Capítulo 19

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El silencio empezaba a angustiarme, no sabia si ella estaba enfadada por mi comportamiento, se que a veces soy muy impulsiva pero ante esas situaciones mi yo impulsivo es el primero en saltar, sobretodo despues de todo lo que habia visto y vivido en mis propias carnes en mi antigua ciudad.

-Yo....Lo--sien--to- hablé atropelladamente.

-No tengo nada que perdonarte Natalia, sigo en shock después de esta escena- dio un trago a su bebida-
Sabes, nunca, jamas, me habían defendido en una escenita como estas, si las he vivido desgraciadamente, pero los tios seguian ahi en mas de una ocasión hasta que un amigo o incluso la policía intervenian, pero nunca han conseguido que me pidiese perdona. Así que gracias por eso. 

-No tienes nada que agradecerme Alba, lo habría hecho por cualquiera-era totalmente cierto odiaba quedarme de brazos cruzados ante esas situaciones y menos si podia hacer algo para evitarlas- desgraciadamente, las mujeres estamos expuestas todos los dias a este tipo de situaciones y es totalmente vergonzoso.

Hablamos durante un tiempo mas sobre ese tema.

Pero pronto sustituimos esa conversación por otra mas animada, volvimos a hablar sobre nuestras vidas, nuestros trabajos, carreras y sueños, ambas descubrimos muchas cosas sobre la otra y aunque yo fuese una persona sumamente difícil, y sobre todo vergonzosa, hable animadamente de mis gustos y aficiones con ella.

Era curioso, habían pasado casi tres horas desde que estábamos ahí y parecía que tan solo llevábamos allí algunos cuantos minutos.

Las dudas de si la rubia era una persona de fiar se dispersaron en segundos y una ternura afloro en mi cuando un perro adorable entro en el establecimiento y Alba puso una cara sumamente adorable y casi corrió hasta la posición del animal para acariciarlo.

Yo tan solo la observaba la carita que ponía cuando el animal se sentaba en el suelo y le empezaba a lamer toda la mano a la rubia.

Su carita de ilusion y felicidad.

Sin duda esa chica era un mundo.

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Estaba en mi habitación, en casa de los Lacunza, si ese era mi apellido paterno, no era muy bonito que digamos pero me flipa.

Había dejado en casa a Alba hace un casi cuatro horas y estaba recapitulando todo lo que había pasado.

Desde nuestra cena.

Hasta nuestra pelea con los babosos del MacDonald.

Sin olvidar las conversaciones aisladas entre bocado y bocado de las hamburguesas que habíamos pedido.

Una noche para recordar vaya.

Elena llevaba ya dos horas dormida.

Eran las cuatro y cuarto de la mañana y yo no podía dormir.

Como cada noche, el pan de cada día.

O no podía dormir o me despertaba de madrugada por las pesadillas cubierta de una capa de sudor, mi vida era vivir a base de cafés solo.

En los últimos meses el día que más había dormido habían sido cuatro horas seguidas.

Pensaba en ir al médico, pero deseche la idea, me gustaba ese momento de reflexionar.

Mi mente iba más rápido por la noche que por el día, y podía pensar de forma mas clara.

Había quedado con Alba en hablarnos, me había dado su teléfono antes de dejarla en la puerta de casa.

Me sentía extraña, no sabía que había sido eso, ¿una cita?, ¿a caso yo quería que lo fuese?  ¿Y ella?.

Muchas preguntas me agolpaban la mente, y decidí ponerle un mensaje, era tarde pero no pude evitarlo.

Conversación Whatsapp:

Natatinat: Alba, que me lo he pasado genial, hace tiempo que no me reía tanto, gracias por lo de esta noche, lo había Estado necesitando y ni me había dado cuenta                                   (04:18)

Para mi sospecha no tardo mucho en responder.

Albxreche: jope Natalia, yo también me lo he pasado súper bien, a excepción de la escenita, pero lo has sabido llevar demasiado bien, gracias de vuelta, y espero volver a quedar pronto, ha sido un placer, por ciento, ¿estas bien?,es demasiado tarde para estar despierta                     (04:22)

Natinat: podría preguntarte lo mismo cielo...... (4:24)


La Quiero Con Locura 😍Donde viven las historias. Descúbrelo ahora