Un sortilegio es una atracción misteriosa e irresistible que producen sobre alguien los encantos de una persona.
Algunos lo llaman magia, otros embrujo o destino, cada quien lo llama por diferentes nombres.
Kim Taehyung y Jeon Jungkook habian enlaz...
Capítulo con contenido explícito, sino es de su agrado favor de esperar al siguiente
Sintiendo las mismas caricias en sus mejillas, frente y nariz; aqurllas que tanto extrañó, Taehyung despertó demasiado animado. Dejó un inosente beso en la frente de su adorado Kook.
ㅡExtrañe mucho eso, Kook
ㅡYo también, mi vida. ¿Desayunamos ?
Tae se levantó con cuidado y Jungkook lo ayudó a ponerse los zapatos, pues ya no lograba ver sus pies. Desayunaron algo delicioso que les llevaron y disfrutaron cada platillo.
ㅡQuiero verte Tae, vamos a la cama y quitate esa hermosa pijamaㅡ Jungkook habló después de que terminaron de comer y lo invitó de regreso a descansar un rato.
ㅡMe da pena Kookieㅡ Tae se alejó un poco, permitiendo que Jungkook pudiera observarlo con claridad; lleva un short de seda que no dejaba nada a la imaginación, de lo corto que era; sus largas y definidas piernas estaban a la vista, quitandole el aliento a cualquiera. La delgada camiseta que traía puesta permitía ver sus claviculas, dejando al descubierto un poco de su adorable pancita. El cabello estaba revuelto y sus ojitos tenian un brillo especial, simplemente etéreo.
ㅡEres perfecto, mi vida, te amo mas que a nada, sigues siento tan tierno y al mismo tiempo tan sexy. Eres el mismísimo pecado y quiero que me lleves contigo, sin importar nada.
Jungkook lo besó con delicadeza, aumentando la intensidad con cada paso que daban hacia la cama. Taehyung quitó la camisa de jungkook y besó con necesidad, cada parte de la piel que los botones dejaban ver, siento detenido por Jungkook.
ㅡNo hagas eso, es peligroso Tae, no haras que me detenga y eso no es bueno. Prometo que solo voy a acariciarte.
Él quitó la camiseta de Taehyung y sus labios recorren cada lugar que ven, grabando de nuevo la hermosa figura de su esposo. Tae no se quedó atrás, sacó la camisa y pantalones de Jungkook con rapidez, queriendo sentirlo, amaban estar sin ropa alguna que molestara o tapara al otro, era increíble convivir sin miedos ni pudor entre ellos, se aman y cosas asi de insignificantes no deberian separarlos.
Una vez desnudos, los besos y caricias no terminaron, todo lo contrario, besaron, marcaron y mordieron todo lo que se pudo al contrario, sin ser demasiado bruscos, sólo lo necesario para llevar al otro a la locura. Acriciaron la zona íntima contraria, para dar alivio e inmenso placer, recordando con anhelo el poder estar unidos en uno solo.
ㅡTe amo, Jungkook... no lo olvides, cielo
ㅡTambién te amo, mi vida.
Los suspiros llenos de necesidad no tardaron en llegar, decir el nombre del otro mientras llegaban al climax no fue dificil, necesitaban con locura sentir plenamente al otro y asegurarse de que no fuera solo un sueño, uno realemnte muy placentero.
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