Capítulo 36: Dorada Lluvia de Primavera

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A medida que el tiempo para la Semana Dorada se acerca, el aroma de la primavera cambia para comenzar a reflejar más al verano. No todavía, en cualquier caso, pero se acerca cada vez más a medida que pasa el tiempo. Hay algunos días más calurosos que otros, provocando un poco de pereza en la gente.

Y en lo profundo de un parque, un extraño resplandor comienza a formarse cuando algo que ha estado durmiendo durante bastante tiempo finalmente comienza a despertarse.

Pero no del todo todavía.

Incluso eso, al parecer, es ligeramente afectado por la bruma de un día caluroso. Provocando el retraso de su verdadero despertar y simplemente descansando un poco más.

Una pequeña bendición para el Cardcaptor de Southern Cross.

Rin apenas detiene la necesidad de golpear sus dedos con impaciencia, mirando el reloj en la pared

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Rin apenas detiene la necesidad de golpear sus dedos con impaciencia, mirando el reloj en la pared. A sus ojos, no parece estar moviéndose y eso casi lo hace gruñir.

Rin vuelve a centrar su atención en la maestra, que todavía está hablando de química y se pregunta cuándo terminará.

A medida que la Semana Dorada se acerca, Rin se distrae. No solo por la promesa que hizo con Riku - en realidad no es una promesa, excepto en la cabeza de Rin-, sino porque está preocupado por la falta de Cartas recientemente.

Ha habido algo así como una "sequía" durante la última semana más o menos, ni siquiera un destello de magia, sin importar cuanto buscara Rin. La verdad sea dicha, debería estar relajado y disfrutando del pequeño descanso que tiene, pero un presentimiento lo mantiene despierto y explorando todas las noches.

Rin bosteza ante eso, a duras penas lo sofoca. Entonces mira la clase, viendo que no es el único aburrido.

'Tan solo son las clases de la mañana y ya está empezando a extenderse'. Rin mira el reloj de nuevo y suspira, volteándose hacia la maestra y después de un momento, hace todo lo posible para tomar notas cuando la maestra comienza a agregar hechos y ecuaciones a la pizarra.

No es fácil y Rin termina bostezando de nuevo.

"¡Yamaguchi-kun!" La maestra llama, haciendo saltar a dicho niño. "Por favor, ven aquí y termina la ecuación".

Él palidece ante eso, pero se levanta, viéndose casi como si estuviera yendo a su ejecución. Rin suspira ante la exageración y escucha un ligero eco. Girándose, se encuentra con la mirada de Mizuki quien parpadea de sorpresa ante eso.

Entonces le da una pequeña sonrisa antes de rodar los ojos y girarse a la pizarra, haciendo una mueca cuando Yamaguchi molesta a la maestra a medida que él comienza a escribir.

Rin se cuestiona eso, descansando su cabeza sobre su mano mientras se gira hacia la pizarra.

"No, Yamaguchi-kun. Ni siquiera estabas prestando atención, ¿verdad?" La maestra suena más exasperada que molesta, afortunadamente para Yamaguchi. "La ecuación es para..."

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