Un sortilegio es una atracción misteriosa e irresistible que producen sobre alguien los encantos de una persona.
Algunos lo llaman magia, otros embrujo o destino, cada quien lo llama por diferentes nombres.
Kim Taehyung y Jeon Jungkook habian enlaz...
A los tres meses de la desaparición de Jungkook y Yoongi, las autoridades pensaron en darlos por muertos, sus busquedas habian durado mas tiempo de lo esperado y creían que había pocas posobilidades de vivir.
Taehyung y Hyuna fueron informados de que la busqueda se reduciria y tendrian pocas semanas antes de cancelarla definitivamente.
HyunJun pasaba por la casa grande, burlándose del dolor ajeno, estaba feliz de no haber tenido nada que ver en eso y aún asi, salir ganando. Taehyung se le acercó con rabia y dolor inundando sus ojos.
ㅡTú ¡Maldito infeliz! Si tienes que ver en la desaparición de Jungkook, juro que hare hasta lo imposible para que te pudras en una cárcel. Tengo el dinero suficiente para encerrarte de por vida.
ㅡ Aparte de ser un opurtunista, ¡estas loco!. Yo no tuve nada que ver, pero me alegra mucho que sufras.
ㅡSé que fuiste a buscar a Lee Chung, el juez que nos casó, no dudo que tú lo hayas matado y de paso quisieras matar a Jungkook. Pero no me quedaré con los brazos cruzados, ¡vas a pagar por eso!
Hyuna que escuchaba tras la puerta principal de la casa, comprendia el inmeso dolor de Taehyung y sabia que las palabras de éste no eran mentira, pues habia escuchado las conversaciones por la exención del teléfono, su hijo era un monstruo y ya era momento de que pagar por su desfachatez.
***
La prensa de todo Amired, fue informada de la tragedia del joven Jungkook y la familia Jeon decidió dar una misa en honor a Jungkook y Yoongi.
Todos pensaban que ya habian muerto, pues tres meses y medio, perdidos en una isla no dejaba posibilidad alguna de sobrevivir, o eso era lo que pensaba la mayoria. Excepto Taehyung, él no podia perder la esperanza, quería con todas sus fuerzas que Jungkook conociera a su hijo.
Mina y su padre habian regresado a la residencia Jeon para hacerle compañia y cuidarlo un poco.
ㅡCreo que es momento de resignarse Tae, debes aceptar que murieron, será mas fácil para ti y para el bebé. Mi sobrinito no merece que sufras tanto, él tambien lo siente.
ㅡ¡Es que no puedo! Mina, no quiero pensar que esta muerto, yo no puedo con eso. Lo amo tanto, que me duele como no tienes idea el no tenerlo aquí, conmigo. Lo necesito, frijolito y yo lo necesitamos.
Mina lo abrazo comprensiva, sentía el dolor de su hermano y sus palabras no buscaban lastimarlo, todo lo contrario, queria darle un poco de consuelo, pues pensaba que creyéndolo muerto, sufriría menos.
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