Por un partido de hockey 2

Cap 16

Al salir del instituto iríamos a la casa de Ross a que les contará a sus papás. Si se preguntan que si ya regresamos la respuesta es si, es como si no hubiera pasado nada ante los ojos de los demás pero para nosotros nos costó hacer aparte de una promesa también un juramento nada de secretos entre nosotros.

–Grace, estoy nervioso, mi papá se va a enojar demasiado. –Dijo mientras caminabámos a la entrada de su casa tomados de la mano.

–Es tu padre, te entenderá y terminará perdonandote.

–Pero, y si pasa lo mismo que la vez pasada cuando le dije que me expulsaron. Va a pensar que me la pasó ocultandole cosas.

–Tranquilo, solo...todo va a estar bien. –Abrió la puerta. El señor Lynch estaba sentado en el comedor haciendo algo relacionado con su empleo.

–Hola papá...–Dijo Ross con un poco de nerviosismo.

–Hola hijo, Grace que bueno que vienes.

–Hola señor Mark. –Respondí, sinceramente yo también me moría de nervios, el señor Lynch tenía un carácter muy pesado cuando se enojaba.

–Papá ¿Tienes un poco de tiempo para hablar?

–Es muy urgente lo que tienes que decir.

–Es importante, espero y no te enojes, es una explicación de un tema relacionado con mi expulsión del instituto. Te contaré la verdad de lo que pasó con aquellas chicas...

–Bien hijo te escucho...–Mark tomo asiento en uno de los sillones y luego nosotros dos en otro.

–Verás...–Ross contó toda la historia. Mark no decía ninguna palabra, solo lo escuchaba con atención.

–Veras Ross, se que lo que hiciste no estuvo nada bien, esos tipos espero jamás te echen de cabeza y tienes que saber que ya lo sabía. Te escuché cuando hablabas con Grace en el hospital...lo que me sorprende de ti es que no hayas encontrado la suficiente confianza en tu madre, en mi, o en tu hermana, somos tu familia y sabes que aunque nos enojemos siempre estaremos para ti. Pero lo correcto aquí es que lo hayas contado de todas maneras y no ocultarlo más.

–Gracias papá. –Ross se paró del sofá y abrazo a su padre.

–¿Se quedarán a comer?

–No lo sé ¿qué dices Grace?

–¿Como veas?

–Pues si. ¿Dónde está tu mamá?–Le pregunte a Ross.

–Stormie y Rydel fueron de compras, no han de tardar. –Menciono Mark.

–Entonces vamos a comprar algo para comer y volvemos.

–Esta bien. –Dijo Mark para que después Ross y yo saliéramos de la casa.

–Me sorprendió que mi papá no se enojara...– Ross soltó un suspiro de alivio, mientras conducía el auto.

–Te dije que todo estaría bien...

–Gracias amor, por estar para mí siempre.

–Siempre estaré para ti Lynch.

Compramos comida rápida luego volvimos a la casa de Ross, Rydel y la señora Stormie estaban poniendo la mesa, les ayude y luego comimos.

–Hey Grace, tengo que mostrarte algo... –Rydel tomo mi brazo cuando acabamos recoger la mesa.

–¿Que sucede? –La mire sorprendida.

–Vamos a mi habitación, Ross te la robo un momento.

–Ok, solo cuídala. –Dijo Ross mientras me guiñaba un ojo, yo solo sonreí.

Subimos por la habitación...

–¿Que tenías que mostrarme?

–Te compre un vestido.

–No te hubieras molestado.

–No te preocupes inmediatamente lo vi pensé en ti. Con ese cuerpo bien acomodado este vestido se te verá perfecto. Mi hermano quedará en la baba.

–No es para tanto. –Tome el vestido entre mis manos.

–¿Que te parece?

–Wow, es hermoso, gracias Rydel.

–No hay de que. –La abracé y luego bajamos.

Nos despedimos de la familia y luego Ross me llevo a casa.

–¿Y qué te iba a mostrar Rydel? –Pregunto Ross ansioso por saber mi respuesta.

–Algo, cosas de chicas.

–Vaya ¿que traes en ese bolso?

–Un regalo que me dio Rydel.

–Cariño estoy ansioso, quiero saber.

–El día de la graduación lo verás.

–Y de pensar que falta ya poco tiempo.

–Si.

–No quiero alejarme de ti Grace.

–Tranquilo Ross aún falta...

–Si pero...hemos llegado, ¿nos vemos mañana?

–Obviamente.Te amo...

–Te amo más Gracy.

Baje del auto y entre a mi casa.