¿Jugamos? (PAUSADA)

7. Esta entre nosotros.

DEREK POV

Mia era diferente a las otras chicas con las que tenía una relación cuando estaba vivo, y cuando digo relación me refiero a sexo. Nunca estuve de novio. Era un mujeriego que se acostaba con diferentes chicas a la semana para saciar su apetito sexual.

Y cuando digo diferente no me refiero a la típica chica de 16 años virgen que se hace la difícil y luego cae rendida a nuestros pies.

Sabía que Mia iba a ser una chica diferente. Que no necesitaba ser aceptada por todos para ser feliz. No le importaban las opiniones de los demás. No se vestía como las demás, no era necesario que se pusiera un short que se le viera medio trasero para calentar pollas. En fin yo lo sabía.

Mia piensa que la conozco hace solo cuatro meses, pero se equivoca. Yo siempre estuve ahí, solo que ella no me veía. Estaba acompañándola en sus sueños y pesadillas. Tenía tan solo tres años cuando la vi por primera vez. Y allí estaba esa tierna niña con su pijama de ositos y su conejito de peluche, durmiendo con una luz encendida porque le temía a la oscuridad.

La oscuridad no es lo que ustedes conocen. No es penumbra y ya. Que prendes la luz y ya se ha ido. Es algo mucho peor, y nunca sabes con certeza a que te enfrentas. Se puede presentar de mil maneras, la más común es en un humano. No, no es que te posea y utilice tu cuerpo para matar gente, tranquilo. Adquiere su propia forma, si un día se le ocurre ser un perro, un perro será. Es muy difícil ganarle. Primero solo se presenta en tus sueños y te observa. Observa tus debilidades para después usarlas en tu contra, una vez que ya sabe todo sobre ellas te acecha, hasta que no abras los ojos, nada habrá acabado. Tienes que proteger muy bien a tus seres queridos, la oscuridad es mala y te los arrebatará. Persona que muere en tus sueños, muere en la vida real, esa persona sabe que diste lo mejor de ti para salvarla pero no ha funcionado. Llega un punto en que te atormenta, no sabes que decir ni que hacer, está entre nosotros ahora mismo. Te miras al espejo y te observa, se puede quedar callada o simplemente asustarte de la manera que a ella se le ocurra. No jueguen con ella, lo más probable es que te pierdas en un laberinto sin encontrar salida. Puedes ser la salvación de muchos, puedes vencerla, pero eso no será nada fácil. Cuídense, no solo en la vida misma, sino también en sus sueños.

Se viene lo peor y yo estoy aquí para protegerla. Ha perdido a sus padres, amigos, mascotas, pero no dejaré que se la lleve, no quiero que sufra lo que yo he sufrido. Una vez que te enfrentas a ella, no hay vuelta atrás. Derrótala y vivirás.

MIA POV

Desperté tranquila, lo cual es muy raro. Miré a mi costado y estaba Freddie parado con el desayuno.

- ¿Esta cómoda MI cama? - Dijo alzando las cejas y poniendo énfasis en el mí

- De hecho si - Alzó aun mas las cejas. Me reí.

- Vamos, te preparé el desayuno - Ustedes se estarán imaginando el mejor desayuno que haya existido en la historia de los desayunos y están en lo cierto. Me había preparado un licuado de banana, soy adicta a ellos. Junto a el había un pote de dulce de leche y una bolsa de merengues. Esto literalmente es un orgasmo.

- Tu sí que me conoces - Sonreí.

FREDDIE POV

Desde la muerte de su padre somos más que inseparables. Mia es como una hermana para mí, la admiro. La admiro muchísimo. Ha perdido mucho a lo largo de su vida, pero ella sigue adelante con una sonrisa.

- Esto esta jodidamente genial - Sonreí a su comentario. Sabía muy bien lo que le gustaba y lo que no. Con ella me comporto diferente, no piensen que estoy enamorado ni nada de eso por favor que asco. Es como acostarte con tu hermana, tu propia sangre. No era igual a las otras chicas ella era especial.

- Mia traga un merengue y después metete el otro - Parecía una competencia de quien comía mas merengues.

- Lo que tu digas - Dijo con la boca llena.

- ¿Y qué quieres hacer hoy? - Pegunté.

- Freddie, tenemos el cumpleaños de Ashley - Oh, lo había olvidado. Hoy hacía una fiesta en su mansión. Sep, era la típica rubia plástica de ojos celestes, mimada por su mega híper millonario padre. Pero Mia la quería, y no sé por qué. Ella siempre encontraba algo bueno en personas como ella, más hueca que un coco. Ni siquiera era buena en la cama.

- ¿En serio tenemos que ir? - Revoleé los ojos. Ya me estaba pareciendo a Mia, ja.

- Se lo prometí Freddie - Dijo con una sonrisa ladeada.

- Este bien, solo iré por ti y por las chicas que habrá en esa fiesta - Suspiró.

- ¿No puedes vivir sin sexo? - Mas que una pregunta fue una afirmación.

- Claro que puedo - Dije orgulloso.

- Seh, y yo soy Madonna - Bueno, capas tenía un poco de razón pero no iba a admitirlo.

- ¡MADONNA, ERES TU! - Rió hasta caerse de la silla. Literalmente se cayó.

- Imbécil - Reímos juntos.

- ¿A qué hora es la fiesta? - Pregunté sin ganas. Eran las 11:45 a.m

- A las ocho - Dijo levantándose del suelo.

- Genial - Dije mostrando el pulgar.

- Idiota ya me voy a casa, ¿A las ocho pasas por mí? - Preguntó.

- Claro, pero no te tardes esta vez - Últimamente no me contó nada acerca de su repentina estupidez - No me has contado que te ha pasado últimamente que llegas tarde - Dije cruzándome de brazos.

- Prometo estar lista a las ocho - Dijo obviando mi comentario.

- Mas te vale - La amenacé.

***

MIA POV

Mi habitación era un desorden, no tenía ganas de ordenarlo así que no hice mas que obviar el desorden. Si ya lo sé, llámenme Miss flojera. Recordé que tenía que estar lista a las ocho en punto sino Freddie me mataría. Busqué en mi armario que outfit usaría esta noche. De seguro todas irán con una falda corta que se le viera medio trasero y una remera musculosa tres talles menos para que ajusten sus tetas. Así iban siempre, pero yo era más bien simple.

Opté por ponerme un vestido con escote de corazón color azul francia, yep el azul es mi color preferido, ni muy corto ni muy largo, me llegaba hasta un poco más arriba de las rodillas. Saqué unos zapatos con taco color plateado, miré el conjunto detenidamente. Estaba satisfecha con lo que iba a usar. Ya con el outfit elegido decidí dormir una siesta, ya se ya sé, me acabo de despertar pero tenía sueño. Puse la alarma a las 5:55 p.m para despertarme, miré el techo de mi habitación por un largo rato, cerré los ojos y me dormí.

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Holaaa! Ja, no se pueden quejar, es bastante largo este capítulo. Espero que les haya gustado, déjenme saberlo con un voto y comentario. Gracias por el apoyo que me dan, las adoro! Hasta la próxima :)