Cuidados.

437 59 13
                                    

La primera vez que Loki despertó en esa madrugada, el negro absoluto cubría sus ojos. Se levantó e hizo crujir su cuello con una sonrisa aterradora. Observo a sus admiradores a través de la ventana y se dirigió allí.

Su mano se elevó. Ya todos estaban de pie, esperando a que el cristal se partiera. Repentinamente los ojos verdes destellaron y la mano se bajó, aferrada a los cabellos oscuros del villano. Loki se retorció en el suelo, lejos de la visión de sus conocidos y desmayándose por diez minutos.

Para cuando despertó de nuevo, seguía siendo él. Se arrastró como herido hasta la cama, necesitaba descansar, su cuerpo y su magia no resistirían mucho más de otra forma.


A la mañana siguiente, solo se encontraban Steve y Bucky jugando cartas frente a la ventana. Fue difícil, pero convencieron a los reyes de ocupar habitaciones no muy lejos de Loki. Un guardia de cada reino se apostaba a cada lado de la habitación en la que los soldados estaban sentados, mientras los otros dos descansaban.

El ojiverde llamó la atención de sus amigos, retorciéndose sobre la cama, como si tuviese una pesadilla. Ambos se acercaron para verificar que todo estuviese bien.

Loki despertó. Sudoroso y agitado, les sonrió a Steve y James, intentando asegurarles de que estaba bien.

Los soldados volvieron a su lugar solo cuando el villano volvió a dormirse.



A la hora del almuerzo, les tocaba a Thor y Bruce vigilar, con el par de guardias recién descansados. El Dios comía una enorme hamburguesa, mientras el científico traía una pequeña bandejita de ensalada.

- Se ve tranquilo. – Miro a su hermano dormir.

- Quien sabe que estará pasando allí adentro. –Achino los ojos, pensativo. – Imagino que será como combatir una infección. –

- Un poco más... Mágico. Pero en resumen, sí. – Apoyo su teoría el rubio, sin estar muy seguro de cómo se combatía una infección.

Loki podía escucharles parlotear allá afuera. Le mantenían tranquilo, como si esto fuese una tarde cualquiera y no estuviese luchando contra una fuerza aferrada a sus sentimientos más oscuros.



La próxima vez que despertó, su padre y Tony estaban charlando. El millonario le explicaba sobre tecnología midgardiana y el monarca comprendía tan rápido como su hijo. Incluso Anthony recibió una invitación oficial a Jotunheim.

- Oye, no estaría mal unas vacaciones por allá. –

Loki les observó reir, solo siendo capaz de girar su cabeza hacia ellos. Estaba tan cansado como si hubiese corrido toda una vida. Tony lo notó justo en el momento en que uno de sus ojos se tornaba lentamente a negro.

Como con un golpe de nueva energía, Loki se levantó sonriendo.

Laufey copió el movimiento, acercándose al cristal igual que su hijo. La mano de Loki se pegó al cristal con tanta fuerza que asusto a los dos al otro lado. Su otra mano sostenía con fuerza su brazo para detenerlo, sin mucho éxito.

Tony tenía la mirada del villano justo enfrente, y podía ver como uno de sus ojos lloraba, mientras el otro destellaba ira absoluta.

- Vuelve. – Dijo el millonario con repentina tranquilidad. – Aún no terminamos el traje que me prometiste.

Y como presionando un interruptor, Loki volvió por completo. Se sentó sobre la cama y dio una señal para asegurar que estaba bien.

- Solo necesito descansar.

De nuevo en sus sillas, Laufey miraba con intriga al humano.

- ¿Cómo hiciste eso?

- Tuvimos nuestros roces, pero conozco bien al chico. – Sonrió orgulloso. – Solo necesitas alejarlo de su pasado para mantenerlo cuerdo.

El rey Jotun lo sopeso un momento, y sonrió de la misma manera que el millonario.

- Si fuera más anticuado, lo obligaría a casarse contigo.

- Hielo gratis eterno. Podría tener una empresa entera de cosas congeladas. – Rio. – Suena como un buen trato.



Odin relataba hermosos recuerdos de su mujer para la atenta Natasha. Era casi como un cuento de Disney que la viuda deseaba que nunca se acabara.

- Es admirable que haya recibido a un bebé sin dudarlo. – Alagó la pelirroja. – En especial en medio de una guerra.

- Ella era admirable en cada acción. –

- Fue difícil para Loki perderla, ¿No?

Al otro lado, el pelinegro dormía con tranquilidad finalmente.

- Si, la perdida de Frigga termino de quebrar el espíritu de Loki.

- De la forma en la que sigue luchando... - Le sonrió al rey. –...creo que ella sigue siendo un gran pilar para él.

- Estoy seguro de eso.

No more illusions.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora