-Permiso, se que estuve mal. -Dije. Entrando a la habitación, allí estaba Alejandro a punto de ir a cambiarse.
-Venga tío, que no es nada. Pero lo demas si que no te lo perdono.-Aunque me habia contestado de buena manera lo segundo que me dijo fue en serío.
-¿Qué? ¿Demas?-No se a que se refiere.
-Este tío. Samuel. Me has dejado solo con el y no me agrada.-Parecía que de verdad estaba enojado.
-Pero... Vi que sonreías y hablabais mucho, pense que tal vez queríais...-Estaba muy desconcertado, sabía que a mi amigo le gustaban las tías, pero para mi era normal esa situación.
-Lamentablemente ha pasado eso. -Dijo. Seguía mirando al piso, como avergonzado.
-¿Qué ha pasado? Vamos, cuentame. Sabes que opinión tengo sobre esto, nunca podría juzgarte. -A mi me gustaban los hombres, no podía tratarlo mal o decirle que hizo algo malo.
-El tío es un pesado. Cuando nos dejaistes solos tomo mi mano y... Me dio un beso. Yo lo acepte, pero al ver que quería seguirlo solo me aparté, me dio asco. -La cara de Alejandro cada vez transmitia más desagrado sobre lo que había ocurrido.
-Chaval, que eso no es nada. Disculpame, yo solo creí que queríais estar con ese tío. -No me tendría que haber metido en sus asuntos.
-Vale, que te disculpo, pero no lo hagais más. Ca-Carol ¿Cómo esta? -Pronto cambió de tema, veía que esto lo ponía incomodo.
-¿Carol? ¿Por qué quieres saber sobre ella? -¿A mi amigo le había empezado a atraer mi hermana? Simplemente no podía creerlo.
-Venga... Nada pringado. Solo quería saber como se lo tomo... Ya sabes. -Su rostro había tomado un tono rojizo, sabía de que hablaba.
-Pues, no le agrado mucho, miraba a Samuel con mala cara. Pero solo eso. -No quería que se sientiera incomodo y decidí dejar las preguntas de lado.
-¡JODER PERO QUE PESADO! -Dijo Alejandro. Estaba mirando su movil, no sabía de que hablaba.
Ale se quedo callado por un momento y me llamo para que me acercara y mirara su pantalla, no entendía absolutamente nada. Cuando logre aclarar mi vista al movil vi que estaba en facebook.
Samuel de Luque
5 amigos en común. Confirmar. Más tarde.
No evite reírme la cara de Alejandro me hacía mucha gracia, verlo cabreado era muy divertido.
-Parece que eres muy guapo, mira como has dejado al tío. -No termine de decir esto y largue una carcajada.
-Venga Guillermo, que no es gracioso. -En su rostro tenía las mismas ganas de reírse a carcajadas como hacía yo, pero el pringado quería que pareciese serío.
-Vale, vale. ¿Qué vais a hacer? -Me daba envidia esta situación.
-Pues nada, ignorarlo. -Dijo. Creía que era lo correcto, pero el chaval me daba pena.
-No seaís tan cabron. -No era algo malo solo aceptarlo.
-Teneís razón, pero si me habla... No contestare- Algo es algo, no iba a presionar a Alejandro y decidir que debería hacer con su vida.
-Venga...-Ahora los dos reiamos sin razón, pero esta situación nos había hecho gracia. -Si quereis puedo presentarte algunos...- No pude terminar la frase que Alejandro ya estaba sobre mi pegandome.
-Que pringado eres, que me gustan las tías, solo queria probar.-Me daba pequeños golpes en la cara sin poder defenderme. Siempre hacíamois los tontos.
-Probar... A ver si ahora quereis probar conmigo. -Dije. En ese mismo instante salí corriendo de mi habitación, mientras escuchaba gritar a Alejandro desde la otra punta de la casa.
El día paso, decidí quedarme en la casa, con mi familia. Parece que para Alejandro también fue una buena idea, paso demasiado tiempo con Carol, eso me agradaba se los veiais muy bonitos a los dos juntos. La casa de mi abuela es muy acogedora, disfrutaba cada minuto que estaba allí. Pero ya no era ese niño que todos cuidaban, que mimaban, a veces extrañaba que mi abuela me pellizque los mofletes y me tratara como a un niño pequeño. Ahora todos cuidaban a Carol y Eva, mi prima. No se preocuban sobre que me pasaba ni trataban de aparentar interes en mi, solo mi abuela, muy de vez en cuando me hacía sentir como en mi infancia, tan pequeño e indefenso y a la vez tan querido.
Tantas cosas habían hecho que mi cabeza explotara, me sentía aturdido por mis pensamientos. Me dirigí a mi habitación. Prendí mi ordenador y abrí cada una de mis redes sociales, llevaba dos días en Madrid, pero quería saber que pasaba en mi pueblo, o si habría alguna novedad. Un mensaje de mis amigos. Algo. Cualquier cosa que pudiera despejar mi mente.
Me sorprendí al ver que tenía tres solicitudes de amistad, no era muy común, dos días pasaron de mi viaje solamente.
Frank Garnes
4 amigos en común. Aceptar. Más tarde.
Samuel de Luque
4 amigos en común. Aceptar. Más tarde.
No pude disimular mi sonrisa al ver el nombre de Frank, había cumplido con lo que me dijo. No tarde ni cinco segundos en contestar su solicitud, también acepte la de Samuel, a pesar de todo lo que había comentado Alejandro sobre el a mi me parecia buen chaval.
Después de aproximadamente diez minutos en los cuales hable con algunos de mis amigos. Me emocione al leer un nuevo mensaje.
Frank: Hola Guille.-No pude contenerme y respondí a su mensaje lo más veloz que pude.
Yo: Hola Frank! -Miles de sentimientos recorrian mi cabeza, nunca había sentido tanta emoción por un simple mensaje.
F: Como has estado?
Y: Muy bien. Y tu?
F: Me alegro, a mi también me ha ido bien. Qué cuentas? Tío. -No sabía que responder, no era bueno para mantener conversaciones.
Y: Estaba por irme a acostar, pero bueno... Trato de disfrutar los días por completo. Tu? -No había estado tan mal.
F: Quedaté un rato más... Disculpa, cuándo regresas a tu pueblo? - Me había pedido que me quedara, ya no se podían notar mis ojos, mis mejillas hacían que los cerrara.
Y: Esta bien, ja... Dentro de tres días tengo que volver.
F: Que pena eso, y quereis volver? Digo... Tu, tu hermana y amigo.
Y: La verdad que no, pero extraño un poco a mis amigos.
F: Lo entiendo... Tal vez podríamos vernos, me refiero a que todos juntos. No? Una despedida. - El queria verme. Esto me hacía mucha emoción aunque solo me pedia que nos reunamos, pero me encanto ese gesto.
Y: Es muy buena idea, le diré a Ale y Carol, pero seguramente digais que si.
F: Vale, yo le avisaré a Laura y Samuel, Bruno se ha ido a su ciudad y no vuelve hasta las vacaciones.
Y: Pues... Frank, me ha dado un sueño increible, te molestaria si me voy a dormir? -Era verdad, no podía mantener los ojos abiertos.
F: No hay problema tío, mañana me manteneis informado de lo que vamos a hacer. No te has quedado mucho tiempo :( pero vale... Un beso Guille.
'Un beso Guille' esa frase logro quedarse en mi mente hasta que por fin pude dormirme.
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La mejor decisión - Wigetta
FanfictionGuillermo, un chico de solo diesciseis años. Conoce a Samuel, pero no se da cuenta de que el, es el indicado.