I'll be your Daddy [Todobaku]

Una verdad a medias.

***

Ambos permanecieron callados, Ashido porque esperaba una respuesta por parte de su amigo y Bakugou porque tenía un dilema interno, éste no sabía qué decirle.

"Mierda...¿Por qué tenía que preguntar eso precisamente? A ver que le digo ahora."

-¿Bakugou?

-No tengo pareja pero tal vez me guste alguien.

-¿Tal vez? Una persona te gusta o no pero no puede ser un tal vez.

-Eres una cotilla y una pesada. Eso es asunto mío, no tengo por qué contarte una mierda.

-Oh, venga. Sólo te pido que me cuentes algo sobre ella, como por ejemplo si la conozco o no.

"No parará hasta que le diga algo...Bueno, tampoco es como si fuera necesario contarle toda la verdad. Al menos por el momento."

-Está bien, deja de llorar. Te contaré un poco.

-¡Bien!

-Primero de todo, quien me gusta no es una mujer, sino un hombre.

Bakugou miró a su amiga fijamente esperando alguna reacción por su parte.

-Ya no quieres saber más, ¿cierto?

-No, no es eso. Yo solamente me sorprendí, no me esperaba que fueses gay. De todos modos, ¿le conozco?

-No, no le conoces.

-¿Y dónde le conociste?

-En la cafetería en la que estuve trabajando.

-¿Era un cliente habitual?

-Bastante, venía todos los putos días.

-Pero, si ese chico te gusta, ¿por qué lo dices con fastidio?

-Porque es muy molesto.

-Umm...No creo que fuese molesto, tal vez sólo quería ligar contigo. Oye, ¿y cómo es él?

"Ahora comienza la mentira."

-Tiene veintiséis años, el pelo albino, los ojos turquesa, es alto, fuerte y de piel pálida.

-Qué guapo debe ser. ¿Cómo se llama?

-Se llama Sho Hashimoto.

-Bonito nombre, ¿en qué trabaja?

-En una empresa, en Flames se llama.

-La cafetería en la que estuviste era gourmet, ¿no?

-Sí, la verdad es que tiene bastante dinero.

-Has tenido citas con él, ¿verdad? Porque no creo que te haya contado su vida entre pedido y pedido.

-Sólo hemos tenido una cita, nada más. No somos novios ni nada.

-Pero lo seréis, seguro.

-¿Cómo puedes estar tan segura de eso?

-Nadie tendría una cita con una persona que no le gusta.

-Supongo.

-Bakugou, una cosa má-

En ese momento el camarero apareció con sus pedidos.

-Hola, siento la espera.

El camarero dejó los primeros pedidos en la mesa y se fue.

-Buen provecho.-Dijo antes de irse.

-Gracias.-Respondió la joven.

-Bueno, ya estoy cansado de responder a tus preguntas. Así que ahora déjame comer en paz y no me hagas ninguna pregunta más.

-Vale, luego seguimos hablando.

Empezaron a comer y ya no volvieron a entablar conversación hasta que finalizaron su comida.

***

Tras haber comido, Ashido pagó la cuenta y se fueron de allí.

Una vez que estuvieron en la calle, la de cabello rosado quiso indagar más sobre Sho.

-Bakugou, ¿tienes alguna foto de Sho para enseñarme?

"Mierda."

-No, no le he hecho ninguna foto.

-¡¿No?! ¿Por qué?

-Porque no me gusta ni hacer fotos ni que me las hagan.

-Madre mía, qué raro eres macho. ¿A él no le parece raro que no le quieras hacer una foto?

-No.

En la cara de Ashido se formó una expresión de extrañeza pero decidió no comentar nada para evitar que su amigo le montase una bronca en medio de la calle.

-Pero, ¿tiene alguna red social?

-Sólo WhatsApp. ¿Por qué? ¿Acaso querías buscar una foto de él?-Le preguntó molesto.

-Sólo era por curiosidad, no tienes que ponerte celoso~

-¡Yo no estoy celoso, estúpida!

-¡Tranquilo! ¡Era sólo una broma!

-Más te vale. ¿Vas a seguir preguntándome más? ¿O por fin te vas a callar?

-Creo que ya no tengo nada más que preguntarte...Si se me ocurre algo ya te lo diré.

-Tks, ni te molestes. 

-¿Eh? ¿Por qué?

-¡Porque ya estoy harto! ¡No tengo ganas de responder a más mierdas tuyas!

-¿Sabes qué, Bakugou? ¡Vete a la mierda! ¡Encima que me intereso por ti! ¡Me voy!

La muchacha echó a correr. Bakugou no pudo hacer otra cosa que sentirse culpable por haber enfadado a su amiga.

"Tks, ahora debo correr tras esa idiota."

-¡Eh! ¡Ojos de mapache! ¡Espera!

Corrió tras ella hasta que, tras una larga persecución, la atrapó.

-¡Tchs! ¡Quédate quieta!-Exclamó mientras la otra trataba de zafarse de su agarre.

-¡No!

-Oye, lo siento.

Entonces Ashido paró de moverse.

-¿Te acabas de...?

-Sí, me he disculpado. ¿Y qué?

-Nada, es solamente que es algo inusual en ti. Pero acepto tus disculpas, Bakugou.

-Como sea, yo me voy a mi casa. Adiós.

-Adiós, Bakugou.

El rubio cenizo se dio media vuelta y torció por una calle hacia la derecha para irse a su casa pues estaba cansado y necesitaba dormir puesto que la noche que tendría con Todoroki sería larga, muy larga.

***

Notas finales: ¡Hasta aquí por hoy!

¡Espero que os haya gustado!