Inalcanzable Y Bello

Problemas

WILLIAM

Salgo de la casa de Silvia, la noche se ha hecho y solo las farolas de la calle alumbran el camino hasta mi coche, una sombra apoyada en mi auto me hace presagiar algún problema, voy despacio y cojo mi móvil y le doy un toque a mi servicio de seguridad que no se encuentran muy lejos. Siempre he tenido que tenerlos al ser una persona conocida la gente a veces pueden traerte problemas.

Frank no tarda en contestar y dice que se encuentra a dos minutos.

- No sabía que ibas a traer a Silvia y a mi hija. Espero que no seas un inconveniente para mis mujeres.

- ¿ Perdón?, Que yo sepa tu no eres la persona más indicada para decirme lo que Silvia debe hacer con su vida. Y no te preocupes por tu hija. Está en buenas manos.

- No me gustan los tipos como tú, con su dinero lo quieren comprar todo.

-Creo que deberías dejar tranquila a Silvia, se llevó una fuerte impresión con lo de su hija, no le metas ideas erróneas. Es bastante mayor para saber distinguir entre lo bueno y lo malo.

Saco mis llaves para poder entrar en el coche, pero Erick se interpone.

- No te voy a dejar acercarte a ellas, no permitiré quitarme su amor.

- Creo que el amor de Silvia si lo has perdido, intenta no perder el de tu hija. Ahora déjame que me vaya.

- Algún problema, señor Tarner.
Frank sale de las sombras y Erick se sorprende.

- Vaya, veo de que te tienes que escudar en tu guardaespaldas, señor bien peinado.

-Ningún problema, el señor ya se va. Puedes decir a Vincent que vigile la casa. Deben estar seguras de que no las moleste nadie.

- A mi no me vas a detener entrar a ver a mi hija.

-Vete a casa, descansa y mañana puedes venir a verla. Déjalas descansar. Deben estar muy cansadas.

- Frank, acompaña al señor hasta su coche y si no puede conducir, hasta su casa.

- Si, será así señor Tarner.

Voy de camino a mi casa y el móvil suena, pongo el manos libres y contesto.

- ¡ Será posible que no hayas trabajado en todo el día!

- Hola mamá, ¿Que tal estás?, Creí que ya dormías.

- ¿Donde has estado, con alguna de tus amigas?

- No mamá, no es una de mis amigas,¿ Vale?

- Llamé esta mañana y me dijo mi secretaria de que habías salido corriendo con una señora que vino a una entrevista.

- ¿Te dijo algo más?, mira mamá estoy algo cansado. Llego a casa y me doy una ducha antes de dormir.

- ¡Pero hijo!.

- Adiós mamá, mañana hablamos.

Cuelgo y entro en mi parking. Subo en el ascensor y al abrir la puerta me encuentro con Laura.

- Bien, bombón. Muy bonito, me hiciste esperar media hora.

- Laura, mejor será que te vayas. Hoy no tengo ganas de más.

- ¿Has estado con otra mujer.?
Claro que si, hueles a moras.

- Vale ya, vete.

- Pero bombón, no me dejes así.

- No me hagas pucheros y vete ya de una vez o llamo a seguridad.

Furiosa coge su bolso y desaparece por el ascensor. Voy hasta la ducha y me dispongo a meterme dentro cuando veo el lápiz labial de mi bolsillo de la chaqueta. Silvia es una mujer que sabe lo que quiere. Y también es muy fogosa, lo puedo intuir por su pasión en esos besos. No quiso estar esta noche conmigo para poder hacerla mía, la quiero para mí y no pararé hasta poder tenerla. Y ese Erick está loco si piensa que me puede asustar como si fuera un niño pequeño. Puede ser que sea un tipo fuerte y mayor que yo. Pero no me va a hacer retroceder en mi propósito.