El hada se había quedado junto con el protector en el árbol de la hermandad, para evitar así tener problemas con el inicio del día siguiente.
El protector la dirigió hasta una pequeña puerta que había justo debajo del pie del árbol. Al entrar quedó sorprendida con el hogar del protector, era amplio, luminoso y muy cálido, se podía sentir el sentimiento de paz y tranquilidad aún más fuerte dentro del árbol.
Cuando se hizo de noche el protector comenzó a cocinar la cena para ambos. El hada estaba cautivada con las habilidades culinarias del protector. Era notorio que entendía de esos temas, cosa que el hada casi no comprendía.
"Un gran amigo mío me enseño a cocinar, es muy bueno la verdad, no sé qué sería de mi sin él la verdad" dijo el protector para luego reírse fuertemente mientras preparaba todo.
El hada mientras tanto, estaba concentrada en el proceso que realizaba el protector, cortaba plantas y vegetales delicadamente en forma de cubos casi perfectos, para luego verterlos en un contenedor de barro que dentro tenia agua muy caliente.
"Lo que vamos a comer se llama sopa de vegetales, es algo sencillo y rápido de hacer, se está cocinando en una olla, la que se está calentando con el fuego debajo, ¿entiendes?".
Los ojos del hada brillaban de la curiosidad y el asombro, nunca había visto este método de ingerir alimentos, ya que siempre se alimentaban de néctar, frutas, o semillas que encontraban en el bosque o en otros lugares durante la exploración.
Luego de un rato, el protector sirvió dos portentosos cuencos de sopa, que a simple vista se veían un poco sencillos, pero su olor era totalmente atrapante.
Luego de sentarse, el hada estaba un poco pérdida, ¿cómo se suponía que iba a tomar la "sopa"? Había entendido como se realizaba el platillo pero no como comerlo, así que se sentía un poco ansiosa e incómoda al no saber qué hacer.
El protector no se había percatado de ese pequeño detalle, así que procedió a explicarle al hada como debía utilizar los utensilios para poder saborear su comida.
El hada probó tomando el tenedor, pero vió como se escurría la sopa entre el tridente, así que decidió probar con la cuchara, que para ella era un "mini cuenco con un palo pegado", a lo que el protector contestó riéndose a carcajadas.
El hada un poco enojada tomo un sorbo de la sopa y pudo sentir la explosión de sabores que inundaban su paladar, era una experiencia totalmente nueva, para la cual no tenía palabras que describieran los sabores que estaba degustando, sentía la calidez de la sopa bajando hacia su estómago y como ese calor se esparcía por su cuerpo, brindándole una sensación totalmente nueva para ella. Era sentir como su cuerpo cedía y se relajaba mientras la tomaba, como un abrazo al llegar a casa después de un largo día, como un beso de la persona que amas, como el acogedor fuego de una chimenea.
El protector se alegraba mucho de ver la energía con la que tomaba la sopa el hada, se alegraba mucho de poder pasar más tiempo junto a ella, deseaba que ese momento fuera eterno, para poder verla siempre feliz.
Al terminar de cenar, el hada estaba completamente satisfecha y le costaba moverse debido a eso, pero aun así ayudó al protector a ordenar y limpiar todo lo que habían ensuciado.
Luego el hada empezó a bostezar debido al cansancio y el sueño, así que el protector la guió a una habitación que tenía al lado de la de él, entraron y el hada contemplo la habitación. Era bastante similar a la suya en tamaño, además de que también tenía pelo de zorro en la cama y otras cosas que la hacían sentir más a gusto en ese lugar.
"Vaya, es una habitación muy bella, me gusta mucho que se parece bastante a la mía, muchas gracias".
"No hay ningún problema, la verdad me costó un poco elaborarla pero hacía tiempo que estaba lista", dijo el protector orgulloso de su éxito y trabajo.
"Eso quiere decir, ¿que ya tenías planeado que me quedara aquí?" Pregunto el hada sabiendo la reacción del protector.
"No, no, no es nada parecido, no había planeado nada, ¡te lo juro!", el protector estaba tremendamente avergonzado por haber hablado de mas, y más aun de que el hada descubriera su plan, "ya es tarde, me voy a dormir, que descanses".
"Igualmente que descanses", dijo el hada con una pequeña risa entre dientes, para luego dejarse caer en la cómoda cama y dormirse profundamente.
El protector dejó al hada y se dirigió a su habitación, también estaba tremendamente cansado por el largo día, aunque no lo pareciera, y en menos de lo que pensaba cayó preso del sueño, el cual le develaría el peor de sus miedos y la certeza de un presentimiento que ya había tenido antes.
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El Hada Herida
FantasíaEsta historia es una catársis de mi vida y mis sentimientos, no espero que a alguien le guste, pero espero que aquel que se atreva a leerlo pueda disfrutar de esta historia plasmada con mis mejores y peores pensamientos y sentimientos. Espero que lo...