La indicada.

Capítulo 6

Despertó desorbitada, la cabeza le daba vueltas. Abrió los ojos y vio a Ginny sentada a su lado. Ella estaba concentrada leyendo unos papeles, ni siquiera se percató que Hermione había despertado.

-¿Ginny?-murmuró ella.

Ginny dejó sus papeles sobre la cama y se inclinó hacia su amiga para tomar su mano.

-¿Cómo estás? ¿Cómo te sientes?-le preguntó ella algo preocupada.

-Estoy bien. ¿Qué sucedió?

-¿No lo recuerdas?

Ella negó con la cabeza.

-Te desmayaste, Malfoy te trajo aquí-contestó Ginny acercando su asiento para estar más cómoda cerca de ella.

-¿Lo viste? ¿él está bien?-preguntó levantándose de golpe.

-Sí él está bien. Sólo tuvo algunos raspones.

Hermione volvió a respirar más tranquilamente y volvió a recostarse de nuevo.

-¿Qué hacías ahí?-preguntó la pelirroja mirándola fijamente.

-Sólo me preocupé.

-¿Por Harry?

-Claro, por Harry...

-Ah, bueno.

-Sí, ¿él está bien?-preguntó Hermione.

-Claro él está en Francia con Pansy de Luna de miel. ¿Me quieres ver la cara, Hermione?-le preguntó Ginny cruzandose de brazos.

-¿De que o qué?

-No te hagas. ¿desde cuando tan preocupada por Draco? ¿Qué sucedió aquella noche que él te llevó a tú casa?

-No ha sucedido nada, Ginny. ¿Por qué tendría que suceder algo?

-No lo sé. Dímelo tú.

-No pasó nada. ¿Qué ha dicho el médico?-preguntó Hermione sentándose en el borde de la cama.

-Dijo que pasaría en media hora. Y ya más de una hora-dijo Ginny mirando su reloj pulsera.

-¿Para qué? Ya me siento mejor, Ginny.

-Me dijo que te hicieron unos estudios.

_¿Para qué? Solo fue un desmayo, nada más.

La puerta de la habitación se abrió dejando ver a una doctora de bata blanca con una carpeta en sus manos.

Señora Ministra-hablo ella tendiendo su mano. Soy la doctora Salomón.

-Digame, Hermione o Granger, por favor.

-Bien, señorita Granger-dijo la doctora. Te hicimos unos estudios, pero todo dio bien. Tus valores están normales al igual que tu azúcar en sangre, pero tienes una pequeña anemia, pero nada que pueda afectar al bebé-decía la doctora al bajar la carpeta de su vista.

Ginny abrió los ojos de golpe y escupió el agua que estaba tomando.

-¿Qué? No debe haber algún error. Yo no puedo estar embarazada. Yo no puedo tener hijos.

-Pues... hicimos una prueba de embarazo y cuenta con un mes y dos semanas de embarazo Señorita Granger-reafirmo la doctora.

-Es que debe haber algún error, Hermione no puede tener hijos-dijo Ginny una vez salida del asombro.

-Pues es evidente que sí puede. De hecho haremos un encantamiento para saber. Necesito que levanté su bata.

_Pero-dijo Hermione mirando a la doctora y a Ginny.