Epílogo.

623 64 28
                                    

Última parte.


Los días, semanas, e incluso meses iban pasando con lentitud. En un hospital, en una habitación seguía aún con los ojos cerrados el oji-miel.

Erick estaba ahí todos los días, si iba a casa era sólo para dar de comer a su cachorro y cambiarse. De no ser así, todos los día estaba ahí.

-Es hora de que pase joven -Informó el doctor.

Asintió, se preparó y colocó lo necesario para poder pasar.

-Hola Chris -Saludo ingresando.

Tomó el mismo banco que venía ocupando desde hace cinco meses, desde que pudo pasar a hablarle y ayudar a que saliera del coma.

Tomó su mano, como todos los días, sólo que esta vez sintió un apretón más fuerte de lo normal. Levantó su vista, pero Christopher aún permanecía con los ojos cerrados.

-¿Y si despiertas? Digo, te dije que te tomarás tú tiempo pero, ¿no crees que ya fue bastante? Te extraño mucho Chris, no le des el gusto a la loca esa. Por cierto, fui al juicio y le dieron cincuenta años de cárcel por intento de homicidio, hay, que feo se oye. Pero bueno, ya no es una preocupación. Mi mamá vino ayer, tú mamá me localizó y me ha estado marcando, preocupada. Christopher, despierta ya -Una lágrima descendió de sus ojos, bajo la mirada.

-Ya.. Te dije que no me gusta que llores amor -Alzó su mirada, conectándola con esos ojos color miel que tanto deseaba ver desde hace seis meses.

Se levantó del banco, sonrió y más lágrimas bajaban de sus ojos.

-No te muevas, bueno, espera Iré a ver al doctor -El chico mayor asintió con una sonrisa.

-Despertó doctor, Christopher despertó -

El doctor lo miró asombrado, sin embarcó fue lo más rápido a su habitación a checarlo. Impidió que Erick entrará para hacerle unas revisiones.

Tardó al rededor de una hora, salió con una sonrisa muy grande en su rostro.

-Esta todo bien, puedes llevártelo a tu casa ya -

-Gracias -

Entró de nuevo a la habitación y se acerco a Christopher, lo beso, lo beso como quería besarlo desde hace mucho. Lo abrazo una vez término el beso.

-No sabes cuanto te extrañe mi amor -Lloró.

×

Habían pasado unas semanas, Christopher se estaba mejorando de maravilla. Christopher controlaba mejor sus celos con el cachorro.

-Te amo mucho, mucho -Dijo Erick mientras lo abrazaba.

-Yo te amo más -Beso su frente. -¿Comemos? Ya tengo hambre.

La pareja fue a comer, sonreían mientras Erick seguía contando todo lo que había hecho en su ausencia. Recordaron momentos juntos, aquella vez que se conocieron.

“-Bien Erick, yo me encargare de darte tú despedida de soltero”

Sin imaginar que llegarían a todo esto, sin imaginar que conocerían a su alma gemela, no lo tenían planeado, sólo sucedió.

The Striptease» Chriserick/ HotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora