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Tener licencia para llegar antes de las 9 tiene sus ventajas, esta es perenne por el revuelto que podría causar ya que es alguien del medio. Pero pese a eso, deseaba ingresar con la multitud y sentirse como parte de. También aveces quisiera ser revoltoso pero eso iba contra las reglas que le impuso la gente que está detrás de él. Tan aburrido.
Y su vida también, piensa mientras cierra su casillero.
— Baekhyun...—Alguien lo toma del hombro ejerciendo una leve presión para atraer su atención, no está sorprendido al ver que la mayoría ya lo conoce y aunque le ahorre mucho el presentarse, ansiaba hacerlo también—. Uhm, yo-
Es una chica de baja estatura y supone que de una clase menor, sostiene entre sus pequeñas manos una carta blanca con pegatines de corazones. Esta se sonroja cuando cruza miradas con Baekhyun, se siente un poco mal—. Oh, no debes ponerte así... es solo una carta, no hay nada de malo.
Ella le sonríe, nerviosa, tiene los ojos que demuestran diferente emoción.
— He tenido tiempos malos últimamente y, tú... me ayudaste demasiado. Tu música, realmente. Eres el único que me entiende pese a que no hablemos, lo sé, ridículo. Mi madre siempre dice que a ti no te importa mi existencia y, yo no creo que sea así. Yo- — Parece complicado mantener una conexión visual con él además de lo nerviosa que está, solo baja la mirada para ofrecerle la carta rogando internamente que se la acepte—. Solo léela, por favor.
Él toma la carta prescindiendo de las palabras de la gente que está detrás de él acerca de regalos de admiradoras. El pequeño cuerpo de la chica está a nada de desaparecer corriendo cuando él la toma del brazo, ambos sorprendiéndose por eso.
— ¿Cuál es tu nombre?—Baekhyun la mira, deja caer su mano porque tiene prohibido establecer contacto con admiradoras. Está comenzando a aburrirse de las reglas pero lo olvida fácilmente al ver la mirada desolada de ella.
— Seoyun.—Ella contesta vacilante.
— Tu existencia me importa, ¿sabes? Díselo a todos aquellos que no lo crean, ustedes son todo para mí. —Baekhyun dice sonriendo y enviándole toda la energía buena que puede hacia la chica mediante esa simple acción por que siente que debe hacer algo por ella así como ella probablemente hace con él comprando mercancía o quiénsabe, lo hace por una especie de retribución y de alguna manera porque es empático—. Sea lo que sea que estés pasando recuerda que nada es para siempre, el mal momento se irá y sonríe, ¿de acuerdo?
La chica, Seoyun, sonríe y vé por sus iris un brillo de emoción dejándolo conforme.
Baekhyun vé la hora por su celular— Estoy tarde, aunque siempre lo estoy, pero necesito ir a mi primera clase. Espero que mejore todo en lo que hagas.
Ella hace una reverencia y sale corriendo, después de que Baekhyun prosiga a caminar hacia su aula metiendo la carta dentro de su mochila.
— Oh, ya vino.—La voz emocionada de Borae junto con los murmullos que siempre ocasiona la llegada tardía de Baekhyun causaban cierta molestia a Xiyeon—. Tienes que verlo, Xiyeon, tiene el cabello de otro color. No puedo, es muy lindo.
