Metamorfosis (FINALIZADO)

CAPÍTULO XXII

Dentro del ojo de un huracán (parte 1)

- Y pensar que dentro de mi mente este sitio olía a orina –

- Phichit, cállate –

- Yo solo decía... –

- Silencio – Ji no estaba para soportar tonterías de la pareja asiática, suficiente tuvo con la riña de su padre hace menos de dos horas por n querer dejarlo participar en la acción. Leo de igual manera quería persuadirlo sin éxito alguno, solo lograron que su mal humor creciera.

Al caminar con sigilo entre el callejón del edificio descubrieron que habia varias pareces de cerca metálica con solo una puerta de acceso (la llave solo les pertenecía a los hombres que trabajaban para Lilia). No fue impedimento para ninguno, treparon fon facilidad y tuvieron cuidado con el alambre de púas al final... no hubo más que pequeñas rasgadoras a la ropa.

- Leo, amor – en cuanto lograron pasar las barreras fue cuando comenzó la operación – la puerta de atrás esta sin vigilancia física, pero una cámara se encuentra sobre el marco... me encargare de ella y cuando este dentro del lugar volveré a comunicarme –

- Entendido... aquí todo sigue tranquilo, no hay rastro del objetivo o que sospechen de algo – varias risas se escucharon y la música de fondo, Ji trato de no molestarse cuando una mujer dijo el nombre de su marido en coqueteó – adiós, seguimos en contacto –

- Vaya, Leo morirá cuando termine todo – Phichit callo al notar la seriedad del doncel chino. Ji con mucho cuidado hacer un basurero hasta las cercanías de la perspectiva visual de la cámara de seguridad, ni siquiera ocupo ayuda para hacerlo lo siguiente... trepar el contenedor de metal y con sumo cuidado golpear el aparato.

- OYE, ¿ESTAS LOCO?... NOS DESCUBRIRAN – alterado, Phichit estuvo a punto de reclamar a Ji.

- Ese era el plan – no tardaron demasiado en aparecer unos cuantos hombres, Ji no pensó dos veces y disparo a la cabeza de todos sin compasión... matándolos al instante. Fue una escena muy fuerte para Seung, más para Phichit al ver a su amigo de una forma tan fría cometiendo asesinato – perdón, nunca quise que vieran este lado de mi... como el hijo de Guang-Hong Ji –

- Guang... era necesario hacerlo, no sabemos que intensiones tenían esos hombres hacia nosotros – Seung aun temblaba aun al ver los cuerpos de aquellos tipos desangrándose en el suelo... pero tenía que usar la lógica. En ese momento estaba seguro, que tarde o temprano, él y Phichit tal vez... terminarían haciendo lo mismo.

- Tenemos que entrar antes que otros vengan – Phichit no tuvo empatía al igual que su novio, para él era más difícil asimilar que su amigo de años, con quien se divirtió y compitió sobre el hielo unas cuantas veces... acababa de quitarle la vida a varios hombres a sangre fría. Hasta ahora notaba lo oscuro que en verdad era el mundo, y aquella frase de "las apariencias engañas" era tan cierta como nunca lo imagino.

- Me lo imagine – Ji estuvo seguro, que cuando revelara su lado más horrible eso pasaría. No tomo mucha importancia en ese momento, aunque doliera. Solo apretó el intercomunicador escondido entre su cabello y oreja – entramos – avisando a Leo su éxito.

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Otabek no dejaba de besar a Yuri tras su presentación. Al verlo salir del escenario no espero ni un segundo para tomar el cuerpo de su novio y llevarlo a escondidas para felicitarlo. Aunque Otabek se negara rotundamente a tener relaciones con Yuri (aún), no tenía problemas con besarlo con profundidad.

- Estuviste perfecto – dijo Otabek totalmente orgulloso.

- Me alegra saberlo, lo hice para ti – Yuri no paro de sonreír, reía y de nuevo besaba los labios de Otabek – ese no fue Ágape sobre el escenario... no era un chico dulce lleno de sueños e inocencia que todos los hombres desean profanar. Ese de ahí era Yuri Plisetsky, tu novio... quien no ama a nadie más que a Otabek Altin... por quien se sacrificaría mil veces si es posible –