Unlikely [04]

16

Las clases de Oclumancia, eran pesadas, pero según Snape estaba mejorando, creo que "mejoraba" porque no quería olvidar nuevamente, no quería que se diera cuenta que recordaba, no todo, pero ya recordaba más cosas.

Empecé a salir más seguido con Logan, el ED, iba mucho mejor Harry estábamos practicando el encantamiento patronus, pero aún no podía definir una forma siempre que lo hacía solamente salía una nube blanca, en cambio de los demás tenían formas.

Cuando estábamos en plena practica Dobby apareció y nos alertó, todos empezamos a salir en grupos, Umbridge nos había descubierto junto a su boba Brigada inquisitorial, todos salíamos como podíamos, algunas chicas se iban al baño otros a la biblioteca, los gemelos, Ginny y yo tratamos de llegar a la torre.

—Necesitamos algo que los distraiga – susurre

Todos me miraron, la sonrisa de los gemelos se ensanchaba.

—¿En serio? – pregunte

—Malfoy está viniendo detrás de nosotros – dijo Ginny sonriendo

Sus voces se hacían más cercanas, era la idea más estúpida que puede haber, pero...

—Un favor cada uno – dije entre dientes – aunque no creo conseguir mucho tiempo

Camine de regreso, acelere el paso para detenerlo antes de que doblara, aunque no creo que funcionaria ya que, con Malfoy no estábamos en buenos términos ni nada. Gire el pasillo y casi me choco con Goyle.

—Atrape a una – dijo Goyle sujetándome por el brazo

—Suéltame – dije forcejeando – suéltame

—¿Dónde están los demás? – pregunto Malfoy mirándome

—¿Qué? – pregunte, Goyle seguía sujetándome – dile a tu amigo que me suelte

Malfoy le hizo una seña a Goyle y este me soltó.

—¿Dónde están los demás? – pregunto Malfoy acercándose

—No sé de qué hablas – dije mirándolo fijamente

—Déjame adivinar, tú te ofreciste para entretenerme – dijo Malfoy

—En serio Malfoy no sé de qué hablas – dije mirándolo – yo estaba yendo al baño y ustedes se atravesaron en mi camino, así que permiso tengo que continuar

Pase por su lado, Malfoy me sujeto del brazo.

—No creas que voy a caer en eso – dijo Malfoy – vayan tras los demás – ordeno a Crabbe y Goyle

Voltee y mire hacia donde me tenía agarrada, Malfoy me soltó.

—¿Cuántos puntos crees que me bajen si ataco a alguien de la Brigada Inquisitorial? – pregunte viendo su insignia de esta

—No eres tonta – respondió Malfoy

El silencio reino, ambos estábamos mirándonos fijamente.

—Tú sabes realmente lo que está pasando – dije mirándolo – entonces ¿Por qué lo haces?

Malfoy miro hacia un lado.

—Pansy fue a revisar los baños de las mujeres – dijo dándose la vuelta

Espere unos minutos, y empecé a recorrer el mismo camino que Malfoy, esperando que los demás hayan logrado escapar, aunque no haya servido de mucho ya que lo que nos contó Harry, Umbridge tenía la lista con integrantes de la ED y esa misma noche el director "huyo".

La mañana siguiente Umbridge tomo el puesto de directora de Hogwarts, y con ello nos dio nuestra sentencia, todos los del ED, tuvimos que escribir con plumas encantadas, mis manos se llenaban de cortes cada vez que escribía en el papel.

Una tarde mientras deambulábamos por el puente cubierto, escuchando a Harry y su idea de que él debía continuar solo, Hagrid nos llamó, todo parecía tan misterioso y en cierto punto daba miedo, ya que fuimos al bosque prohibido; ahí conocimos al medio hermano de Hagrid, era un gigante, Hagrid nos pidió que cuidáramos de él, ya que con Umbridge en el cargo, Hagrid no tardaría mucho en ser despedido.

El colegio se estaba convirtiendo más en una versión de Azkaban, Umbridge y sus tontas reglas era insoportable, lo que me alegro un poco fue saber que Umbridge no podía entrar al despacho de Dumbledore, pero fue aún mejor cuando los gemelos soltaron fuegos artificiales encantados; ver a dragones de varios colores y girándulas que parecían querer atacar a Umbridge, era el mejor espectáculo de todos; los fuegos artificiales duraron por casi una semana entera y Umbridge solo corría de un lado al otro tratando de deshacerse de estos.

Una tarde después de la clase de oclumancia, Malfoy interrumpió diciendo que habían encontrado a Montague, hace una semana los gemelos habían metido su cabeza en el armario evanescente, y ahora había aparecido nuevamente; Snape nos dijo que podíamos irnos y salió seguido por Malfoy.

Entonces la pensadora que estaba ahí empezó a emitir un leve brillo, Harry empezó a acercarse a esta.

—Harry no creo que debamos hacer eso – susurre jalándolo – Snape puede volver en cualquier momento

—Tu deberías ser la que me incite, no la que me detenga – dijo Harry sonriendo

—Pero... eso es algo privado – dije mirando el pensadero

—Solo esta vez – suplico Harry

Tenía curiosidad no lo voy a negar, pero hacer eso... miraba el pensadero, imágenes borrosas se empezaban a formar, eso solo aumentaba mi curiosidad y termine cediendo a ella.

Dentro de sus recuerdos podía ver al papá de Harry, James, a Sirius, Remus y Pettigrew, y a Snape, al principio estaba maravillada, luego...

—¡Vámonos! – grité cuando vi lo que le hacían a Snape

No quería no podía verlo, y quedarme ahí, quería defenderlo, pero era inútil, aquello era un recuerdo

—¡Ha...!

—¡Déjenlo en paz! – el grito provino de mi lado

Una pelirroja empezó a defender a Snape, ella se paró muy cerca mío, yo era un poco más alta, la observaba, sentía la necesidad de solo mirarla, entonces mis ojos se empezaron a llenar de lágrimas y no sabía el motivo, pero aquel recuerdo no termino muy bien, ya que mientras veía aquella escena sentí que alguien me jalo fuertemente. Era Snape.

Nos molestó, pero nos dejó ir cancelando nuestras clases de oclumancia, durante el camino de vuelta no hablamos con Harry.

—Ya sé que Snape nos lo advirtió – dije deteniéndome – pero... quiero asegurarme, no vamos a decirle a nadie, ni a Ron, ni a Herms, ¿está bien?

—Pensé lo que Snape decía sobre mi padre eran exageraciones, pero... tú lo viste Elle... ellos...

—Harry – dije mirándolo – no sé qué decirte, pero creo que no podemos hacer nada... aquello era un recuerdo

—Lo sé – dijo Harry triste

Aquello era difícil de digerir, pero ambos tratamos de olvidarlo o al menos concentrarnos en otras cosas; al menos eso creí.