La puerta se azotó de golpe y una maldición se escuchó desde la cocina. Era una indicación de que Draco había vuelto a casa.
-Creo que la señorita Granger, otra vez hizo enojar a papá-hablo Scorpius a su abuela.
-Así parece-le contestó Narcissa mientras mecía a su pequeño nieto Regulus.
-¡Está loca!-gritó Draco entrando a la cocina.
Tres par de ojos lo quedaron observado detenidamente. Hasta que su pequeño hijo soltó una risita.
-¿Qué hacen aún despierto?-preguntó Draco. ¿No deberían estar durmiendo?
-En eso estaba, cariño. Pero entraste como un psicópata y echaste por la borda todo mi trabajo con estos pequeño-señalo Narcissa al bebé.
-¿Y cuál es tu escusa?-volvió a preguntar Draco a su hijo mayor.
-Aposte a la abuela que llegarías cabreado, y no quería perderme al ver tu cara le contesto-descaradamente su hijo.
-Oh, pero que bien. Disfrutan mi sufrimiento. Que divina familia.
Scorpius levantó los hombros sin importancia.
-Bien. Venga a la cama-dijo Draco tomando a su hijo pequeño y Scorpius de una mano.
Narcissa se aliso el vestido y tomó su varita.
-Quíeta ahí, madre. Ahora vuelvo.
Ella asintió con la cabeza y volvió a tomar asiento.
Draco camino por el departamento hacia la habitación. Scorpius fue el primero en entrar y acomodar la cuna de su hermano sacando los juguetes y acomodando sus sábanas. Su padre lo recosto en la cuna y lo cubrió.
Eres el vivo retrató de Astoria-dijo Draco cubriendo a su hijo. Su cabello castaño y los ojos verdes, ¿cómo iba a olvidarse de su esposa? Si la veía todos los días en su pequeño hijo. Tomó su varita del bolsillo y hechizo la caja musical que comenzó a sonar.
-Él es igual a mamá-hablo su hijo de espaldas. Yo también puedo verla en él.
-Lo sé. Eso quiere decir que tu madre nunca nos dejó-contestó Draco acercándose a su hijo para taparlo.
-Perdón por cargarte la mano, Scorpius. Sólo tienes ocho años y te has hecho cargo de tu hermano.
-Me gusta cuidar de él-contestó su hijo mirando la cuna de su hermano. Así no me siento sólo.
-¿Te sientes sólo?
-Pero no es tu culpa papá. Tengo un cerebro privilegiado, que los niños de mi edad no entienden. Soy muy inteligente.
-Eres el niño más inteligente que conozco.
-Y cuando entre a Hogwarts. Voy a ser el mejor alumno y superar a la señorita Granger.
-¿Aún sigues con eso?-preguntó Draco.
-Sí. Yo seré el mejor mago de mi generación y superare a aquella bruja. Ya lo verás.
-Se que mo harás-dijo su padre.
-¿Qué te hizo ella está vez?-preguntó Scorpius.
-Luego te lo cuento-hablo Draco quitándole sus lentes y dejándolos sobre la mesa. Ahora descansa-dijo levantándose y apagando la luz.
-¿Papá?
-¿Sí?
-Te quiero.
-Yo también ahora descansa.
ESTÁS LEYENDO
La indicada.
FantasyDesde que tengo uso de razón yo Scorpius Hyperion Malfoy me la he pasado escuchado a a papá decir, Granger estoy, Granger aquello, o Granger me ha dicho esto.