Capítulo 10

214 7 0
                                    

Desayunamos y todos me agradecieron por el desayuno.
Subimos al coche y como no cambiamos todos de Sofía nos despedimos en casa.
Le dimos un beso y un abrazo.
No la quería mucho, pero le agradecía que hubiese cuidado de nosotras cuando la necesitábamos.
Llegamos a la estación y creo que me dormí nada más entrar porque me desperté ya en Madrid.
África estaba hablando con alguien por teléfono para quedar esta tarde, no le di importancia hasta que me dijo que yo también iría, le pregunte donde y con quien pero me dijo que eso era sorpresa.
Cogimos un taxi; sorprendentemente había para 6 personas, sino hubiésemos tenido que hacer dos viajes, y nos fuimos a casa.
Nada más llegar me enseñaron un poco la casa por encima, era bastante grande.
Era un chalet en la periferia pero estaba muy bien comunicado.
Se componía por dos plantas jardín, porche, incluso una barbacoa y unos columpios.
Recordaba haber jugado allí pero mis recuerdos estaban borrosos, hacia mucho tiempo que no venía.
En el interior conte unas 5 habitaciones dos con baño y luego otro baño en la planta de abajo al lado de un enorme salón y una cocina bastante espaciosa también.
Entre a la habitación que me me indicó África y flipe literal.
-Joder! -dije nada más entrar, escuchando la risa de África desde su habitación que estaba enfrente de la mía.
Haber, el joder fue porque me pegue tal ostia que mi pie casi no lo cuenta.
La muy cabrona me había dejado todo a oscuras y había puesto una especie de caja con nose que coño dentro que me había hecho estamparme de pleno contra ella.
Encendi la luz y ví que la caja estaba llena de libros.
Y justo al entrar a la habitación, la había puesto a propósito seguro para hacerme picar, y como soy tonta, piqué.
-Joder, ves como la lectura no es tan buena como dicen- le dije a mi hermana que había venido corriendo a mi habitación al oir mis gritos.
-Haber lela no sabes encender la luz antes de entrar- decía mientras se reía.
Tenía toda la razón pero no iba a dársela.
-¿Que pasa? ¿Te gusta la habitación? -pregunto África saliendo de su habitación.
-Ami si, pero sabes que pasa, que a mi pie no, sobretodo la gigantesca caja con la cual, al parecer, no se lleva bien.
-JAJAJAJJAJA, lo siento son mis libros del Instituto, se me había olvidado que estaban ahi, perdona.
-¿Seguro que no ha sido a propósito? -pregunte con el ceño fruncido.
-¿Soy sincera? -rio.
-Claro, eso espero.
-No me acordaba, pero cuando me he acordado ha sido justo antes de decirte que era esa tu habitación, y... pues no te lo he dicho para ver la cara que ponías, pero justo me han llamado y no he podido verla así que.... -seguía riéndose como una niña.
-Haber cariño, casi me rompo un pie y ¿te hace gracia?.
-No puedes evitar que la escena ha sido graciosa.
-Preguntale a mi pie, seguro que le ha hecho mucha gracia.
Estuvimos un par de minutos más discutiendo pero la volvieron a llamar y se fue a su habitación a hablar.
A los pocos minutos salió y me invitó a ir con ella a buscar a su hermana pequeña.
Tenía seis menos que mi hermana Sara, yo no la conocía pero había visto fotos y África me había hablado de ella, según ella era la luz de sus ojos.
Yo acepté y deje la maleta apartando la caja hacia una esquina para prevenir futuros incidentes como el anterior.
Me dijo que estaba en casa de sus tíos, a una media hora de allí, cogimos un bus y llegamos justo en veintiocho minutos.
Llamó a la puerta y una niña bastante adorable la abrió lanzándose al instante a los brazos de África, supuse que era su hermana, y yo mori de amor.
Una niña de estatura más bien bajita, tengamos en cuenta que mi familia es muy alta salvó África y por lo visto ella seguía los pasos de su hermana.
Tenía el pelo moreno y corto, con un flequillo perfecto.
Que maravilla de flequillo ojalá tenerlo así de perfecto. -pensé.
Yo siempre batallaba con el mío y aún así nunca quedaba perfecto.
Ojos oscuros,pelo oscuro y sonrisa impecable se parecía bastante a África.
Unos cálidos brazos me sacaron de mis pensamientos, mire hacia abajo y me arodille ante ella para abrazarla cómodamente.

La Quiero Con Locura 😍Donde viven las historias. Descúbrelo ahora