Two faces |EDITANDO|

Capítulo 12: Machistas

Sam:

- Sam, ya nos vamos – dijo Colton.

- Este bien, chico – dije.

Colton y Sean se fueron. Blake estaba sentado en el sillón con Lucas, mi papa ya se había ido a dormir. Mire el reloj de la pared. Eran las 23:34. Me fui a sentar en el sillón de vuelta.

- Blake, es muy tarde, si quieres quédate – dije con poco interés.

- ¿No va a haber problema con tu papá?- preguntó.

- Antes de tener problemas con Nik por tocarla, los vas a tener con ella. Yo preferiría a Nik en esos caso – dijo riéndose. Tenía razón. Me reí.

- Como quieras – dije y me recosté sobre el respaldo.

- Esta bien – hizo una pausa - ¿Dónde voy a dormir?

- En mi cuarto.

Él abrió los ojos como platos. Lucas y yo nos reímos. Debió haber pensado mal.

- El día que entres a mi cama, yo seguramente este 99,9% consciente de lo que hago – dije aún riéndome. Blake levantó una ceja.

Blake:

Esta familia, mejor dicho, esta chica, esconde muchas sorpresas. Pero lo último que dijo me dejo pensando.

- Lu, nos venís a buscar mañana a la mañana – afirmo.

- Pero vos… - no termino la frase porque Sam lo miro de una forma asesina. – Bueno, me voy, nos vemos mañana.

- Chau, rubio – dijo Sam y él rió.

Cuando Lucas se fue, subimos de vuelta a su cuarto. Preparo un colchón en el piso y me dio una remera, que parecía de Lucas o de su padre, y unos pantalones. Yo no dormía con remera, y hoy no iba a ser la excepción. Ella entro en el cuarto, que parecía su armario y cerró la puerta detrás de ella. Yo me puse el pantalón, pero no la remera. La puerta se volvió a abrir y apareció ella con una remera que dejaba su estomago a la vista, unos shorts y un buzo negro con cierre. No tenía mal cuerpo.

Ella me miro de pies a cabeza. No se sonrojo, ni se puso nerviosa. Cuando nos acostamos, una pregunta volvió a mi mente y no pude evitar preguntar.

- ¿Eres virgen? – pregunté. Aunque no la pudiese ver, sabía que sonreía. – Olvídalo, es obvio que  lo eres.

- No lo soy – dijo acompañado de una leve risa.

- ¿Fue con Lucas? – eso pareció causarle mucha gracia y espanto a la vez.

- Nunca en la vida me acostaría con él – dijo ella cuando paro de reír. – Fue con Colton.

Eso sí que no me lo esperaba. Pero por alguna razón, la idea de que hubiese estado con él, no me gustaba. Me molestaba.

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La alarma sono. Pero no era un ruido agradable. Era una canción de una banda que no conocía. Era rock pesado. Eso a las siete y media de la mañana puede matar a cualquiera. Me incorpore en la cama, y vi que Sam seguía durmiendo. Apague la alarma de su celular.

Volví mi vista a ella. Un poco de su buzo estaba bajo, y pude notar algo como un dibujo, pero…

- Es de pervertidos ver a la gente mientras duerme – dijo ella y se subió el buzo, como si supiese que estaba viendo ahí.

- No soy un pervertido – dije.

- Te juntas con Trent Harris, por lo tanto eres un pervertido – dijo ella riendo. Se levanto de la cama. – Bajemos a desayunar.

Bajamos y el padre de ella estaba en la cocina, sin camisa, como yo. Cuando me vio, no puso cara de sorpresa ni de preocupación, solo siguió viendo el periódico. En ese momento, Greta entra a la cocina. Le dio a Sam una taza con café y unas tostadas.

- ¿Qué quieres, Blake?- me pregunto.

- Un café sin azúcar y unas tostadas están bien – dije.

- Copiar a la gente no está bien, Johnson – dijo Sam; cuando terminamos de desayunar, sonó una bocina afuera.

- Apúrate rubia, llegaremos tarde – grito Lucas.

Ella agarro su mochila y yo la mía. Salimos y Lucas estaba afuera con un deportivo marrón oscuro. Yo me subí en el asiento del copiloto y Sam atrás.

- Son unos machistas – dijo ella.

Lucas se rio de su comentario y arrancó el auto. Faltaban aproximadamente siete cuadras para que llegáramos, y paramos en un semáforo. Cuando volvemos a arrancar Sam habla:

- Déjame en la esquina.

- No – respondió Lucas riendo.

- Para o me tiro – dijo ella. Lucas no paro y ella se paro y salto. ¿¡Salto!?

Estaba bien, no le había pasado nada. Estaba saludándonos mientras mostraba una sonrisa de oreja a oreja.

- ¿Por qué salto? – pregunte.

- No va a llegar con nosotros – dijo Lucas riendo, como si la situación fuera la más normal del mundo.

- ¿¡Porque!?

- Nunca va a llegar al colegio con un hombre, ella dice que es como darnos la victoria – explico.

- ¿Victoria de qué?

- Cuando te sentaste en el asiento del copiloto, ella dijo “son unos machistas” – yo asentí. – bueno, ella es feminista. Nunca va a dejar que un hombre haga algo que ella puede hacer.

- Esta loca – dije.

- Coincido con vos – ambos nos reímos. – Llegamos. 

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Perdón por no publicar! 

Un Kiss, SamNovels