Ángel Perdido |YoonJin| #1

Capítulo 7

-Jimin vine en camino- indico mientras trato de enredar una venda en su pantorrilla, Jeon tiene el ceño fruncido, pero se suaviza un poco

- ¿Le has contado? – cuestiona tranquilo casi en un susurro para verme con un brillo especial, entonces mi pecho se oprime, él lo ama, realmente lo ama, pero Jimin, él no puede ni quiere avanzar

-Sí, tú y yo podemos odiarnos y eso, pero estoy seguro de que Jimin bueno él debía saberlo- suelto para ponerme de pie y verlo desde arriba –Jeon, necesito que localicemos al equipo de NamJoon, que secuestremos a su madre y matemos a su hermano- termino.

- Ey, tranquilo – suelta en una risa floja y nerviosa –su familia realmente no tiene que ver-

-No te estoy preguntando- llevé mi mano al puente de mi nariz y ejercí un poco de presión con mis dedos –este juego, no estoy para esto, ni Yoongi, ni Jimin y mucho menos tú, venos no han pasado ni dos días del alejamiento de Jimin y ya te di un plomazo en la pierna- solté bajando mi mano y mirando sus ojos grandes

-Tienes razón- confeso para mirar alrededor y luego centrar sus ojos en mi - ¿y qué haremos después? -.

- Bueno, ya han pasado ocho años, creo que ha sido suficiente-.

- ¿Terminará? – Yo solo asentí.

Yoongi vestía unos pans grises, acompañados de una camiseta básica blanca y sus pies descalzos, se encontraba acostado en el sofá, sosteniendo un libro en sus manos y una taza de café reposaba en la mesa de centro, me acerque a él lentamente mientras me deshacía de mis zapatos y aquel suéter blanco que cargaba, mi pelinegro levanto la mirada para evaluarme lentamente, recorriendo mi cuerpo con una mezcla de lujuria y ternura, algo que realmente solo él podía lograr.

- ¿Dónde te encontrabas? – soltó aun con sus ojos fijos en mi

- Trabajo- solté cansado para sentarme a un lado suyo - ¿puedo? – cuestione señalando su pecho con mis ojos y este asintió, entonces recosté mi cuerpo y lo resbale entre sus piernas para quedar acostando sobre él –si te lastimo, no dudes en decirmenlo- añadí cerrando mis ojos para tranquilizarme con los latidos de su corazón, mientras sus dedos delgados acariciaban mi cabello

-Sé que estas tratando de decirme algo, pero no encuentras la forma- confeso y mi pulso se pauso – debo recordarte que nuestra relación se basa en la confianza y que preferiría enterarme por ti, qué por alguno de mis policías- indica para depositar un beso en mi coronilla – te amo, pero eso no significa que sea un estúpido- soltó.

-Simplemente tengo miedo... de que reconozcas que no soy suficiente- susurre aun con los ojos cerrados, quería creer que esto era un sueño, que nada estaba sucediendo

-Háblame- su voz cálida me atrapó, pero entonces.

-Vamos será divertido- dijo Alissa, sonriendo abiertamente mientras me veía con ojos demasiado brillosos –prometo que será algo pequeño, solo algunos amigos, incluso puedes llevar a Nam, ¿Qué dices?- culmino con un manos haciendo una pequeña suplica

-De acuerdo, ¿Qué puede pasar? Es solo un bar- me conteste para sonreírle y marcar a mi novio

-Nammie- susurré

- ¿Qué pasa amor? – vamos que aquel monosílabo hizo que un color rojizo invadiera mis orejas y una boba sonrisa se me escapará

-Alissa me ha invitado al evento de invierno, junto las chicas y algunos compañeros, será en un pequeño bar a la afueras de la cuidad, ¿Qué dices, me acompañas? – solté esperanzado imaginando sus gruesos labios fruncirse un poco

- ¿Tus padres saben de esto cariño? – pregunto cauteloso, Nammie siempre se preocupada sobre que mis padres estuvieran informados de mi paradero, ya que este era mi primer año viviendo solo

-Les diré que dormiré donde Arthur, sabes como son- tomé asiento sobre un sofá para colocarme en posición india

- ¿Realmente quieres ir? Estaba pensando que tal vez podríamos, hacer algo, juntos... no malinterpretes por favor-

Haremos el amor, me congele.

-Jin, bebé ¿sigues ahí? – cuestionó con un poco de burla

-S-si, Si cariño- traté de reponerme –sigo aquí-

- ¿Por qué no vienes a casa esta noche?, podemos ver algunas películas y cantar Karaoke- indico cálido

-Karaoke, me has convencido- solté para sonreir.

Realmente esa noche fue la mejor, vestí unos pantalones claros acompañados de un gran suéter color rosa, mi cabello castaño un poco desordenado y zapatillas blancas, recuerdo entrar al complejo de Nam, era un nuevo departamento, demasiado caro para mi gusto, bebimos vino rosa y cantamos demasiadas canciones, yo brincaba de un lado a otro, en mis brazos una almohada blanca mientras Nam me seguía, canté y baile, bebí y amé, reír, llore y tuve un par de orgasmos, mi novio me trato con suavidad, me hizo saber cuánto me amaba... me lo demostró, la canción en la radio sonada, mientras la luz tenue de una lámpara iluminaba nuestros cuerpos desnudos, yo montaba a mi novio de forma lenta brindándonos el mayor placer posible, sus grandes manos sujetaban mi cintura con fuerza mientras pequeños gruñidos se le escapaban, sus labios gruesos recorrían mi cuello, mis clavículas, mis labios, mis tetillas.

-Sigue bailando lento amor- susurró ronco mientras yo emitía un gemido dejando mi cuello expuesto –sigue bailando lento, que me estas destrozando- esa vez él se vino dentro de mí, esa vez selle mi contrato con el diablo.

-Jin, Jin – una mano me removió –cariño despierta-

- ¿Yoongi? – cuestione tratando de centrarme en el rostro frente a mi

-Dios Hyung, ¿estás bien? - soltó preocupado para llevar sus manos frías a mis mejillas – te hable tantas veces, ¿te pasa algo? -

-No- indique para girar mis ojos a la mesa donde se encontraba el café –bueno, realmente...-

-Realmente...- continúo invitándome a terminar

-Quiero terminar con esto Yoongi-sshi – suspiré para mirar sus ojos oscuros, estaban evaluando mi comportamiento, Min siempre hacia eso, él callaba me barría con la mirada, tratando de entenderme, entonces suspiraba y asentía, él siempre trataba de entenderme, sin importar si estaba bien o no, y realmente eso era lo que valía entre nosotros.

- ¿Qué debo hacer cariño? – suspiro, pero algo en mi estómago se estrujo

- ¿Podrías dejar de llamarme así, al menos por ahora? – eso lo hizo tensarse y tomar mi mentón un poco preocupado

- ¿Qué está pasando? - su voz era clara y demandante

- Los recuerdos están volviendo – solté y su mano se volvió piedra, no mal interpreten él no me estaba lastimando, al contrario creo que yo era quien lo lastimaba –ellos, yo cierro los ojos y aunque este contigo, ellos me atacan, lo siento- confesé para ponerme de pie, y caminar a la habitación.

Esto se había terminado, pero ¿realmente que había terminado, mi relación con Min o mi juego con Kim? Y entonces la primer lagrima cayo. 

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Nuevo capitulo, ahora vine el momento, no solo será complicado para Jin jejeje si no tambien para mi, vamos amo el SuJin y NamJin, pero Jin tiene historia con cada uno de ellos (al menos en la presente novela), los recuerdos de Jin volvieron, ¿se imaginan por que Yoongi reacciono así al saberlo? 

Gracias por leer!

Besos de conejo, aññooooo.