41. La fusión rebelde, más rebelde.

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《Capítulo 41_"La fusión rebelde, más rebelde"》


[Narrador Omnisciente]

--¡Esto es delicioso!-exclamó Goten, mientras engullía múltiples pedazos de pan.

--¡Me estaba muriendo de hambre!-convino Trunks, que comía tan rápido como Goten.

Los demás miembros de la mesa comían tranquilamente, a excepción de Videl, todos estaban acostumbrados a la forma de comer de los saiyajins. Videl aún estaba en proceso; no comprendía del todo a aquella raza ni entendía como podían tener tan buen estómago. De cierta forma podía comprender que después de expulsar tanto poder, necesitarán recuperar energías. De pronto se pregunto si Sharotto y Kamusha no lo necesitaban también, después de todo, habían estado peleando buen rato.

--Oigan..¿ellos no van a comer?-preguntó Videl, recibiendo la atención de la gran mayoría-Me refiero a Sharotto y a ese hombre, Kamusha. Me parece extraño que no hayan probado bocado.

--Bueno, en eso tienes razón.-comentó Krillin-Es extraño que los saiyajins no tengan hambre, pero Sharotto siempre ha sido rara, y a lo mejor ese Kamusha también lo es.

--Son ilarianos, de cierta forma, se los entrenó toda una vida para que pudiesen subsistir sin mucho alimento en caso de guerras.-explicó Piccolo. Sharotto en muchas ocasiones le había explicado parte de su entrenamiento a Piccolo; cómo se criaba a los soldados y se les enseñaba a guardar energías. De cierta forma admiraba a esa doctrina ilariana, tan poderosa y firme que hacía que un saiyajin dejará el comer en un segundo plano-Si lo piensas bien, Sharotto ni si quiera ha dormido.

--Eso es cierto, ha estado alerta en todo momento, es admirable.-comentó Milk, que había estado tan preocupada por la saiyajin como por sus hijos y su esposo-Intenté convencerla de que descanse, pero no hizo caso. De todos modos fue mejor así, no sé que les hubiera hecho Majin Buu a ustedes dos si Sharotto no iba a buscarlos.

--La verdad es que tampoco nos hubiese gustado enterarnos, jeje.-Trunks sonrió débilmente con una gota de sudor en su frente.

La historia de Yoshino había causado múltiples reacciones una vez terminada. Afrodita no demostró gran interés, y continuó su charla con Shin con total normalidad. Kibito tampoco demostró gran sorpresa, pero se había quedado pensando en un par de cosas triviales respecto al tema. Shin, al igual que su ayudante, se encontraba pensativo; jamás había oído la historia de la boca de alguien tan cercano a los desertores como Yoshino, el hijo de uno de ellos. Goku continuaba su siesta con total tranquilidad. El Ancestro se mostraba más que concentrado en su baile, de todos modos, la historia ya la conocía al derecho y al revés.

Gohan, sin embargo, se había quedado pensando largo rato, sumergido en su propio mundo. Nunca pensó que una historia pudiese marcarlo tanto y hacerle pensar de aquella forma. Sé había quedado de pie y en silencio, repitiendo la historia en su cabeza una y otra vez. Dioses. Desertores. Ilaria. Universos.

Se había quedado tan sumergido en sus pensamientos que no volvió en sí hasta que escuchó la voz de Shin.

--El ritual está a punto de terminar.

Gohan parpadeó varias veces. El Ancestro dio unos cuantos pasos más a su alrededor y finalmente se detuvo. Sé sentó en el suelo com evidente cansancio.

--Ya puedes descansar, siéntate con toda confianza.-anunció el Ancestro.

Gohan se desperezó para aliviar la tensión de sus músculos y se sentó en el suelo frente a él.

|La hermana menor de Goku 2|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora