Capítulo 80: Scarlett Evergreen, una princesa

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Capítulo 80: Scarlett Evergreen, una princesa.

Cuatro años antes.

Estaba mirándome al espejo, y la que me devolvía la mirada era una chica menuda en medio de su adolescencia con ojos chispeantes y un cabello rojizo alborotado. Esa noche debía estar lista para la fiesta de Marnie Reese, y cada minuto que pasaba me aseguradaba de que era una mala idea.

Algo en mi interior se negaba, y tenía esa extraña sensación de que algo iba a salir mal, como suele ocurrir a veces. Mi mente divagó por unos segundos y me encontré pensando en Summer, la silenciosa rubia que tenía pintura en toda su ropa y había tenído un ataque de pánico en medio de un intento de abuso de Marnie.

—¿Ya estás lista? —me preguntó Chanel.

—¿De verdad tenemos que ir? —repliqué en tono de queja, y ella se colocó atrás mío y alborotó un poco mi cabello.

—Si, Scar. Si te sientes incómoda, podemos volver, pero dales una oportunidad.

Antes de que dijera algo, Molly Bethany pasó detrás de nosotras con todos los ruleros en su cabeza hacia al baño, lo que me causó muchísima gracia.

—Bien. —refunfuñé, y Chanel me apretó en un rápido abrazo antes de comenzar a trenzar mi cabello sin que yo se lo pidiera.

—Me habló mi madre. Me preguntó por ti, parece que le agradaste —rió ella, poniendo cara de espanto—. Dejame decirte que eso no sucede muy seguido. Ella realmente odió a Molly.

—Ella es... es... —pensé, pero no pude decir nada positivo. Ya conocen el dicho, si no puedes decir nada bueno, entonces no digas nada en absoluto— ¡tu padre! Él me agrada.

—También a mí. Más que mamá, en ocasiones. Sé que no debería decirlo, pero es que ella a veces...

Asentí con la cabeza. En mi caso particular, ocurría algo similar pero muy diferente. Mamá había cambiado mucho desde que ocurrió lo de Samuel: la depresión había sido más fuerte que ella y, junto a mi padre, hacíamos lo que podíamos para ayudarla. Aún así, la sensación de tristeza que me invadía cada vez que la veía era inevitable.

—¡Cha-cha, prestame tu rimel! —gritó Molly desde el baño.

Chanel me hizo una mueca y ató la trenza con una liga antes de dirigirse al baño con la otra rubia. Me miré al espejo una vez más y traté de sacudir la sensación de malestar en mi estómago de una vez por todas.

—Oí que invitaron a Rogers y a su novia.

—¿Quién es su novia? —pregunté con un poco de tristeza. La verdad es que, tan pronto como vi a Nick Rogers, tuve el más profundo flechazo de mi vida.

El chico era tan atractivo que no parecía real y, para mi vergüenza, mi cabeza repetió una vez más el incidente de la clase de Química.

Ocurrió a principio de año, cuando ni siquiera era parte de las porristas y no había socializado con nadie, por lo que estaba absolutamente sola. Por ende, me sentaba sola en clase. Hasta que ese día, en Química, se sentó Nick Rogers a mi lado.

—Hola —me dijo amigablemente, y yo le sonreí apenas—. Soy Nick.

—Lo sé. —respondí tontamente, y pegué mentalmente mi mano con mi frente.

"Bien hecho, estúpida. Ahora pensará que somos raros" gruñó Pepe el grillo en el fondo de mi cabeza. Aún en ese entonces era un patán.

—¿Y tú te llamas...?

—Scarlett —dije, y extendí mi mano—. Evergreen.

—Un gusto, Scarlett Evergreen. Bien, dime que se te da bien la Química, porque honestamente no entendí nada de lo que explicaron.

Drama Queen (DQ #1) [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora