Phantom Stardust | ShuAnn

[Cap 3] El despertar de Joker

— 4/11/17 - Lunes —

Lluvia.

—Oh, por favor... —habló entre dientes, irritado. —Tienes que estar bromeando...

Solamente bastó una cosa para arruinar su Lunes, un día que de por si ya era horrible. Aunque, después de ser exiliado a Tokyo, cada día tenía sabor a Lunes. No había podido dormir ni un poco, gracias a que su mente seguía dándole vueltas en ansiedad a lo que le depararía su futuro. Toda la noche había hecho un itinerario para todo el año; además de trabajar en uno o dos trabajos a medio tiempo, estaría concentrado solamente en la escuela. Nada de amigos, ni actividades extraescolares. Sólo escuela y nada más. Si pudiera combatir aquella tormenta, es posible que rescatase algo de su antigua vida. Al menos eso es lo que se dijo a sí mismo.

Solo tomaría un pequeño desliz para que acabara en la calle, eso es lo que le dijo el vejestorio. Y era algo que no tenía intención alguna de que sucediera, ya que no tenía ni idea de cuanta gente estaría dispuesta a contratar a un adolescente sin hogar, especialmente con un antecedente criminal. Sojiro no se veía como el tipo de persona que hiciera promesas vacías; entre la correccional juvenil y la calle, Ren no estaba seguro de cuál era la peor. Al menos en el centro de detención le pudieron alimentar. Pero al costo de acabar como un paria social...

Ren suspiró y trato de encapsular sus preocupaciones fuera de su mente. Era un terrible día para no poseer un paraguas. La lluvia parecía ser relativamente ligera, pero se veía como si fuera a tomarse su tiempo. Como si tratara de desafiar al chico. Pero tenía tiempo, saliendo antes de lo usual para reconocer la ruta hacia la escuela. Además, su puntualidad sería un bonus para la opinión de Sojiro. Aunque no se veía como que lo pudiera convencer del todo. El desdén del viejo dueño de una cafetería no debería afectarle tanto a Ren. Toda su vida, siempre quiso agradarle a la gente; gustarle a la gente y viceversa. Tenía un carisma natural y era bastante popular en su escuela. Pero no a la gente que se supone debería, como sus padres. ¿Pero eso que debería de importarle en esos momentos? Su prioridad era él y nadie más.

Sólo voy a mantener el perfil bajo, boca cerrada, y haré lo que tengo que hacer, pensó para si mismo. Ren no cometería el mismo error otra vez. Esta vez, si algo llegara a ocurrir, no sería de su incumbencia. Quizás Shujin no sea tan malo... No tenían equipo de natación, pero no es como si le quisieran admitir de todos modos. Pero este era un nuevo inicio. Quizá podría sentir un poco de normalidad otra vez.

—¡Esto apesta! Incluso me fui temprano hoy...

Los ojos de Ren se fijaron en dos chicas trotando a través de la lluvia, ambas equipadas con paraguas. Había un chico tomando la parte de abajo, quien no era tan afortunado. Su saco era lo único lo que le cubría la cabeza. Algo es algo.

Pobre bastardo, pensó Ren para sí mismo con una pequeña mueca. Sintió un pequeño escalofrío por el frío. Normalmente, le gustaba la lluvia. Para muchos, la lluvia sería algo melancólico, pero el la encontraba terapéutica. Durante los últimos meses, no encontraba absolutamente nada que le pudiera poner de buen humor. La lluvia estaba bien. Aunque esar atrapado en medio de esta, no estaba tan bien.

Los adolescentes que corrían cerca de él, dejándolo ahí, portaban su mismo uniforme. Un saco negro con un pantalón que combinaba con un patrón a cuadros de color rojo, además de un suéter con un cuello bastante largo. Academia Shujin. No es como si le importara que lo reconocieran o no. No tenía planes de hacer amiguitos, o conocidos siquiera. Desaparecería de sus vidas después de un año, después de todo.