35. Entrenamiento saiyajin

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Capítulo 35_ "Entrenamiento saiyajin"》

[Narrador Omnisciente]

Sharotto se mantuvo en silencio. Siempre había tenido inconvenientes para descifrar sus emociones e incluso para sentirlas, pero no fue difícil para la saiyajin darse cuenta de que no le gustaba la idea. Pero había sido soldado toda su vida, y tanta experiencia militar le hizo fácil darse cuenta de que no tenían más opción.

- Ya veo..-murmuró Sharotto. Se quedó callada unos segundos y luego continuó-Es evidente que, por el momento y para nosotros, no hay más opción que seguir con el plan de la fusión.

-Sin importar si hay esperanza o no de que el Supremo Kaiosama encuentre la forma de que Gohan derrote a Majin Buu, aquí en la Tierra debemos hacer lo que podamos para combatirlo.-espetó Piccolo, cruzado de brazos-De lo contrario, continuará matando a gente inocente aquí en la Tierra.

-Concuerdo contigo, haremos lo que se tenga que hacer.-sentenció Sharotto seriamente-¿Están de acuerdo, niños?

Goten y Trunks asintieron con determinación.

Si Sharotto y Piccolo tenían dudas sobre el plan, su seriedad y su firmeza no lo demostraron. En ese momento y en esa habitación, eran los adultos más seguros sobre la situación.

-Para esto necesitaremos que ustedes nos den toda su energía, deben aprender y dominar la técnica de la fusión lo antes posible. Conllevará esfuerzo, pero confío en que lo lograrán-espetó Sharotto, con los brazos cruzados. A Videl le sorprendió la firmeza que podía adoptar de un momento a otro-Y cuando derroten a Majin Buu, los llevaré a ese parque de diversiones.

Un par de ojos brillosos miraron a Sharotto.

-¿Podremos subir a la montaña rusa?-preguntó Trunks. Tanto a Goten como a Trunks les fascinaba una montaña rusa a la que no podían subir sin un adulto.

-Podrán subir a la montaña rusa hasta vomitar, pero primero lo primero, deben entrenar.-respondió Sharotto. Esta colocó sus manos sobre las cabezas de los niños y les desordenó el cabello-Esta oscureciendo.

-Será mejor que duerman.-dijo Piccolo firmemente-Han entrenado lo suficiente por hoy, y necesitan tener toda su energía para continuar. Coman algo y vayan a la cama, porque mañana van a madrugar ¡así que ni se les ocurra estar de holgazanes!

- No cabe duda que ambos serán estrictos.-comentó Krillin, sonriendo levemente. Sharotto y Piccolo eran imponentes, era una de las cosas en común que ambos compartían. Krillin aún recordaba los nervios que podía causar Sharotto con su sola presencia. Hace siete años, esa era la principal característica que usaban para distinguirla. Aún sabiendo que no era una enemiga, no olvidaba el misterio que rodeaba a quien terminó siendo la mejor amiga de su esposa.

-E-es...

Kibito no concebía palabras para describir lo que presenciaban sus ojos, porque básicamente no podía verlo si quiera. La velocidad del saiyajin era impresionante; jamás había imaginado toparse con un mortal que pudiese obtener tal rapidez en sus movimientos. Al principio era difícil alcanzar a ver a Son Goku mientras este atacaba, pero a medida que el entrenamiento avanzaba, su velocidad decaía poco a poco. Aún así, le costaba trabajo verlo.

Y en cuanto a Yoshino, bueno, era otra historia. Yoshino era parte fundamental del legado que había dejado el gran Minato Sakakibara. Un semidios hijo de un desertor. Era evidente que sus poderes estarían fuera de los límites mortales. Que Yoshino fuera mounstrosamente poderoso, a pesar de su apariencia, no era sorpresa para ni para Kibito ni para Shin.

|La hermana menor de Goku 2|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora