The End

Draft 15

Febrero 2016

Había pasado más de una semana desde su reencuentro. Aquello se sentía irreal, a veces cuando hablaban; ella no podía evitar mirarlo, habían tantas cosas en él que le parecían tan distintas: sus rasgos habían endurecido, su rostro y figura eran más estilizados, sus gestos y maneras eran más sofisticados. Jackson era diferente y eso la asustaba, siempre existiría la posibilidad de que él decidiese que ella no era suficiente.

Jackson y ella retomaron las cosas no en las condiciones en las que su relación terminó sino como el inicio; ambos entendían que debían ser amigos nuevamente antes de que algo mas sucediera. Fue un acuerdo tácito, ellos estaban tomando las cosas con calma. Markie ni siquiera le había contado nada de esto a Bam o Yugyeom, peor aún JB. Ella odiaba guardar secretos, sin embargo, mientras no tuviese alguna certeza mantendría esto para ella misma.

Jackson iba a su departamento a diario, ayudaba con las reparaciones y adecuaciones de su nuevo hogar, hablaban de asuntos del trabajo, ella le contó las novedades en la vida del Yugbam pero los temas pesados seguían sin mencionarse. Eso era algo que no había cambiado, ella nunca sabía en que situación se encontraba con Jackson.

- ¿Por qué necesitas dos repisas?-. Jackson la sacó de sus pensamientos, él se encontraba armando los estantes donde descansarían sus preciadas posesiones.

- Tengo muchos libros.

- ¿Has oído hablar de los libros digitales?

- Lávate la boca, pequeño blasfemo-. Ella cruzó sus dedos y luego se persignó.

- ¿Acabas de llamarme blasfemo después de persignarte?-. Ella asintió-. Wow, eso sí es una blasfemia.

- Sabelotodo.

- Lo que digas-. Él leyó una vez más las instrucciones antes de ponerse manos a la obra-. Muchos arboles fueron sacrificados para esto-. Él señalo hacia los tres cartones que estaban repletos de libros.

- Bueno gracias-. Ella se sentó en el sofá, levantó las piernas y las cruzó bajo ella-. Has convertido la lectura en un gusto culposo.

- De nada-. Él estaba de espaldas a ella y seguís trabajando sin perder la concentración.

- ¿Desde cuándo te volviste experto con las herramientas?

- Hice algunos proyectos en mi casa, me ayudaron a mantener mi mente ocupada-. Él siguió tratando de encajar algunas piezas-. Por cierto puedo sentir tu mirada quemando mi trasero.

Ella rio-. No puedo evitarlo está justo frente a mí y es muy bonito.

- Me siento como un pedazo de carne.

- Un pedazo de carne bonito-. Ella se levantó y se dirigió hacia la cocina-. ¿Deberíamos ordenar comida otra vez? O podría cocinar algo

- O podríamos ir a cenar afuera.- Cuando Jackson no obtuvo respuesta, dejó lo que estaba haciendo de lado miro en dirección a Markie, ella estaba pensativa-. ¿Qué pasa?

- No hemos salido a cenar en años.

- Lo sé.

- Jackson, incluso cuando nosotros... bueno ya sabes; nunca fuimos a cenar afuera.

- Lo siento-. El se acercó a ella y tomo sus manos entre las suyas-. Esta es mi oportunidad para hacer las cosas bien y cortejarte como es debido.

- ¿Cortejarme?-. Ella sonrió, aquello sonó como algo que dirían los abuelos a principio de siglo.

- Cortejarte-. Él besó el dorso de su mano-. ¿Qué dices, me harías el honor de acompañarme a cenar?

- Será todo un honor-. Pero luego las dudas invadieron su cabeza-. ¿Y si alguien nos ve?