Eryx, Cadie, Juliun y Aglaia se estaban divirtiendo en el agua, mientras nosotros estábamos afuera, tumbados en unas toallas supervisándolos que no les pase nada.
— Este lugar es tranquilo y maravilloso. ¿Como lo descubristeis? —pregunta con interés.
— El día en el cual llegasteis al hotel, fui a andar con Sander del tema que ya sabéis, que no me fiaba nada en ellos, Ezio nos siguió hasta este lugar. Yo me escondí por allí —señalo unas rocas a mi derecha —. Y Sander por allá —Denes y Uranus miraron hacia donde yo señalaba —. Tan solo vinimos a descubrir que había mas allá del puente.
— Y al volver te encontraste con nosotros.
— Exacto.
— Al menos es un lugar tranquilo para ellos —Denes señala donde están los renacuajos.
— La verdad yo no se como pueden estar tan tranquilos —Uranus habla mirándolos.
— Todavía pueden ser inocentes un par de años más —bromea Denes.
— Estos niños crecen rápido.
— Aguafiestas —hablan a la vez.
— ¿Que pasa Calix, sin tabla de surf no te gusta meterte al agua? —ríe Denes por lo que acaba de decir Uranus.
Se podría interpretar de esa forma ya que cada vez que se metían a la piscina el noventa y nueve por ciento de las veces no voy con ellos.
— Muy gracioso. No es por eso. ¿Te tengo que recordar donde me encontraba cuando llegasteis? —niega con la cabeza.
— En donde te encuentras en estos momentos —se divierte mi primo.
— Calix, Denes, Uranus —nos llaman.
— ¿Pasa algo? —nos ponemos en alerta. Los tres nos ponemos de pie a la vez y los renacuajos se ríen de nosotros.
— Venid con nosotros —lo cuatro se salpican entre ellos, nosotros nos miramos y corremos hasta ellos. Denes coge en brazos a Cadie y Aglaia, Uranus a Juliun y yo a mi hermano. Se intentan bajar de nuestros brazos pero no lo logran.
— ¿Queréis algo? —hablo por todos mientras los observo divertidos. Le hago cosquillas a mi hermano y cada vez se me escurre más hasta que cae cal agua. Al menos no esta demasiado alto, ya que estaban en la orilla —. Granuja —le llamo a mi hermano —nada antes de que te atrape.
Mientras mi hermano nada para huir de mi yo miro divertido a mis primos. Poso la mirada de nuevo en Eryx y se encuentra cerca mío nadando. A mi hermano le gusta la natación aunque él siempre dirá que quiere surfear como yo. Pero a él le veo más en competiciones de natación que de surf como yo.
Doy unas brazadas y me encuentro a la par de mi hermano.
— Te atrape —lo cojo de nuevo en brazos para tirarlo unos metros más más para allá. Eryx no se queja, tan solo ríe, aunque esta vez ha tragado agua y esta tosiendo —no más juegos por hoy —. Salgamos del agua.
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Calix
Teen FictionDesde que tengo uso de razón siempre he sido un chico callado que casi no habla con nadie y es muy reservado con sus cosas. Siempre estaba solo, no hablaba casi con nadie y siempre iba con mis cascos, refugiándome en la música que escuchaba a través...