The End

Draft 12

4 de septiembre 2013

Fue inevitable no mirar hacia su muñeca, donde la pulsera resplandecía como el primer día. No había podido quitársela, a pesar del tiempo, a pesar del dolor. No pudo evitar pensar que ahora tendría cuatro dijes, si Jackson no se hubiese alejado... Se sintió como una idiota por pensar en él.

- Algún día tendrás que quitártela.

Markie miro hacia Yugyeom, ella tenía ese gesto; como si la juzgase, como si estuviese cansada. Y en algún punto tenía razón.

- Es muy bonita.

- Esa no es la razón por la que aún la llevas contigo.

Markie miro hacia otra dirección. No, no era la razón.

- Algún día.

- Tiene que ser pronto.

Markie asintió, era lo justo. Ahora tenía a alguien, estaba intentando seguir adelante y si quería que su relación funcionase debería dejar ir el pasado.

- Cambiando de tema, te ves espectacular.

- Solo lo dices porque tú me maquillaste y regalaste este vestido.-Markie señaló hacia la minúscula prenda de vestir.

- Te queda perfecto.

- Por poco y se me ven las bragas.

- Pues debiste dejarlas en casa.- Yugyeom le dio un trago a su bebida y luego continuo.- Como yo.

Markie no estaba escandalizada, casi dos años viviendo juntas habían sido suficientes para acostumbrarse a su descaro.

- No necesito llevar bragas cuando estoy con Bam.

- Iug, simplemente detente.- Markie casi vomita.

- ¿Qué? No es como si no supieses que él y yo...

Markie tapó sus oídos con ambas manos y empezó a tararear. Incluso con la música a todo volumen ella quería asegurarse a toda costa que su inocencia no fuese profanada.

- ¿De qué hablan?- Gracias a Dios, Bam y Shownu se acercaron a la mesa trayendo algunas bebidas.

- De lo mucho que te amo bebé.- Respondió Yugyeom cuando se reunió con Bam. Markie simuló arcadas. A veces la pareja se ponía muy pegajosa.

- También te amo nena.- Incluso aunque Bam lo susurró, Markie pudo oír su repuesta. Mirar el amor a través de sus ojos era increíble. Él había encontrado su hogar y Markie no podía estar más feliz y orgullosa.

- Ustedes son asquerosamente dulces.- Markie le dio un leve codazo en las costillas a Shownu por tamaña impertinencia.

- Déjalos.- Ella lo regañó. Aunque no fue necesario, ya que, ellos estaban tan perdidos en su mundo que ni siquiera lo escucharon.

- Son muy empalagosos.

Ella se encogió de hombros, estaba acostumbrada a sus muestras de afecto.

- ¿Bailamos?- Shownu tomó su mano y ella lo siguió a la pista de baile, la abrazó por la cintura, mientras Markie enredó sus brazos alrededor de su cuello. Como estaba usando tacones altos no fue necesario ponerse de puntitas para alcanzar esa posición. Shownu era alto, muy alto y extremadamente guapo.- ¿Te he dicho lo hermosa que te ves hoy?

Ella sonrió.- Precisamente estaba pensando en lo guapo que eres.

- Vaya, me siento honrrado.- Él la miró directamente a los ojos.- Feliz cumpleaños preciosa.

Shownu era muy dulce. Lo había conocido a través de Yugyeom, ellos eran primos. Ambos provenían de familias acaudaladas y con núcleos familiares funcionales. Cuando Bam y Markie habían sido invitados a una cena navideña en casa del abuelo de Yugyeom el año pasado, ellos habían quedado impresionados, no sólo por la opulencia en la que vivía el patriarca de la familia sino por cuan amables y cariñosos habían sido los tratos entre los miembros de la familia. Aquello fue una novedad. Markie y Bam habían conocido solo un hogar después de vivir en las calles, JB y su familia, pero ni siquiera ellos eran tan perfectos y estables. Luego de ese encuentro las invitaciones siguieron llegando, prácticamente fueron adoptados y bien recibidos por la familia Kim. Fue en uno se los tantos almuerzos familiares en los cuales ella había conocido a Shownu.