Capítulo 28: Tranquilidad

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Narra Guren

No sé que está pensando Shinya, pero sé que es una tontería, es algo que no permitiré, aunque ahora mismo no puedo comprender que es lo que ocurre pero algo tengo muy claro, no quiero perderlo.

Pronto llegara el rey de los vampiros, la verdad no comprendo que es lo que quiere pero, debe ser algo importante para que venga hasta aquí.

--Amor, debemos irnos me acaban de avisar que el estúpido vampiro llego y no está solo- dijo Daphne.

No quiero verla.

Camine a donde se supone que tendría que estar Shinou, realmente llego rápido.

Entre y me quede sorprendido por lo que vi.

Él estaba junto a su rey, aquel chico que desde hace años mi corazón le pertenece.

--Solo quiero decir que no quiero en este momento una guerra solo quiero que mi familia sea feliz- dijo Shinou mirándome.

Siempre se ha preocupado por todos los vampiros, y entiendo lo que dice.

--Gracias, y perdóname por todo- dije y no pude más me acerque a mi amado, tenía los ojos rojos.

--Hola, yo quise venir, porque...Quería verte y también para decirte...- no pude dejar que siguiera, sé a dónde llegara si sigue, y no quiero escuchar de sus labios esas palabras.

--Por favor, perdóname, sé que no resolveré nada con esto, pero quiero que sepas que nada ni nadie impedirá que te ame como lo hago, y como dijiste, tal vez ya es tarde, pero no quiero dejarte- dije y lo bese, no me importo que o quien viera o dijeran.

Solo quiero tenerlo en mis brazos.

--Valla, si que eres un reverendo imbécil, después de todo, yo soy la persona que más te amo, y no permitiré que un estúpido vampiro se interponga en mis planes, tú serás mío- dijo Daphne mirándonos con odio.

--Déjalos tranquilos, si no quieres vértelas conmigo, si te atreves a tocarlos seras alfombra, ok- dijo tranquilo Shinou.

Ella salió furiosa del castillo, y agradeci en verdad no quiero volver a verla.

Es de lo peor.

Disculparme con los demás lleve a mi amado a mi habitación tenemos tanto que hablar, debe ver a nuestros hijos.

Entramos a la habitación, y esos dos pequeños estaban jugando y en cuanto me vieron se quedaron quietos.

Mi amado se acerco a ellos, y los abrazo, creo que ha sufrido mucho y todo es mi culpa.

Mis bebes se aferraron a él como si su vida dependiese de ello.

Ver aquella escena me enterneció, me acerque a ellos, y a los pocos minutos llegaron mis tres hijos mayores, quiero tenerlos siempre conmigo.


Narra Wolfram

Estoy de nuevo con mi familia no podía estar un segundo más sin ellos.

El crecimiento en los lobos es realmente rápido, y me duele no haber podido estar con mis hijos los primeros meses de su vida.

Al verme aquellos 2 niños salieron corriendo a mí.

Los abrace, no quiero soltarlos.

--Mis bebes, son tan hermosos- dije y ellos me abrazaron más fuerte.

--Mami ya no te iras de nuevo- dijo uno de mis bebes.

--No amor ya no... aunque pensándolo bien, no tuvimos tiempo de ponerles un nombre- dije y mire a Yuuri que nos mitraba tratando de no llorar.

Daga en el corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora