CAPÍTULO XXI

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Comienza la tormenta

Lilia comenzó a exasperarse por la presencia de Otabek en su recinto del placer. No es que el kazajo no pagara el dinero suficiente cada vez que acudía y se refugiaba junto al pequeño Yuratchka... claro que no, el chico era generosos hasta con la propina.

Pero muchos de sus clientes más importantes comenzaron a quejarse de la falta de aquel hermoso ángel en la pista y en sus camas (lo que importaba más para esos cerdos). La ausencia de Plisetsky era notoria al ser tan popular entre los más viejos adinerados... las amenazas continuaban sobre su cabeza, y aunque era imposible hacerle algo a Lilia eso era un dolor de cabeza que ya no quería soportar.

- Esos desgraciados... me darán dolor de cabeza – se decía así misma la mujer mientras daba masajes a su cien – tráiganme a Yuratchka – ordeno con seriedad a sus guardaespaldas, dos varones de temer entre los donceles... pues se decía que ambos habían sido un regalo del jefe de la Bratva después de ser tratado como rey en una ocasión. Nadie se metería con ellos o con Lilia.

- Plisetsky, requieren tu presencia en la oficina de la señora Baranovskaya – los varones no se tomaron la molestia de tocar la puerta en la habitación de Yuri, tan solo abrieron sin importarles que se estuviera cambiando para la noche.

- ¿Qué acaso no conocen lo que es la educación?... por una mierda, me estoy cambiando – los hombres sonrieron con alegría al notar el bello cuerpo del doncel y mientras en su mente saboreaban la idea de hacerlo suyo... tendrían que conformarse solo con eso.

- La educación o el pudor no existen en este lugar, creo que se te olvida que tan solo es un prostíbulo y tu una vil puta – respondió uno de ellos con mucho orgullo – apúrate a ponerte tu traje, putita... no queremos hacer esperar a la señora, ¿o sí? –

Yuri odiaba ser tratado como un cualquiera... aun si lo era. No era su culpa terminar junto a lo peor de lo más bajo de Rusia, tan solo fue engañado y capturado por Lilia obligado a entregarse a otros después de tener una devastadora experiencia con los varones. Ahora que habia encontrado el amor esperaba ver los resultados positivos de este... y junto a Yūri, el sueño de la libertad se acercaba más.

- Yuratchka – fue llamado por Lilia, los dos idiotas tras de él lo empujaron al interior de la oficina cerrando la puerta – por favor, siéntate para hablar –

- Desde cuando tienes tanta paciencia conmigo, vieja – Yuri comenzó a sospechar de algo, normalmente si ella quería algo iba y lo buscaba – ve al grano –

- Tan acelerado como siempre – expreso con molestia – bueno, entre más rápido lo diga más rápido terminamos con esto – aclaro su garganta antes de hablar – el Señor Altin ya no será tu único cliente de ahora en adelante –

- ¿Disculpa?... que yo recuerde tu nunca rompes una promesa. Eres una vieja despreciable si sigues cobrando el dinero de Bek... de ese idiota patinador y permites que me acueste con los viejos nuevamente – sus nervios se pusieron de punta, no quería hacer notar su preocupación.

- No soy tan idiota. Se cuáles son los problemas que se pueden ocasionar si permito que alguien te toque sexualmente... por eso solo bailaras –

- Así solo modificas a tu beneficio todo – y tenía razón, con Otabek solo habia jurado que nadie se acostaría mientras él siguiera yendo... nunca dijo nada sobre bailar – "mierda... mujer astuta" – renegó en sus pensamientos.

- Siempre debes pensar en todo y hallarle una solución a tu beneficio cuando te dedicas a negocios turbios... un paso delante de todo, Yuratchka –

- Si es todo me gustaría irme – dijo Yuri sin más, no quería escuchar más.

- Comienzas hoy – Yuri paro en seco – hay clientes que desean ver tu regreso y ya están sobre avisados de la situación: "solo ver, no tocar" ... aun así están felices –

Metamorfosis (FINALIZADO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora