Ángel Perdido |YoonJin| #1

Capítulo 30

Kim SeokJin

Una semana después

-¿Entonces lo has interceptado?- comento apoyando mis manos en la mesa de la sala de juntas

-No sé si exactamente interceptar sea la respuesta- indica Jeon, mirando su computador para después verme –está actuando de forma rara, sus cargamentos han sido irregulares-

-Eso puede ser por los atentados ¿no?- Jeon niega contestando a Jimin en silencio

-Está muy bien posicionado como para que eso sea el inconveniente- duda –creo que planea algo-

-Ese cabrón- exclamo para tomar asiento y sacar un cigarrillo -he matado a la mitad de su equipo y aun así no logramos atraparlo ¿pero qué cajaro? ¡Se supone somos los reyes en esto!- golpeo la mesa con la palma

-¿Crees que no lo sé?- responde el castaño ya algo irritado–es que algo realmente no cuadra-

Suspiro para dar una bocanada al cigarrillo

-Tenemos que pensar de forma fría, no exaltarnos-

-Tengo una semana Jimin- confieso y ellos me miran interrogativos

-¿Qué has dicho?-

-Le prometí a Yoongi dos semanas, y que si no mataba a NamJoon en ese lapso, nos iríamos – me ven confusos, fuera de lugar

-¿Qué mierda?- indica Jeon –y se puede saber cuándo diablos pensabas contarnos- comenta frustrado -¿tal vez cuando estuvieras en el puto avión?- alza la voz y eso me molesta

-¿Pero qué demonios te pasa? No es asunto tuyo- replico

-Lo es- señala Jimin antes que Jeon – lo es porque también nosotros salimos afectados-

Suspiro y miro al rubio ¿Realmente somos eso, mejores amigos? –creo que fue suficiente de esto, podemos literalmente llenar una piscina con euros y nadar en ellos- indico mirando el cigarrillo extinguirse –tenemos que continuar con nuestras vidas, avanzar- los miro, y noto su incomodidad.

¿Cómo avanzar si solo vives y lates solo por el pasado?

¿Cómo avanzar si odias salir de la zona de confort?

Jimin asiente sin ver al castaño en ningún momento, aclara su garganta y sale un segundo de la sala

-Pensé que habían aclarado las cosas- indico para ver al castaño centrado en la computadora

-Lo hemos hecho- dice –no puedo obligarlo a avanzar-

Nadie puede.

La relación con Yoongi ha sido monótona, nada fuera de lo normal pero nada rutinario. Aprendí mucho en estos cinco días. Incluso aprendí más en cinco días que en años de relación.

Me di cuenta que me encantan los mimos, que me relajan demasiado las caricias en la espalada después de los besos nocturnos.

Me di cuenta que soy dependiente de ver a mi prometido salir de la ducha con una toalla blanca envuelta en sus caderas.

Me di cuenta que soy dependiente de ese te amo antes de dormir y que adoro su olor a bosque.

Me di cuenta que podía amar y continuar

Me di cuenta que lo único que necesito es a él

-¿Qué tanto piensas?- irrumpe el castaño

-Que realmente debo cerrar el ciclo, matarlo y comenzar una nueva vida- contesto sin mirarlo, tirando el cigarrillo

-¿Sabes quién es el tío de Jimin?- atrae mi atención, él no me ve, en cambio ve la puerta, esperando que el rubio no entre

-No me lo ha contado- indico –puedo investigar- suelto

-Lo quiero muerto- confiesa

-Igual yo- mis ojos lo analizan –pero sabes que aunque hagamos esto él no se fijara en ti- él asiente -¿Qué pasará con tu padre?-

-Él no es mi padre, pueden hacer lo que quieran con él-

-Estoy seguro que Jimin ha pensado en matarlo, pero se ha detenido- él me ve, la duda baña sus ojos y quiero reír por ello -¿en realidad nunca has tratado con tu padre?-

-Creo que deje eso claro-

-Esto será incomodo- sonrió –vamos que Jimin era una joya para tu padre, su estrella- agrando las manos –tu padre adoraba a Jimin enfermamente-

Jeon está irritado su quijada parece a punto de partirse en dos

-¿Por qué me lo has dicho?- me hinco de hombros

-Creo que no es justo que seas él único que sienta culpa- hago una mueca –realmente Yoongi y tú debieron ser unos hijos de puta en otra vida, para que aun paguen su condena enamorándose de nosotros- termino para ponerme de pie y salir de ahí.

El camino a la cafetería se vuelve un poco tedioso, la radio menciona unas cuantas noticias sobre el nivel del peso y cosas rutinarias, entonces mi teléfono suena. Es Yoongi lo se al primer suspiro tras la línea

-Hola hermoso- contornea y sonrío

-Hola Yoongisshi-

-Tendré un operativo-

¿Un operativo? ¿Ahora? ¿Sin pruebas?

-Sé qué piensas que es extraño, yo también lo he pensado, pero es algo así como una emboscada, han llegado pruebas contra el cartel Kim- comenta bajo, lo más probable es que se encuentre en el baño, suspira –son ordenes de los altos mandos-

-No me lo creo- ríe trata de tranquilizarme

–creo que planea algo-

-Bebé no vayas- suelto

Cabrón, él cabrón planea una emboscada, planea quitarme lo único que me impulsa a seguir.

Mi sangre comienza a fluir más rápido al mismo tiempo que mi cabeza a zumbar y mis músculos a temblar.

-Cielo es algo rutinario estaré bien- ronronea

-¡No Yoongi, no lo entiendes!- me adelanto dando un volantazo para regresar a la bodega

-Amor tranquilo- ríe –debo irme me llaman-

-¡Yoongi- digo a la línea muerta

Mis manos comienzan a temblar, pero aun así logro tomar el teléfono y marcar a la bodega

-¿Has visto a Jimin?-

-¿Qué? ¡No, mierda es una trampa, le pondrá una emboscada a la policía!- silencio, me frustro JungKook parece no escuchar -¡Jeon, carajo!- presiono un poco más el acelerador pasando algunos vehículos

-Jin, Jimin no está-

-¿Eso qué importa? ¡Concéntrate!-

-Espera- indica bajando la voz –carajo- susurra

-¡¿Qué?! ¡¿Qué pasa?! ¡Jeon!-

-Se lo han llevado-

-¿Qué?-

-Han entrado- suelta.

-¡Ey!- gritan

Después se pierde la comunicación, logro escuchar unos cuantos golpes y ruidos sin sentido

Mi sangre comienza a hervir, mi pulso a acelerarse. Estoy a punto de sufrir algún infarto.

Cinco minutos, me encuentro a unos kilómetros de la bodega.

Jeon sigue sin contestar las llamadas y por más que trato de acceder a las cámaras de vigilancia no me es posible.

Entonces una explosión, un sonido sordo inunda la pradera de dos kilómetros de distancia, han explotado la bodega.

La han vuelto cenizas.

Esta evaporado y solo el humo negro con cenizas adornan el lugar.

-Jeon- suelto.