serás feliz, yo por eso a pesar de que no me obliga a quedarme no me voy. Me ofreció lo mismo que a ti, aprender el oficio pero no tengo talento para ello y lo que hago es intentar preparar la mejor comida para él retribuyendole todo lo que ha hecho por mi hasta ahora

-Es una excelente forma de hacerlo

-¿Tu crees? Aunque aun me siguen fallando algunas cosas pero Makoto-san se las come de todas maneras. Por eso lo quiero mucho porque es muy amable.

Tal vez él también comenzaba a sentir lo mismo que Kao hacia el castaño y por alguna razón a partir de eso lo que siguió fue una larga conversación con solo un tema, Makoto.

Finalizando su último platillo Kao le pidió ir a un lugar más. Era la azotea de un gran edificio -Desde aquí se puede ver el hermoso atardecer, lo descubrí hace mucho tiempo- por lo que se quedó mirando el horizonte -¡Tengo que hacerlo!- su repentino grito lo asustó -Oye Haru hay algo que quiero decirte- Se giró hacia ella ignorando el paisaje poniendo toda su atención notando la repentina coloración rojiza de sus mejillas y el nerviosismo -Yo...- y comenzó a hablar y divagar cosas sin sentido tan rápido que sintió que superó a Momo cuando intentaba explicarle alguna tontería

-Kao no te estoy entendiendo.

-¡Me gustas!

-¿Eh?

-¡Me gustas mucho!- No estaba preparado para eso -Me gustas Haru, eres una increíble persona y no pude evitar enamoré de ti. Me gustas

Bien, eso era inesperado. En su vida nadie se le había declarado y necesitaba responder al ver lo ansiosa que estaba su acompañante por saber ¿Pero qué debía decir? ¿Sentía lo mismo? Apreciaba y hasta posiblemente quería y le gustaba pero sentía que no era el mismo sentimiento -Kao...- era necesario escoger las palabras correctas -Lo siento- debido al aprecio que sentía requería ser sincero con ella para no ilusionarla -Me gustas pero mi tipo de gustar no es el mismo que el tuyo. Yo aprecio todo lo que has hecho por mi pero hasta hace no mucho, antes de estar aquí con ustedes lo único que deseaba todos los días era morir. Siempre me preguntaba porque motivo todo lo que viví me paso... Así que no puedo amar a alguien porque no me siento capaz de ser recíproco cuando tal vez ni siquiera he podido amarme a mi mismo- la mujer frente a él solo lo miraba fijamente a lo ojos sin emitir sonido alguno -Yo solo siento por ti un amor fraternal. Perdón pero no puedo ofrecerte más que eso.

Silencio y nada más ¿Le había roto el corazón? -Perdón por incomodarte- al ver sus ojos pensó que lloraría pero no lo hizo -Entiendo, yo me precipite confundí tu amable y gentil forma de ser conmigo en algo más

-Kao...

-Cuando te enamores de alguien ¿Puedes decírmelo?- no entendió porqué pero ya que no era probable que pasara asintió -La persona que ames será la más afortunada del mundo- sonrió -Porque será el amor más puro que puede existir.

Puro... Creía que esa palabra no encajaba con el pero ¿Ahora que seguía?- ¿Quieres volver a casa?

-No, aún no. El atardecer aún no termina y vinimos a verlo ¿Cierto?- los ojos de Kao lucían cristalinos con la luz naranja del sol

-Si- regresó a su posición inicial, mirando el horizonte y el ocaso

CrisantemoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora